m í w 4f é * " % NATIONAL LIBRARY OF MEDICINE Washington «as**, .- Founded 1836 U. S. Department of Health, Education, and Welfare Public Health Service > ' I 1 ÜL *l Y 1í t ALEXIPHARMACO DE LA SALUD, Antidoto de la enfermedad, FAVORABLE DIETÉTICO INSTRUMENTO DE LA VIDA. DISSERTACION MEDICO-MORAL, que trata del Ayuno, y accidentes, que efcüfan de el, y que hacen licito el ufo de las carnes á los enfermos, y valetudinarios. EN UN COPIOSO CATHALOGO, SACADO DE tres Autores contra el femir de los Hereges, que lo improbaban,y también para desertar los vanos miedos de la opinión vulgar. DISPUESTO PO^ EL Sr. X>. yOSEPH FI^NC/SCO de Adalpica Dios dado, Medico aprobado por tí Real Tribunal, del Froto-Medicato de ejla NueVa-Efpaña.y ¿Mduo deSemras Religiofas Capuchinas de efla Ciudxd de los /jngeles, QUIEN LO DEDICA ^ zAl SSmo. Tatriarcba, y Fundador de la Sagrjda %eligionde la Compañía de fesvs San IGÍNXÍC10 T>E LOYOLA. Imprefio con las licencias necesarias en México: En el Colegio ^al, y MAS antiguo de S. Ilde/on/o. Año de 17 51. >-i T Rimo, Medico aprobado for elRealProto'Medicato de tfi» Coree. ExcMCVSr. Eltoperior^ecretaconqué!a dJgfítcíonde V,íxe.'-fehaférvidode honrar rri cortedad, exaltándola á el recomendable empleo, y de* ^licioío exerciciode reconocer efta Difíertacion ingeniófa» debiera íet gloriólo objeto de las mas rendidas expxefsioncs de mi gratitud, fi no temiera violar con la digtcftion e! breve preceptos que foto me pref» cribe la ceafuia, miniftrandomegenerofoel esfuerzo de que carecían mis débiles facultades para ocupación ran noble, y la ocafion, que apetecía mi rendiraieato para algún obícquio, por loque pudiera repetir mejor»-que ¡Aufooio. Incalidas Vires ipfe exttat,'^jrjvatídem] Epiíloí. ad Qhí jubete ob/equiumfufficit e/se meum. Thcodof. Mas fiendo Medico-Moral la «satería, y argumento de efte Tratado éñ exponerlo* ej magnifico mandato de V. Exc. á mi juyeio, practica-una . curación- tearavilicía} pues fi inftruidos de (agrado oráculo logramos la I(á¡. C*p.;l ©oliera de que fue pofsible un admirable Héroe, que renunciadle la fobe- y\ mf tanta de Principe, foj© porque no era Medico: Medicm non f#m>nQlitt conjittutxt me rr'mciftm. Para acreditarte V. Exc.de excelente Medico, Cendo excelentísimo Principe, pulf<3 fu benigna magnificencia la debiü-. alad de-mi animo, queadolece de la mortal enfermedad de la ignorancia, y aplicando el maTatilIofoPharmacodefu fupetior precepto» remite á mí ceoíara ella obra para que mi enfermedad baga crifis. Solo puede parecer eftrafiable» el que Ciado a£to Judicial, el que fe exerce en el feverocmpleo de lacenfura,Te encomiende fu praQita a la Medica facultad,que prafefío, por ello quitando la dignación de V. Exc» á eftosaO.remos el vulgar »fpe£tó de difsímbolos, baze veroGocil aquella , curiofa proporcioff» que confidero Galeno entre un Teatro Medico» y un Tribunal jurídico, por una plauííblefemejanza del enfermo at reo, de 7a ' »„ .enfermedad aí adonde los fynthorms a. los tetiigos, de la naturaleza al ^MPfOg ^bogado, y del Medico al Juez; ¿Bger (dice) e/i <¡ui afitnihtur w\ *##** ooít.texf|f. í fl vi» vimgtrh morhus; fyathomAtA ¡«htuttt vires tcflium; pátronns ejt ipf* n**** rt, Cjudicii TAttontm béttt Medicas, fui dejá/ute, dar morte ptojtrt fetii Pan dai yo la que V. £xc. me manda, he reconocido lo* méritos de la caofa, en la materia» motivos» y tratados de efta Diílertacion, en que uniendo fu Autor a la ingeniófa copia de lo literato el recomendable ali* eieetede lo piadofo, tocólos mas elevados ápices del acierto, al formal una (olida, y eficaz vindicación de la templanza, que es en ploma del cele- Arift. libí bre Eftaghita el mas eficaz ^f/exifharmaco para h tilüd'.udtftinenfid* 1. jtbthicg c*io conftre febricitdnti¡Amtáten¡> es fegun la elegante máxima de la Acá* demiaSalernitana, uno de aquellos tres prodigioíosc/í»*^'*' P*r* *°da Scol.Salfr. enfermedad,y dolencia: Mttuhiltns, reauitsJMiiii**? moderat* dieta. Y, flpud QOf0 es en fin fegun aphorifmo Sagrado, un admirable ditttttco inftrumtnto pa« lo ílan i ,aPro'<>ng»r 1» vida: xAvidttás apropia^uavtt ufyue ad cboier4m>qut a». \a r h ttm ál>íilt,tm eft* ddjüiet vjtém. Yafsipara perfuadir verdad tan proven y.i r.fcccn. cnofa jjtn coofp¡udo á cflablecer catholicos exemplaies los Elias, los Hf t 17* t* 34* lariones, las Magdalenas, los Pablos, los Diooyfíos, los Antonios, y tanta venerable copia de Anacoretas, y Cenobitas, que han debido a la abftincat cía una diuturnidad prodigiofa. Mas, porque tan incomparable privilegio ño fe atribuyele folo a portentos infolitosde la gracia, fe hizo también lugar en la limitada esfera de la naturaleza» acredítenlo para exeroplo, aun entre los Étnicos, los En- Celio Ro* ripides, los Antiftenes, los Eilenos, los Epicúreos,y por todos Galeno»que idig. io lib. en vulgar erudición del Rodigtnio, alcanzó por la abftineocia, no folo reí- 1 o. aotiej. pitar con faiudables anhélitos» fino el que fucile fu (alud probet vio de las Jccl. c. 11, unidades, dilatando haitacieoto y qnarenta años la vida, que acabó fin otra afección» que la feneftud prodigiofa á que le conduxoel Ayuno de cada diezdias, que creyó cficacifsfoo antidoto para evitar las enfetmeda. des mas graves, que pueden alterar, ¿ indifponer las acciones de la oatura< gis Curial Parece que en obfervacior. tanfaludable,y religiofa tenia piefenie aquel & veftig. abftiaente Principe la cordattfsima diípoucion canónica, que para pagas rhil. c. 6. a Díos 1* deciwa de los trecientos, fefenta y cinco días del año, manda ob< fervar los treinta y fcis, que median de abftinencia dcfdc la Dominica pri* mera de Quadragefsima, hafta la de Pafqua, a que en honra» y memoria de Iosquarcnta,queconfagróChrifto Señor nueftto en fu Ayuno fe anadie* transferido dtts annús & habet io ¿¿¿r: " *" """ r~m -»-*'-■'*-'' —dtcimés d« c Quad v6 De dor.de fe convence como irrefragable «axial, que fi rodos Uro r3e coDÍtc-virilus) pagaran efta Religiofa dezima, que con tan maduro acuerdo efta. dift, j. Meció k Sanu Ir»lcGa mieftra Madre, y púdico el Piincipe de los Medi« Q9h feíae fi» inda, «is íojjdas, y wrjfcft5$!« ÍH í*9Mͧdf i> y mas fej¡cea¿ y dilatadas las vidas, logrando la piadofe literatura det Autor él principal motivo de efta Diflerrecioo ingeniófa, en que blandiendo por ilufttcs ai» otas la pluma, defvanece vulgaridades, y vigoriza razones, que le deciden el mérito pata aquelcompendiofolemma,que á Chíroa efcribióun Era* Etebleír». Axxo'.yivijicát, Wdeftrmiti pues fia cite acreditaron los Mitológicos, no u.Maufc; folo de excelente en los arcanos de la Medicina, fino también de ¡jifigne u ' mA * en la**ricindel Cielo. * - m ** r ctuu Mata, Cbiron magne Pareas venandi, mxgne repertor HerVarum, CjtbaraquepotetJS}C¿elique per he: El Autor uniendo alas (olidas noticias de aueftra facultad deifica, en que es notoriamente laudable, los venerables dogmas» q*e mioiftra la verdadera fabiduria, que guia pata el Cielo» da en cita obra un mariifiefto teltimonio d« fu piedad, y letras»que le conftituyen acreedat á colocarte Lhtron reas feliz cntte mejores Afti os, que fi otros logran en las prenfas dar fus obras á lu¿ pata gloriofa ocupación de la fama» eftc eon la utili* dad, y nobleza del argu nenio da luz á fus obras, ganando en la Difteria* cioo, que imprime, honrofos tiofeos, que le hazen proptio el elogie, que & ouo cantaba Guillermo» Sicfuper bos te multa mtnent fferan tropbl Quippefuos tantum potuerunt promete luci, %nm9 tu lucem Ubris promis¡ at ipfe tuis. Pos io qual, y no contener efta obra cofa alguna, que fe oponga a las buenas columbres, ni regalías de fuM»geftad, me parece, que puede V. Exc. Sendo de fu fuperior agrado conceder la licencia, que fe pide,/*/* vomcJiorijitdtcio* México» y Agofto 3l»dej 1751, £>r. ©. Antonio de (fámhoi, y Titano. ^IT%t)TBÁCIOü^ DEL R. P. m. ANTONIO DE PJREDES, Profepo Tbealogo de la Compañía de Jesvs, Prtfeclo de la muy Iluftre Congregación del Salvador en la Cafa Profefa de efta Corte de México. Sr. Proviíbr, EL Alexipharmaco de la (alud, y antidoto de la enfermedad, pirro eí- pccioío del fecundo it.ger.io del Br. D. Vofeph Malpica^que la dig« nación de V.S.remiteaqjicenfura, paTa^jue cxa^í tnadoen el ?e- íodtl Saoruarioau meral, y.recorocida en elchrifol de la mas fe- jura Theologit, fu ley pueda falir a luz en beneficio del cooiun-, lleva def- ác luego mi aprobación, y aun juzgo, que debían darfe al Autor muchas gracias porhaver emprehendido un nvuv prolijoeftudto, nofolawente pa- ra atender, corro Medico,» la íaludcorporal, mas también pata aflegu- aar, com Mor ahita, tas conciencias, y lo que es mas laudable para per< /UAeniente general de Jos Reales Exerckos , Gentil;Hombre de la Cámara de fu Mageftad con entra- da> Virrey* ^ayernador, y Capit-aa ge- ncralcta efta N'uevaE*Efpafta, y Éreílden- te de f u Real Audiencia, vifto el parecer del Dr* D, JoícpL Antonio de Gamboa, y Riaño, Medico aprobado por el Real Proto-Medkatode efta Corte de Méxi- co, concedió fu liceneyapara la impref- íion de efte Libro, 'intitulado \áLEXl- tícmhr%4?:i7:scxda.iál f?^~*. &¿> cca Real A.udiencia] Cathedratico Jubi- lado de Prima de Sagrados Canóáes en efta Real Vniverfidad, Prebendado de fcfta Santa Igleila MetcépolitatiáV Ordi- nario del Santo Oficio, Juez i&ovííor, '-y Vicariogeneral de efte Arzobispado, &rc. concedió fu licencia para la impreí- fion de efte liibfó, intitulado 'ALBXh TñJtÜéMACO 2) E ^LJ&S ALV 2), bácien del R. £V M. ^Antonio de Pare- des^ Profeífode la : ¡Yo foy Séííor qti'tlfrptiede eh efte punto . De tu labia experiencia fer teftigo, Que engañado también de un mal barrotito Experiencias hizifte ya conmigo, Y ábftinencia, y Ayuno todo junto, Mediana,y faludporti cojpfigo. AL AL LECTOR. AMIGO Lf&or, un potaje te fcrindo el mas defa* brido, infipido, y aún amargo, que puede darfe á la naturaleza, mejor diré, que te prometo, lo. que no te doy, pues coroBidarte con la ábftinencia, equivale i no dar; pero que te he de hazer, fi si tratado, que h* eferito, affilopide. Y lo mases, que fipaíTasde vein» te y un años, efta's ya comprehendido ectre fus clau* fulas, 6 para obfervar el Ayuno, fi te hallas con faltidj ó para relevarte de él (i tienes cauía legitima, con* que de todos modos fiempre habla contigo efta Dif* fertacion. Ello es cierto, que los preceptos déla ley de Dios, el quinto, y ¿\ fexto fon arduos, ion d ifi ci* les, y muchas vez es repugnantes ánneftra viciada na= tuial'eza; porque perdonar ai enemigo quando cftein* juria, ¿guardar la pureza hafta en el penfamiemo; annquefe execura (porlagrckiadeDios) es á fuerza de vencimientos, y contra la exigencia (k la raifma naturaleza corrompida por el pecado. Y con todo, eftamos obligados a" la obfervancia de uno, y otro precepto, bajo la pena de culpa mortal; pues de la ímTmamaneraelquattodela Igilfcr, que^nos obliga del intimo modo, bajo la mifma^pna, no ha viendo legitimo impedimento. Y fi curiólo regíftras los pe* tiodos, y-ctaufolas de eflaDiffertacion,pareciendot£ arduo, y difícil lo que contienen; con fue latea quemas . arduo, y difícil es el quarto ayunar, porque por fin eo aquellos periodos hallarás cafos, y eaufas, que Iegíti= ?< 5. -mas mamante te efcufenjpéro en efte no encontrarás mas, que abftinencias, y prohibición, impueftas pot nu«f« tra Madre la Igleíia.... :i v , _ ..,;u[x # .. :^..[, Preguntábale uno c?e eftos^cjge llaman ¿acú» ^nos,, a un ConfeÍTor., P*üeriaconqencia quite§quicra una capa cVda fernana, tenia la hajbü^acion de huttaY muertas, y Te.. ^contentaba con una. No hijo le refpondio el Confefloj;, comoqfcueies te de licencia pata un pécadpiguálniehíe nocivoé tai,y a ti.Muchos quieren altercar con el Me* dico, que jes permita la} carne, ó efeufe delAyürio> ,-que fuera de embarazarío* quitan el tiempo con Jus controverfxas, y mucho peor íi es períbná de, refpée* t.o, ó fupófictonelqíue inténtala licencia fin legitima caufa, cprxio fi eftuviera en ruanos de aquel él difpen* far, n& cftendie»Ío(e fu autoridad a inasxque á ckela* lar loa cafos., ycaufas^que efeuian* una> ü otra abftu i r>cncia*. Por tanto pienfa haver ¿hecho muy [buena obra^aíE á coníultores,como á Médicosen éftéira* taditoj porque ni aquelI03 impórtunen/ni effo&íé e in« •■: fcarazen, que bañante tienen en que peníar con los. . enfermóla fin haug^le ocupar el tiempo en* que les re* gateen, como íucecíe^ las licencias corno ü fustán ge? íietosfle ja tienda»>f_, ■:.Xí< ¿i No te ofrezcopues^ otra cofa en efta Diflerira* t.tío%queuucompendiaen.c^ hallará junto le* , que en Josi Autom difperlo. ^ Lo^ráas ¡florido de efios t jpr oc mé pone rtépreíente, íoücitando andófo alPááte ( ??^íI"i54??í P°? notícias/fqua tuve de que^trátáfea ;de 'Áyu* Ayrmo,qiie puede haver llegado a' tus macos; pao quando vino á dar alas mías, ya yo havia trabajado mucho de efte tratado/ Y otras cofas, que tenia y© 'pesiadas, y no me atrebia'á pfoferiilas, me las hallé 'deífcües autoriza das en el dicho Padre Rod rigue zjqu e no rité dejéde'felfcitsír de verlas -apaotínadas de w 'tan"frfbtii'iWgehio. No obftame, no te la* véndeteos "tnoproprias, fielmente te las cito en los pafajes, que vcraVeti la primera, y íegunda pane de efta Differta* cion;"porque mi animo fue fiempre ponerte patente lo mejor, que dicen los Autores, ó 'adverfo, Ó favo&a» ble; Sin hazer me Sujeto de opinión (que no íoy ca» paz) ni fectario de alguna*, y por;e{To en b fegunda parte te pongo el Catalogo de enfermedades por ttes Autotes Médicos» y las razones, que da cada *no de ellos para permitir el ufo délas carnes, a eximii del Ayuno. En la tercera parte derrocando la opinión v ul« ga^qtieparanoobfervat las abftinencias, fe va' efta» bleciendoentre los de nueftra Región, queda á mi veer el campo por nueftra parte, quitado el aatemtu ral, que lo defendía. Única coía, que te prefen to pro» púa. Si las razones, que alego no te parecen, y quieres combatirks^declarándote en contra con otras* de mas peío, en razan, y experiencia fundadas-, de íde iusgo me rindo. Tan lejos eítoy de fentir me, que an* tes me alumbrarás, hazieudoine buena obra. Sábete, que fi algo bueno tengo, es, no haver fido férreo en mis dictámenes; porque para mí, lo que yo pienfo fiempie ha fido lo peor, no petíuadiendome a que efté lacettezá, y la verdad en loque efcribo, fiendo hombre, bien rudo, y nada do&o. Con folo lo prime- ro me fobra para creet, que yerro, y puedo alucinar» me, y eftirperfuadidoá que padeíco engaños; pero poxeftomifmo pido razones, y experiencias en con- trarío pata defengañarme; porque fon experiencias, y razones las que quiza me tendrán engañado. Por uU timo acabo con lo que dice el Padre-Thomás de Kem= ph,cjue no te cures de la autoridad del que efctibe,fies de pe* quena, agrande ciencia^ mas combideie d leer el amor de la fura iierdaJy no cures quien lo ha dicho, mM mira, que tal & el dicho* Recíbeme el deffeo, que tengo de íetviite. Vale. : i 'i ' Í-- -i.'. )'•* \ i ÍNDICE .Délas parces,y paragraphos,que '* fe contienen en eíta í r DiíTertacion. tucaon. Pag. i. PRIMERA PARTE. Declaranfe los motivos de efcri bir efte Tratado. - Tag. 8, $. I* Del primer motivo, Pag. 8. §. II. Del fecundo motivo. Pag. íi. $. II f. Del tercer motivo. Pag. 18. §. IV. Del qmrto motivo. Pag. 27. %. V. Condiciones para elegir opinión, Pag. 33. §. FI. sfdvettenctfácercadelas opiniones, <¡uefe bailan en efta Disertación. Pag. 36. §.P'II-DelAyuno,yfM<;onftÍMiVos. Pag* 39. §. 7*///.- Provechos del Jyunt. Pag. 44. §. /X Sentir degraVes Autores cerca de ali*** X1 tomos de vigilia, o carne en eftado de (anidad. - Pag. 40, $. *X* Sentir degravef autores cerca de las Urnes en tiempo de enfermedad. \ Pag. óo. JÍ1Í §• ». §. XI. Señales de dtbilidad,y de fueteas'* Pag. ¿7. §. XII. ¿údVertemmpnVifó par ala inte* ligenáa del Catalogo. Pag. £3. SEGUNDA PARTE. Catalogo de enfermedades por ¡ tres Autores, cuyos dictámenes deben confuirá ríe con los peri- tos de la facultad Medica, y ,fe- guir lo que eítos refolvieren, Tag. 77. i. 7. • Fiebres. Pag. 78.' §. 11. Jfiños internos de cah\t. Pag. 81. §. 111. Dolor Sympatbko de ube^a. Pag. 86. i. IV. ^Afelios de ojos. Pag. 87. §. V. J/eBos de oídos, narices, y bocal Pag. 89. §. VI. ¿IftBos de lengua. Pag. 91. $. Vil. ¿Aféelo? de bracos, difhtasiones, beridas,y ulceras. Pag. 94.1 § VIH. tjffeSlos de coraron. Pag. 96. s. IX. /ifetlosde pecbo,ypulmón. Pag. 98. $• X. úfenos de vientre. Pag. 102. XI. JfeSlos de hígado, y vafo. Pag. 10 ?• 1 í • XII. ¿ffeffti de mu ¡linos tenues. !»& 108. Jf(s8* $. XIII. Aféelos de inte/linos eraffbí. Pag. no» $• XIV. Afinos de uñones. Pag. xi2, $♦ Xff. oficios de partes > que pertenecen a la gene rutan. Pag.- 116. $. XVl. Afeólos de re laxación, o he mió I os. Vzv. 120. §. XVII. Vela concepción, aborto, y pirw. Fag* 121. 5. XV1IL AfeBosdelaáArúcuUcwus. Pag. 126. §..XÍX. aféelos del mis. Pag. 129. S. XX. ConValefcientes,'y habituales. Pag. 134» §. XXI. Edad de fe finta años. . Pag. i?c, $, XXII. Impedimento de aymarpor el tra* b<*jo9 cuyo examen quede al Coiu ffor- Pag, 139. TERCERA PARTE. De los argumentos, que contra el Ayuno fe fuelen objetar, y de las razones, que por el contrario prueban poder obfervarfe en ef- te Rey no. Tag. 142. $. I. Prueba fe la longevidad entre ¿fmeri* canos para que ¡e Vea, que no efta tan débil la naturaleza en eftos cIímm. Pag. 143.' $. //. La robufte^ de los americanos piw b^ifif pueden ayunar. Pag. ífu $. ///. Los alimentos (le la America fortfufi» cientes para poderxémnar. Pag. 162, $. IV. La tnala recepción, ^e fe juele/eguir álos alimentos de Vigilia, no ftempre de/obliga del Ayuno. Fag. 16$. APÉNDICE ALA DISSER- tacion Medico-Moral del Ayu- no. *Pag. 175. * f.« l Pag. i. DISSERTACION MEDICO-MORAL. QJJE TRATA DE EL AYUNO, y acceidetites, que efcafan de él, ■ ,YQ,UEHAZEN LICITO EL USO DÉLAS CARNES. i^CrmDvccioihc.. 2., UÉ COSA SERÁ AQUELLA (preguntaba el Grande San Gre* gorío) que tiendo la que efta mas cerca de nofótros, al miímo tiempo es también ia que tenes ínos mas apartada? Aquella que efiando tan junta, que ni un punto la lepara,efía mifma al mifmo tiema poeftátandiftartte,que todo un mundo de por mea dio la divide? Qu al ferá, mafque no lo adivinan > Una mifma cofa á un tiempo la m as cerca, y la mas lejos fon extremos encontrados. La mas junta, y á efle tiempo también la mas diñante fon términos repugnantes. Qué podrá fer* Pues mientras tes ntendolo tancerca.no lo aciertan, oiga nielo reípon» *r:~.....-"------ '""" ~..... de* í DtSSERTAtClON der al mifmo Santo, de quien es el enigma. Q*** Vtcimus eft carde noílro ? Qué cofa tenemos mas cerca, que el corazón? Ya íe vé, como que dentro del pecho: Et tamen cum "jper pravas Cogitationesfpar* gitur a nobis cor noHrnm, longiüs eVagatur. Y con to* do eflb; qné cofa mas lejos, que efíe corazón, quan*' do nos !o fepara en defíeos, andas, y cuydados to« do un mundo. Pues lo miímo proporcionalmente áotro afumo pudiera yo preguntar. Qué cofa fe * rá aquella, que eftando tan junta con la Medicina, queniun íolo punto la íepara, «ffa mifma al mif» mo tiempo eftá tan diñan te,.que todo un mundo de por medióla divide? Aquella, dixe, tan junta, que aun es la Medicina mifma, ó la mejor parte de fu» conftitutivos, y al mifmo tiempo eftá tan diñan* te, que apenas ay quien de propofito la torneen boca, ó la eícriba. Efta es, la que debiendo hablar cafi liempre, donde quiera que habla ladieta,no pa» jece, fino que ha enmudecido, para lo que es «atar con toda la dignidad qne íe requiere, quando fe han de permitir las carneSj 6 eícnfar del Ayuno* Efta c*> la que eftá tan lejos, como ello, de la dieta, debieft* do eftár tan junta.como que es dieta también la ab£« tinenciade carnes, ó el Ayuna 2 Qué cofa havrá mas juma,y aun infepar a} ble de la Medicina* no folo pata los fano», fino pa* ra los enfermos, que el Ayuno, q eftá ineltúdo en el >iSíuré^o9.iJ^i^dt^^^nd!Q de ella la maa PCÍ5 \smet>ico*mo%al: 3 perfecta confervacíbn déla falud,es al mifmo tiernU po la mas noble Medicina del alma,y el mas faluda* ble remedio para el cuerpo; como lo canta la Iglcfia i^)%iodanimabm,corpoñbkfq cnrandisfalubruer inftitu* In°r*!£ab' tumeft. Al mifmo tiepoeftá tan apartado,tan diftan=P° • ntIt| te,y tan lejos,que un mundo de por medio lo divide. Regiftrenfe losAutoresmas claficos,deíde!os prime- ros Héroes, hafta losdocWimos Modernos (excep* tuádo los pocos citados adelante) y fe hallara,^ diva* gados fus difcurfospor todas las partes de la Medí» cina,no les debió elAyuno,ni una differtacion fiquie* ra. Digo, no les debió, hablando, como hablo, del Ayuno, á qné nos obliga la Iglefia por fu Precepto. Qiie del Medicinal, figuiendoáHippocratcs fegun aquel aphonfmo (b) Et quitosfemsl, aut bis, ^tfUi.apSj •quitos plura ne , an pauciora% £¡f particulatim oporteat *l% offerre confiderandumt condonandumautem aliqtúd tem* pori, región, atati, tsr confttetudm. Ya fe vé, que no folo él nos dejó doctrina para efto, fino que todos fus Expofitores, y deináspraékkos declaran,como debe manejarte efta diera* * 3 No me haze fuerza, que los primeros, qtié Fueron acatholi eos no trataran de Ayuno. Pero de los que íe les figuieron tan Ghriftianos, como lo publican fiíseícritos,ignoro* el porqué ao tocaron de propofito una materia tan nrceflaria, impertan* te, é imprefindible de la Medicina, que á todo Me* dicocatholico le ©bliga?y qniíácon gasreftar, que otras 4 DISSEI^^ION. ^ ,otr,as materias. Pues de todo,(enferrnodev«ir)tey un años parararj:ÍDa es preciíTo faber, ^ la enferme» dad que tiene, le efcufa de ayunar, 6 necefita a co¿ mer carne, ó no? Y efto¿ es-tan fin efpera, que luego fe hade refoíyer.punto tan arduo, y*de tanta dificultad. Y aunque la enfermedad no íea de las mayores, fé permite licencia para que fe pienfeen ella; pero para el punto de la carne, fi el Medicó te« flexa, lo tienen por íobradamente efcrupulofo. Mi* .Ten, fi con razón decia yo, que-el Ayuno es la cofa mas cercana, que debe tener el Medico, y la que ef» tamas apartada de la Medicina. ** ,o . 4 Es la cofa mascercana: porque va i decir nada menos,quela relajación , ó quebrantamiento i- ' de dos Preceptos de nueftra Madre la Santa Iglefia, r que obligan bajo de pecado mortal. Y el enfermo defcaíga íu co^ciencia^ conel Medico: y efte eftá obligado, para defcar.garíe ante Dios, á difcernir de caufas, y accidentes, que legítimamente efcufan, ó no del Precepto; porque pertenece a la obligación de fu exercicio, finque íevalga el efugio de recur« íir á los Theolog©s> ó Juiiftas* á que le eníanehen, pues ni unos, ni otros en materia de naturaleza en» forma pueden juzgar. ¿. . , ,« ,;.-. 5* : c.-EftOfte haze patente con lo que le acaeció t á el ChriftianiíiriíBO, ymuydo&o ingenio del Doc* tor Don Juan Alonfo Ruiz Forítecha Cathedratico .Complutenfe [el primero de los Médicos, que ha .^,= """" UV ■ • ______A WdEDICOlMOtiLAL. j llegado a mi noticia haver eferito del Ayuno, y aun él lo dice en fu Dedicatoria] Urgido efte, quifá, no de efctupulo; si, del mas feguro cumplimiento del cargo de fu obligación, hallandoíede mas de qtiarenta años de edad, muy dieftro en el conocimiento, y manejo de las cofas naturales, trato ordenado de las no natura5 les, y feliz expedición en defalojar de los cuerpos las preternaturales,ó morbofas: fe confundí a,y paraba en el punto de concefíion de carnes á los enfermos, y ve» jado de efto, recurría á losTheologos,confultaba Ju« riñas: y qué le reípondian? Ya lo dice en fu proemio: JExfoftulantei' coram nobis taliter ad vos mittimm%qui ipfíus rei fudices% & examinatores eftis: nos etenim ¡olúm aufiori* tatem eceleftaftieam interponimus^ut illi obedientiam obftrin* gant mimftris St¿. Humana Ecclefta: ad vos vero attinet examinare, expediatné pro conferVatione humana fixlutis» pojfttne Ule je junare, hic autem fe cus: Me Vefci carnibm, ifte minime. Y con efte defpacho fe iba inquieto fu animo, que para hallar el confuelo,y tranquilidad^ue defíea. ba revolvió muchos libros, fe defveló, y trabajó por efpacio de quatro años, obíervando, y mirando: hafia que compufo las mas ajuftadas racionales, y difcretas reglas, que fe dejan ver en íu Speculum Medicina Chri* ftianae, dividido en tres luminares, que hafta entonces ningún otro Medico havia peníado. 6 Ya con el rrabajo de efte Autor teníamos lo bañante para en efte punto tener norma alternada en las enfermedades, para determinarnos, lo que debia* B ~" mos 6 DISSERT4CI0N mos declarar en punto de Ayuno, ó de abft>"n?nciar Pero comodefpnes á acá han eferito otros M-Hicosde efta mifma materia, conteniendo en sí pu uos de tanta dificultad; come también la hay entre rheolo» gos Jutiftas, y Médicos fobre el principal conftitutí» voeffeLicial del Ayuno; como entre folos los Mcdi» eos, fobre" bondad, ó preferencia de al memos qua= dragefimales,yde carne, variando las opiniones: re=' fiexando yo fobre materia tan grave, y de tanto pefo,'i temiendo no caer en aquel pecado Medico, que dice lib. 4 club, el Padre Lacroyx (c) Sifacile, Qfftne neceffltate, a jeja* s>. n. ijji. n¡0ahf0iVúty cawiurn eftim permittat. Atropellando jo?' diques de la cenfura,que con mucho, y fobrádófun* damentojpoi los cortiííimos alcanzes de mi infuficién-' cía fe me hayan de imponer; y viendo por el lado con* trario el cargo,y carga, que en el exercicio que obren» go me abruma la conciencia, pueftos en paralelo en la ftaticade la razón eft os dos extremos,huvo de in* clinarfe el equilibrio al lado de eferibir efta Differta= ciónj cuyo afunto ferá, defvanecer la vulgaridad, que para noobfervar el Ayuno, ó ábftinencia de carnes? eftá tan introducida entre las gentes. Lo que procura*' re probar, aunque con el baftardo eftilo hijo de mi ignorancia, que es muchiífima, j defnudo de toda4 erudición, y de aquellos adornos, que fon apreciabas ■ en un eferito; con todo pefando mas eldióhmen ¿¿ la conciencia, que como Medico me incumbe, per. donará elLedor el cumulo de hyerros, que defde MED1CO'MO%¿L. 7 luego reencontrará ácadapaíTo; no haziéndo apre* ció de las faltas,que eftas fon mía?; si, del afumo que como de materia tan íigrada debe quálquier Crm£= tiano mirar con mucha reflexión,^ 7 Y para preceder con claridadjo dividiré en tres partes principales. La primera deftinada á declarar los fundamentos, que_ he tenido prefeotes de mucho tiempo, los que obviamente no '^oHia expender en ci corroíe-fpaeio de riña con veri ácion^ítque aún ífen= do algo dilatado efte eTcrko, ha fido meneftet efpeciai eftudio, para quitar, ciñendola$*clau(ulas, y razor.es, que .rae han parecido masxongr;ueíHes. T,ambien en ella trato del Ayuno?;yrciícunft anecias, affi) 4e: las qué conducen, como de las que pueden impedir fu fácil cbíervancia. La íegunda parte fe dirige á feñalar. las enfermedades enquefede^i^asrexepipcioneSjó p?u miflbs de carne las de Ayuno-y I39 deuna,y otra áb- ftinencia, facadas de tres Autores, que en la materia no pueden fer mas ciáticos: para que efcója el Lector á fu gufto fegun j el juicio,..que.. íe hi^ieAC ^Satisfago juntamente á los que penfarea^qqeel fubftraher; en aU gunos la conceífionde carnes/no fqnefqrupulos, ni riV diculezas, fino di&amenes cuerdos ^eAutoresíapro* bados.r,Y |a tercera, á deshacer las r-azones, que por lo común, fe fuelen o.ppnet. control el Ayuno, ó comida de viernes'en efte Rey no. Y en todas tres partes fe no? tarandiípetfos uno, ü otro fundamento* pertenecien» tes á la primera parte, que en ella huviera fido, ó miiy. prol j \ o ^e52^adan1ente largo él ingerir. PRL 8 DISSE^T'ACIÓN PRIMERA PARTE. Dcclaraníe los motivos de cícribir efte Tratado. ■§. i; 7)el primer motivo. 8 ✓^ILA ADMIRACIÓN, EN PLUMA m^ de AtiftoteleV, es hija de la ignorancia; ,5- ^^ es madre tambiénde^jue nace la fabí3 ri9 \¿J duria: porque, de lo que por ignorarlo, fe admira, fe &g\iú con mas ccíriofidád, aberíguarlo; y de¡ fu abérígüacíon, fé logra fu noticia: Propter ad* mirari cwperunt huminespkilofopbari. En la mayor par* te de mi practica (confieffo mi ignorancia) me adrar» raba yo, dé que en materias efe Ayuno, y conceíTio» nes de carnearan losThéológos mas eftri&os,que los Médicos: yde fu aberiguacion hallo, que es al contra» rio: mas eftrechós, mas rígidos fon uno, ú otro Me» dico, qué efcríbíeron de propofito de Ayuno, que los Theologos. El-qüe quifiere facar efta verdad, no ha« ga mas que carearlos. Vea como epilogo de todos i el Padre Torrecilla en fu Catalogó de enfermedades; y por ló que toca á la permiífion de carnes/hallará \t raenftrnación, los granos por el cuerpo, dolores va* gos,: algunas crudezas de eflomago, que difpenfan por *i, efto és, que piden carne por sú Y en los Medu co£ qur?éfcr?b?érdn, dé ápá&, no hátWtt^ tí, que en las drenas' r^bldnciás la ¿óndéday ó psr'mtti; SrTsí aífofutámiéhíé fin difíincioh.* Por lo qué mira áf Ayuno, entré los ideólogos es corriente, qué la édád dtSfefértta años efcuTá dé emporqué la: vé jéz es en fét^ médaaV'Los Médicos^ cjné dé propofito1 lo trataron,1 ¿íi uttó/ríí otro defienden; pues á él dé fefenta, fi tiene; Fuerzas, ño lo efcufan del Ayuno; y á iá vejez, como no íéádecíepíta, la tienen por la más faná dé todas¡las* edades. RepetidiíTimas a efte tenor veo las dtfcótdan* cías en Jas opiniones entre Thjédlogos.y Medicós,qtie eTcribieron dé Áyiino, que paren no poca confufion. 9 Pero antes de examinarlas, fe debe fupóner¿.< qne ni a mi,ni á ninguno le aquietará la conciencia el que diga uñ Theologó grave, que eri los granos v. g. 6 íiiéhftruación, fe puede comer carné é'n diá prohi=< Bídó: de nada me firve.fu áfierto,fi hay 'Autores Me* di eos, que digan lo contrario. Ló primero: porqué Íli fe íabé, qué en materia de naturaleza enferma oíoslos Médicos fon los Juezes arbitros que ded= 3en,y los qué pueden juzgar íobre abftuienciádécar* lie en las enflrmédadés,é individuos, que las padecen* efto lo convence la razón, lo demueftra lanáotóridádj lo enfeñá la expérreíícta, y no ha menefter más prue= bá que ihfiíiuarfé, ]f5Írá tenerlo j>ór principio aftentado. lo ' ' ' lío fegundó: porqué los ThebtógoS, auh= qué'StíÚf ac?clols> en materia dé Ayuno, ó permiíTión . d£ car ne- e&Vaturaléiá enferma, rió fiéndó de fti pro* ■ C feflion, ¡o -DISSERTACION, feíTi°n>¿J taviendola examinado bien como facul» tadforaftera/no deben hacer opinión. Por el contras- lio, los Médicos, que trataron de Avum, y perraif* fiones de carne en enfermos,que Kaviendo examina» dola materia, tratadola de propofito, y vifto como propiía de fu facultad, hacen opinión. Luego efta es la mas probable, refpcc?to de la de los Theolo^os. Es a Ti, que aquella dice que en muy pocas enfermedades es licita la carne (y cfto, todos, loj que trataron deef». ta materia) luego es la mas apretada, y eftrecha, que la délos Theoiogos, como decia. . r,. 11 Que folo los Médicos pueden, y deben haJ ce.r opinión ertre todos los..facultativos, el P. Torre* cijla ló confjeffa; los Meditas dice,///? los que buen opi* nion en materia de enfermedades (d) Que en muy rocas J enfermedades fe deba permitir la carne, en los Medí» I eos, que efcríbíeron de efta materia, confía. Veafc á Fontecha enlodo fu luminar fegundp,PablpZacchias, [e] El Doctor D. Pedro León Gómez, Cathedratico Matritenfe, en fu librito de DilTertaciones Morales,y Medicas, en que inftruye á los de fu facultad en las obligaciones, que ignoradas*, ó no pueftas en pr aftica, les cargarán lamentablemente la conciencia. Y erl lo tocante al Ayuno lleva, que el mayor numero de enfet* medades^nonecejltadélasdi/penfasde.Aymo. Y en la pa* . gína ciento y doze, nutp.ero fe íenta y feis^ice: que hay muchas enfermedades^ tenidas en ti Vulgo por (afija) para J no obfervar tlPrtceptQ, (de no coger carne) que guan dan* NO — ^ medico^mo^l: ii dándole, fe pueden, no folo no augmentar }Jt no turar,y pre* caVer. 12 Y por fin el Do&or D. Fr.Antonio Jofeph Rodríguez en fu primer tomo de la paleftra Medica, y5 en el primero del nuevoafpé&o,dice lo mifmo. En que es digflo de notar, que haviendo efte celebre Cif= tercienfe eferito tan efttechamente (como él mifmó confieiTa en fu temo primero de la paleftra) en los peí» eos cafos, que íe deba permitir la carne, teniendo aprobación de íeis Médicos uno, y otro tomo: dos délos aprobantes le dan efpeciales gracias por la diser- tación del Ayuno, y pocos cafos, en que fe debaco. mer carne: y aífi por efta parte fe pueden numerar ef» tos entre los citados: y los otros quatro, fupuefto, que aprobaron, fon del mifmo fentir; porque de nó, hu» vieran puefto nota particular fobre efte punto. ^ §. II. 2)eíJegundc) motivo. „!-->] ,) ,_.,.« ..$]( *3 ^^UPÜESTA LA VARIEDAD DE las opiniones entre Theologós,y Mé- dicos, que trataron de propofito de Ayono, que fué el primer motivo,quc tuve prefente para eferibir: pues mirados aquellos, unos eftrechan. y otros amplían; y viendo i eflos, todos fueron eftr echando,cada uno mas, íegun fue» xon eferibiendo por fu orden; como confiará adelán* te. Antes de declarar el fegundo motivo, que me ef« ""- timulój *2 DIS$E<%r#CION tinuiló acoger la pítima^ hemos de feparaf ló titit* de lo nocivo: cfto es, fé ha de díftinguir,tonque es jtii» Ció, y dictamen prudente;de lo que lia trió vulgaridad. Sin tener á Ja vifta efta máxima neceffaria en todo cíi le eferito, fe confundirán muchas propoíicioués, que I en él fe contienen contra la vulgaridad. Mi fin priu* ; eipalesdefterrarelmjedo a' las abftinencias-, porque veo, quede él depende por la mayor parte la relaxa* cion de eftos dos Preceptos: no el temor racional, y fundado, que para diftinguirfo dei vulgarj y vánóy fue» ra de lo que aqui fe tratare, para eíTo.fon las confuirás con los doótos Médicos, quienes refolverán, y quita* tan ksefcrupulos, que puedan dimanar en efta mate= ría. Y aífi fe deben fcgrcgar los que fon jdiciofos, y cuerdos dictámenes de los.peritosMcdicós,como tam* t bien las opiniones de los Theologos, de las que lbüno vulgaridades de los intruícs,y gentes del vulgo, que aqui fe impropera». >r>, s 14 Efto, aífi entendido: digo, que la fegunda razón mía, ó fegundo motivo, como medió pararlo* grar aque.lfin; es el'poner en compendio ante los ojo* de todos, lo que dixeron los Autores Médicos,que tra* taton mas de propofitp de la materia. Y venerando i todos cojnóá mis Maeftros, recogí de los rnifmo* Autores Médicos lo que pude; para que por las razoí ríes de.ejlos, añadida una,ü otra réflexa mía aüeftros * difcrétiStmos Profeffoies, fegun fu ponderofo juicio* y doarina les den el penque diétate fü fabta experi» &dEVimM0%4L: 13 mentada prudencia, coadyuvada con las ocurrencias de cad a cafo. Y feotencien como Juezes, affi' en péfr mitir lascarnes*,corno en declarar,quieties eftén defo= blígados del Ayuno. Y affi. todo lo que fe tratare, y dixereeu efta dífiertacion,vá coia el animo írrefoliifo, expueftb al juicio deles Sabios facultativos, paraque refuelvan. Porque yo, ni me hago Sujeto de opinión, (quenofoy capaz) nifectariode alguna; por lo que nada tefuelvo: fino que como mero tranferiptor fac.rit fique guftofo la trabajofa tarea (que no fue poca) de traducir, y compendiar, lo que tengo eftudiado en el punto en beneficio del común de las gentes;. Ypuc» de fer,que en algunmodo, aun denueftrosProfMTo* res también; pues á aquellos les fervirá, para que fé ahorren de preguntas en muchiffimos cafos,enque fe les ofreciera duda, y íe les defvauecerá, quífácorr eftcefcrito,por eftár; en nueftro cafteliano: y á eftos tal vez, pata efcufarles el trabajo; que yo tuve dé re» gtftrai en los Autores, difpeifo, loque aqui hallarán junto, fi tuvieren gufto de ledo. En los lugares, que carefeande Medico1 podra también fervir de alguna utilidad! en donde el Cura del Partido, ó la perfona de mas inteligencia fuele hacerlos oficios del Medis co, por no haver otro> que defate las dificultades 15- Y porque el Pádt* D;Fr. Antonio Rodríguez apretó tanto la cuerda en efta*materia, como lo con*1 fle-íTa, junté en el catalogo, a Fontecha,y Zacchias, que no eftreehan tanto* a' que efeoja el LetStor fegun D los 14 DISSE^TACION ' loscafos, que ocurrieren aíTentando para éfto algunas máximas muy conducentes,á elegir opinión que trae el mifmo Padre Rodríguez, y me han parecido arre* gladas,con lasque féguramente fe pueda proceder; Pero aunque el citado Padre fe manifiefta exercitado en la Medicina, como lo prueban íus cinco tomos de la paleftra Medica, y confia en el principio del pris mero por lacuracion, que hizo ai Doctor D. Benito Bofal, Medico del Monafterio de Beruela, deque ha* ce relación en carta efcrita al mifmo Padre, de diez y ocho de Febrero de 1734. Sin embargo, los otros do$ tienen mucha mas practica experimental en el manejo de enfermos, para dar la fuficiente fuerza á íu opinión. r6 Affi también fe hallaráu varias autoridades de eftos mifmos Autores Médicos, y de otros, qud por proprias para el aíuntc, y efpecialmente por cía» xas, parecen indecorofas contra nofotros los faculta tí» V03,aunque en realidad no lo fean: fin embargo no las omití en efte eferito: porque fus Autores no las profiV rieron con el animo de laftimar,ni que firvan de, ofenfaá ninguno de no (otros, que pareciera cofa in* creíble,fiendo ellosProfeffores. Sino para manejar* las como armas defenfivas contra aquellos, que fin le» gitimaeaufa quieren les permita el Medico las cap nes, ó efeufe del Ayuno. 17 Aún nos queda en pía otra dificultad de. granpefo, que vencer, y es: que no folo los curande-" - .. xos» MEDICO*MO (g) ^ •a r» j an^celTor, o coetáneo de efte fue Bap= el Catalogo tilia Codronch (que no he podido hallar) pero fegun lcSn- m* Fontecha yZacchias,que lo citan, fue del proprio IVUft mentir, qUe Fontecha en efta materia. Nodeícaeció Wo$t enelgranjiiciodeZacchias la opinión de eftos, y hal» lando íanjeados los fundamentos ds ellos, adelantó otro poco la materia, alargando amas enfermedades las comidas de Vigilia; pues en algunas, que Fontecha concede carne, eñe no la permite: no por oponerfe, jegun pienío, fino antes por adelantar mas: quifá con a mas practica, fe havriá ya perdido algo el miedo á lascomidas de Vigilia. Y haciendofe cargo de los argumentos, que contra ellas fe pudieran oponer, fa" tisface á ellos con el defembarazo, y folidez,que acof* tumbra. -^ _ - 30 Y viniendo a las legumbres, que en los mas capítulos de la pradica improbaban les Antiguos^* ce: (h) ^gumina^&frumentacea^.nonimprobandaviden'- \^l\m tur}cum altas mdiocreprtbeant alimentumwftm etiampr** vsüa »* ter 24 TitSSERT^ClON terh¿cyplura legummurnl quaj (omito aqui las citas de efte Autor) in qui* Itffdam morbisagrotís offenmtur. Ni á los alimentos de hortaliza defprecia, pues mas adelante dice: Ñeque olera Vituperanda adebfunt. Y alega el lugar de S. Pa* id Rom.c. tío (i) qui inftimus eft olus manducet. Démosle entre &4« *• *• efto tamito lugar á nucfíro maiz, cuyos atolillos ex. perimentamos íaludables en fanos, y en cafi todos en. fermos. Efto tenemos defpues del vuentur legumina de los Antiguos. 3r Los ojos linces del Reverendiffirao Padre Maeftro Feijoo, que todo lo regiftran, y en todas fa« cultades dan fus ojeadas, aunque no es Medico de profeffion, es atendido fu voto entre los Doctos. Ef* ". tepues, con doctrina de los arriba citados, y del in= geniofiffimo moderno, el Doctor Martínez, adelantó la materia en efte punto perorando con las fentencías de los mejores Médicos á favor de las comidas de vier. nes. Poco defpues falió el Ciftercienfe Benedictino D. Fr. Antonio Jofeph Rodríguez, quien con mas brío, que todos, cftrechó masque ninguno: ó por mes jor decir, alargó mas el ufo de los alimentos de vigíe lia^ue otro alguno. Tanto, que apenas deja cnfer= medaddignadelacomeftion de la carne, exaltando lospefcados,hyerbas, y legumbres, y dándolo experi» mentado en cafos prácticos, que fe ven en fus tomos deja paleftra Medica. ' " ~~~ " "~" ~ q médicO'MOGíal: ^ 32 O la mucha privación de carnes, ó la pres ferencia de los de Vigilia, que juzgó el Doctor Don Pedro León Gómez, defendía el Ciftercienfe, le im= pugna en fu librito de Difiertacione:-: aunque por una propoficion,que fe halla en fu apología,confta, que entrambos convienen, en que en las mas enfermeda= des, no fe neceffita de la carne para fu curación. Conque yá de todos eftos feis fe haze un cuerpo de no poca eftatura,que dan la baftante,y fuficiente' pro? babilidad (como vereYncs,quando fe trate de las con* (liciones, para elegir opinión) al ufo no dañofo de las comidas de Viernes en las enfermedades, que pref* criben, y á lo.fáludable de las abftinencias, en quienes puedan: fin embargo de la prohibición genetal de aquellas-en los otros Autores Médicos, que noefcrU bieron de Ayuno. 33 Dixe al ufo no dañofo de las comidas de Vier* nes en las enfermedades; pues quando en algunas hallan que lo es,las deícartancomo es cierto(j) Por loque (j) es digno de notar, que haviendo concedido las carnes qI^oiÍ el Padre Rodríguez á los hipocondriacos, y efcoibu* que dice f¿. ticos en quarefma por lo danofo de las legumbres, y techa.R.ij>0 peícados falados en eftas enfermedades, y fer difícil y ZOj* huir de dichos alimentos en el largo tiempo de una Quarefma. Con todo, priva la carne en las abftinen* cias de femana á los mifmos pacientes; pues dice,que los huevos, y hyerbas, que fon alimento mas proprio en eftas dolencias, pueden muy bien refocilar uno, ú t „„„—--.. r--- /..--------- ^ 26 visseiítjcion dosdias. Miten lo zelofo, que anduvo efte Autor en la obfcrvancia del Precepto, y juntamente cuy dó,que no fe les figuiefie daño á los pacientes. 34 De todo lo dicho fe infiere, que aunque al- gún Moralifta vertiefíeenunlibro que pecaba mor» talmente, el que adminiftrafle el antimonio,y que no fe debía fangrar, ni purgar á las preñadas, por los fundamentos fobrados, de que aquel era veneno en cpinion de muchos Médicos: y eftas eran anteceden» te fegurodel aborto en fentencia de otros Médicos. Confiando yá por íobradiffimas experiencias, que el antimonio es inocente: y que la fangria y purga en las preñadas, que la neceíiitan,erTectivamente fe practican, aún para precaverlas del aborto, defde el principio de fu concepción hafta el parto: digo, que faltando y á aquel fundamento, en que eftrivaba c 1 af- ierro del Moralifta, configuientemente falta el peca» - do. Pues de la mifma manera en nueftro cafo: aun» que íe lea en dos, ó mas Moraliftas ciáticos, que en efr. te, ó el otro afecto fe deben permitir las carnes, ó efe ufar del Ayuno; porque fegun Pedro Peromato, la carne es nece fiaría para cobrar la fangre,y componer los hu* mores; derrocado efte fundamento por los Autores Médicos arriba eitados,con la feguridad de los de Vi= gilía, fin daño de los pacientes en el modo, que pref» criben, y confiando la bondad de dichos alimentos Con abundanriffimas experiencias; pues ranchos de ellos foii también pafto en los días de carnes, parece fale la confequencia á favor de eftos Autores. Cer» &dEVICOlMO%AL. 27 37 Cerca de todo lo dicho, noto, que affi co« mo no feria jufto, el que porque la Medicina practi * ca'del dia de hoi,y fus Autores enfeñan,que las pre» riadas, que lo neceífitan, íe purguen, ó fangren, aún para precaver fe del aborto: no feria jufto, digo, que fin confulta de Medico las gentes del vulgo, ú otra qualeíquiera períona las mandaíTe fangrar, ó purgar, con el fundamento, de que affi lo enfeñan los Autores dehoi. Déla miími manera en nuéftro cafo. De que fe infiere, que affi como en elpunto de fangrar, ó purgar á una preñada fe neceffita de Medico para fu execucion, no obftante, la doctrina de los Autore3 Médicos, que lo enfeñan: affi también fe neceffita de Medico para el aciertode las conceffiones de carne, ó cícufas de Ayuno en los cafos de enfermedad, no obf» tan te la doctrina en ios libros de los claficos Mor a liñas. §. IV. Del quarto motivo. 36 T[ A SEGUNDA CAUSA COMU» I niffima de la relaxación de eftos dos *-^ Preceptos, es la copia de intrufos cu? randeros, que abunda tanto en las Ciudades, como en los lugares donde no hai Medico. Eftos pues al mo* do que andan á ios alcanzes, aiTechando las recetas dé los ProfeiTores para fus curaciones, á effe mifmo, y arún con mayor audacia fe portan en el punto dé con* ceffiones de carne/y «xerapetanes de Ayuno; porque 28 DISSERTACION vén, que les fabios facultativos en las debidas círeunía tancias, y con conocimiento de las perfonas las cpnce" den. Ellos fin uno, ni otro, abufan de la facultad, que no tienen. Efto, que es frequentiííimo en las Ciuda- i. des, con mayor laftima es mucho mas común, y cor" \ tiente en Pueblos, y lugares cortos, que carecen de Medico, comopuedeconftarlealquehaya falidopor effos territorios. 37 Y aTi, no fe vé otra cofa en el vulgo fino comer carne fin neceffidad alguna; por qualefquiera ligero accidente íe relaxan dos Preceptos, por una ef= terilidad, que las mugeres llaman eftár pafmadas, comóyá héexperimentado.Ylopeor es,queno ayu» nando, comen carne aún en quarefma, que es circunf* ¡ rancia agravante. Y fi fe pregunta porqué ? Refpon* den luego; porque el Medico me mando, que la comiera ndamivida. Y llegado á averiguar, quien es el Me* dico; efte es un Cirujano, que fiendo efte cafo de Me» dicitsa, es ageno de fu profeffion: ó es el Señor fulaníto curandero. O lindos Papas, que yá difpenían dos Pre» ceptos de lalglefiapara toda la vida/ Oigan al Padre Bafíeo, aún hablando con los Médicos (K) Qu¡ cautt debent efie (Medíci) in concedendis licentijs adearnis edendas ufum (atención) nec facultatem abfoluté exhibeant::: y pro* figue, alias arunt reifraSlionis duplitis PrJC0lMORALl 29 Médicos, que debe fuponer muy bien mftruidoseri: puntos pertenecientes á fu profeffion, tanto les encar- ga: fkcültatem abfolute exhibeat; alias erunt rei duplicis i frrtctpti. Qué cargó fe les hará, á los queno les toca? Véanlo allá los curanderos; y lo peor es, que es cor* riente practica de eftos. Vá un penitente ai Confef» íor. y le confulta fi podrá córner carné" porque eftá enfermo. Efte rcfuelv e, que juzgue el Medico en ef= tacaufa. Aguarda el pobre enfermo la coyuntura de hacer fe encontradifo con qualefquíera de los que an* dan vifitando; porque para efto, en fu concepto no üiii hai elección. Y con efecto en un zaguán, ó pafadi* zo, ó puerta de calle, feie quexaá Señorfulanito;que dicen, es muy acertado) de que padece, ó fiaros, ó ín= difpoficion de eftomagoy&c. (Que ajuicio de un í-':~ Medico docto pudieran no impedir las abftinencias)Y fin mas examen, que la practica corriente íuyapú mas facultades, que las que él fe ha tomado, en un ¿nftan= te yá difpenfó carné,y Ayuno para toda la vida. El penitente, ó enferrrio con el fegu.ro, que tiene la tal licencia, no íe vuelve á acordar de femejante punto en muchos años. xt:xXjr .-■.. -~ : : 39 Y aunque los Predicadores peritiadan en los Pulpitos* y en los Confesonarios aconfejen, y dirijan á el Ayuno, de nada aprovecha, fi el que íies nen por Medico, dicelo contrario: mas fuerza^nia* yór impreíliotí hace unapalabrade efte,que las per* fuácioncs dp aquellos;porque como fe juntan dos co- v--.- -- H .. -- --fas 3o TiISSERTAClON fas tan aprecíablesá la naturaleza, que fon, el comer carne, y no Ayunar, la una; y la facilidad déla copia de intrufos en las dífpenfas, la otra: de aqui nace en gran parte lo detetiorado/que fehallahoi efte Precep» to delalglefia,y los muchos fequaces,que tiene la relaxaciondeél,tanto,que yá íe vá haciendo ley el no ayunar, y comercarne por la mas leve delicadez, y íe alega por coftumbre. 40 Para efto oigan la admirable deflexa, que RcB Chríf. traéclP. Nepueú (1) fefcCbrifto no dixo, que el era la nan. Hen coftumbrr, fino la verdad. Por muy authori^ada, quepa* 1 *' re fea eBár una coftumbre, no puede preferible contra la Ver* dad. Y para lo otro, oigan á el gran Zacchias, aún lík f.iíi.i. hablando de los Médicos imperitos (m) Eorum (Me qusfU.n, 1. dicorum) alij 'X. I :jejunium Ínter praditla remedia prajei* puum damnare non audent; fed vel mínima ex caufa legiti* me quemcunqiie excufari ab ejus obfervanua volunta undé non modo leviork prafenüa-yfed timore futuri, jrjunium, quantum in fe eB>dfm tfgrotis, Qf confultonbus frangí permittunt::: fjt ergoferiptis etiam falfam hanc hypothe* fimy t?c. 41 Oigan á mayor abundancia a S. Gregorio, y Santa Therefa, citados por Rodríguez [n] Multi fuis tom.i.nuev *it$sfaventyQf* quod obcawis Voluptatemfaciunt,adne* afpca. psg. cej/tatis refmmt adionem, Qf fub infitmitatis Velamine, '3o?* iritium voluptatisexcufant, dice el Santo, y Santa The» refa: que el diablo reprefenta flaqueras en la falud, para que no fe obferVe el Ayuno. Oigan a Fontecha tratando de los medico*mo ad al i* quidulteúus difpenfatus (fupongo, que efte terminó difi perifatus,que affi efte Autor,como él Padre Rodríguez, que frequentemente fe halla en fus authoridadesjío entendieron en el feritidb vulgar; no cu el rigórofo de las Efeuelas) 44 - Sobre las palabras antecedentes, que nos cha Fontecha, bien fé, que Santo Thomás añade las figuientes, con que fe explica. Si Vero aliqnis natura Virtutem debilitet per jejaniajta ut nonfifficiat debita opera fa)t exequi, abfque dubio peccat. (q) Parece, que el Santo'ha* 2tTdi8?in k'a en aquellas, para el eftadó de enfermedad; y en ef« ¡corp¿ tas, para el de falud, la que no quiere fe debilite poí los Ayunos, que refulte en daño proprio, ó de tercera perfona, como enlas mugeres preñadas, y lactantes,y en los que tienen1 ofició, de que pueda depender la vi» da, ó íaludde otros; Eftos, y aquellas pccarán,fi:Ayii» nan. VUEVICOtMO^AV. 3$ naryíonáy duda,quando por los Ayunos Te debiliten. Pero no porque las palabras del Santo les efcufen el Ayuno, de ellas fe ha de inferir preciflamente, que ef* ten obligadas á comer carne las tales perfonas,fi pue= den cómodamente, fin detrimento de fufalud comer de vigilia en dias prohibidos, aunque no ayunen. Pe= ro quien duda, que de la miíma indeciffion, que pare" ce en lo aparente, que réfulta de unas, y otras pala? bras; y porque eftandoefte mi eferito en caftelíano, que llegará á manos de qualefquiera". quien duda,di= go, que es mas neceílario por elTo recurrir, no á un curandero, fino á un Medico docto, á que refuelva lo que juzgare mas jufto en la materia. §. V. Condiciones para elegir opinión. ¡4j T A PRIMERA MÁXIMA SEA: QJJE I como dice el Padre Rodríguez (r) todo nu «L^ Theologo fabe,que la nobleza de la rom, opinión probable, con la qual fe excluye todo peca= do, confiftepn que la fuerza de fu razón fea tanta,fju« fuponga en el entendimiento por la verdad, que fe bufcaba. De modo, que quedando en la efpherade dudofa,por el temor deque la contraria pueda fer cier» ta, fatisfaga fin embargo prudentemente á nueftro en» tendimtento. Affi lo firmó la infigne Academia Be* nedictina de Sama Catarina de Genova ,en fu exceien* te enfis déla probabilidad. La ra^on debe fer fuerte% dicen, quk ratiQjdekt ejfe talis,ut intelljclus poffit pru* I den- m, ra.de 3* DISSERTACION denté y judiare, ohjeBum tale efie, quale per talem rationm reprefentatur; aliter ratio efiet debilis, tenuis,&* infirma, adebque omnino infujficiens ad añruendam probabilttatem. (pag mihii4) 46 Se logra con obfervar efta máxima (dice el citado) el que no fe haya de hazer.tanto aprecio de algunas propoficiones, precilTamente,- porque las fi» guen tantos, y quantos Autores; fino que primero an* tes de feguirla, y apadrinarla fe debe averiguar el fons do de fus razones,y la fortaleza de fus fundamentos. piiadoxr 3. ^ en olfa parte: (s) comoquiera que fea, aunque rail numiis Autores lleven una opinión, aunque entre ellos has ya Santos,y Doctores, fiel fundamento, fi elporquelst defienden, es de menos momento, que el que uno fo* lo eftablefea, nada de fuerza le debe quedar á la opi» nton de les mil Autores. Y folamente deberá fegutti fe, y mantenerle en fu derecho, en tanto que no haya, quien mueftre razón mas bien fundada.Miren con ef= ta doctrina, qué cafo fe hará de la opinión del vulgo pSía el Ayuno. 47 En el numero quarenta, advierte, que de»' fcebufearfe, y faberfe eleftadodel fundamento de la ■opinión, fi corría antes; y quando íe tranícribe,.yá fe debilitó, ó fe arruynó el fundamento de ella. En otra parado*, 1. parte dice: (t) que hay muchas opiniones, cuyo pri» | num. %y. mer Autor íe fundó en una razón muy aparente,á bien librar, ó en un error, ó quifá en una tazón, en que tu» vola mjiyór parte fu paffion,óTu temperamento. Y ¿ef; medico^uo^al: 3r defpues le v an figuiendo todos los que efcríbíeron pof* teriormenteá é\,velutovís ovem, como dice el P. La* eroyx, fin mas examen, que el material de léi la pro« poíicion y mirar el lugar para citarlo. Caíi todas las proporciones condenadas feefcribirían aífi. 48 Y concluye: fe obferve, lo que quieren los claficos Moraliftas, para que fea probable la opinión. Efpecialmente el que íe funde en motivo abfoluto,y nfi feBiVamentegraVe. Eftoes, no porpaffion veherrens te, no por pertinacia, no por defordenado afecto, y mucho menos, por no haver eftudíado, é inquirió o,' quanto fe pueda en la materia,hafta véi,fi acafo pudo darfe con lo cierto. Efta es la común de Sánchez, Layman,Terillo,y de otros muchos citados por La= croyx: nitensmotivo abfoiutegrazi,ideft,fecundüm feg*a* vt, (sr non tantúm ex accidente, v. g, ex vehemente paffio* ne, ex pertinacia, ex inordmatione affeBus, ex negligentia inquirendi Verum[tom. 1. pag. 9. num. 108] 49 Defpues en el prologo del fegundo tomo de la paleftra, dice: Las circunftancias, que hazen pro» bable la opinión, fegun el Padre Babenftuber, es lo primero, que debe fundaríe en razón firme, no en caá pricho: qua ratione nitatur, deben íer Autores claficos, (científicos, y prudentes, los que la figón, deben fer ve» ) races, no folo in loquendo, fino in cognofcendol efto es, que deben fer peritos en la materia de la opinión, de tal modo, que faltandoqualefquiera de las dos veraci* dades, ks falta la probabilidad á las opiniones, Affi el 5¡i 3« VISSE^TACION citado (artic.i. pag jo)Vtralsbet iftarum veracitatum deficiente, ío///'^ autboritas-adperfuadendum rafionabilem aflenfum fuffici que fe hallan en ejla Disertación. 50 A DVIERTO; PORQUE IMPORTA il-5k para la genuinainteligencia del pro* X 5a» greíTo de efta obra, que en quanto digo de opiniones, no es dar á entender, que las figo, ni las eftrechas, ni las laxas, ni las medias. Solamente las tranferibo, para que el Lector á íu gufto, íegun la probabilidad intrinfeca, ó extrinfeca de cada una, íe acomode á la q en fu juicio le parefca mejor.Yefta mií» raa regla, fe ha de obfervar, ffi en la del conftitutivo j efíencial del Ayuno, como en las de efeufas de Ayus no, y carne: como también en la preferencia de ah> raentos quadragefimales, ó de carne; pues con efta re» fie» Medxoimóral: > fleicá pongo todas las opiniones de éfta Sateriat, y los •fundamentos de fus Autores, para que el Lector juz« ' gue. No porquediga yo, en tal enfermedad fe come carne, fegun tal Autor, fe píenle, qué sffifa figo, y fe me forme antilogía-, con algunas de las razones, hafta aqui efcritas, y que en adelante própifiere: fino,que íolo fe haga juicio, deque lo refiero fielmente. yi Doy exemplo para explicarme. Dudando Fontecha en la quinta de fus dudas fobre un enfermo, no urgiendo mucho la enfermedad, como la tercia» na nota v. g. la quartana, &c, fi fin difpenía, y ca» reciendodcBula,fe permitiría á efte enlaQüarefma el ufo de la carne: dice, que la refolucion de efto fe la dio un TheoJogo infigne (u)y fué,que íi el tal enfermo, fi mediante aquella enfermedad (aunque feguraj fe pri= íum,r Vaba de fus operaciones necefiarias, puede el Medico concederle h carné; porque es bailante la tal neceffi= dad; Y efta refolucion yá el á cada pafib aplica en otras enfermedades. Por entonces palTarla efto, y tendría vigor. Hoy yá fe mirarla con diftiuto afpec= to. Lo prímero;porqúe Fontecha como primer Autor del Ayuno entre los Médicos, andaba dndandoiypre» guntandó, yá alTheologo,yá al Jurifta^comoconfs tá de fu prologo. Hoy no hay nfceffidaddéconfnltar alTheologo énpúnto que debe juzgar el Medico; porque han eferito otros Autores-Médicos lo fuficren» te^como tenernos dicho én el principió.] rv ^ K Lo 3^ ptSSERTJClON ¿2 Lo fegundo; porqueá el Theolpgo¡ nó 1* toca juzgar de fuerzas en enfermos, fi fean duraderas, ó no; ni el origen de ellas, ni menos de alimentos, y fusqualidades,ó elección de ellos: ni de temperamen» tos, y climas, ni de otras cofas á la dieta pertenecien» tes. De donde fe infiere, que hoy no valiera parami laneceffidad de la carne en el enfermo, declarada por el Thcologo,preafomente, porque fe privaba de íus operaciones, haviendo adelantado los Autores Me» dicos otras razones, á mi parecer mas fuertes. Y con todo, enlospafa jes, que cito de enfermedades que trahe Fontecha, que íe verán en el catalogo, lo refiero, como ello aíTevera. 5-3 Hécicho, que Fontecha fué el primero de los Medicos,que eícribieron de Ayuno,y que conf= ta en fu dedicatoria, como es cierto. Hará fuerza al que lo leyere, ver en fus luminares primero, y íeguii» do, como cita á Baptifta Codronch, y tendrá motivo de imputarme de falfedad, ó poco cuydado en lo que digo. Pudo fer efto, el que como anduvo íolicítando Autores en el tranfeurfo dequatro años, que duró fu obra,es probable,que al principiode ella,no encontrara con el tal Codronch, y affi dijo verdad en fu dedica» toria. Y ya que la iba acabando.diera con él: pudo fu- ceder, ó por otra contingencia mas obvia, ó de mas fundamento. Con que llamo a Fontecha el ptu mero en el mifmo íentir, en que él afirma, y loes, lí Del iSMEDICOiMO^AL: 30 §.M VIL Deljíyunoyy fus conflitutivos. J4 W LEGAMOS YA AL OBJETO PRIN» ■ ^ cipalde la DifTertacion: Llegamos ya al m-Á Ayuno; cuyos encomios,y alabanzas,nó Ton para efte lugar: bafte folo decir, que los Santos Padres, y Doctores fe hacen lenguas e i fus elogios. S. Auguftin, S. Bafilio, S. Gregorio, S. Pedro ChtyJ fologo, S. Geronymo, S. Athaoafio, el Padre Fray Luís de Granada, fuera de los principales fructos,y provechos, que trahé al alma, que los feñala en ocho excelencías.-áclcaerpó/uvede alargar la vida,y la ía* lud, deadquirir la honra, para que el hombre tenpa gufto y alegría corporal, él nos libra de muchos ma»' r les. Y por fin, nueftra Madte la Santa Igleíia lo cano» niza en el Prefacio de todos los diasdc la Quarefma: Qni corporalijejwiio vitiacomprimk. 5T Que fea de derecho divino, é intimado i mí raed a tamente por Dios, parece, que lo dá á entender S. Bafilio, y S. Auguftin (x) Aquel, jejmium in Tarady- f*) fo lege conftitutum tft: primum mandatum accepit\'Aim\ fi ^ 6 s* á* yjunaf&t d lignoEva\noniflo mdigeremus jefunio. Yef» mp* te: Ipfe Princeps genem noftn, quandtu non comedit,m Paradyfofuitlftatim túm comedit deParadyfo ejetlusefi. Peroá lo menos es precepto de derecho canónico Apoftolico. Y la tranígreffion de él, es pecada gortal, como que es en materia grave» De» 4o DISSE^TACIÓN y6 Definenlo: Abñinemiade carnes",y anteaco* mida. Contiene dos partes, que ambas conducen pa« ra la maceracion, en la qne no hay controvertía. Pe= ro qual de las dos fea la mas principal del Ayuno Ec= clefiaftico, ó ü quitada la una por jufta caúfa, quédela otra, y en ella fe verifiqueAyuno, es lo que fe ventila entre los Theologos. Mas claro: conteniendo efta definición dos partes, en qual de ellas confifta, ó qual de ellas fea la eiTencialconftitutiva del Ayuno, es to* do el punto déla controv erfia. 57 Que fea el con fti tu ti vó eiTenci al, y por ef» * fo neceiTariodel Ayuno la ábftinencia de carne, y no la única comida, lleva el mas lucido, y grave numero de Theologos, y es por el tanto la mas corriente, y fea guida opinión. Y affi una vez efeufados por jufta cau* íade la carne, dan por efeufados de todo el Ayuno; porque quitada la parte mas principal, y efíencial conftitutiva del Ayuno,que es la abftirencia de carne, fe quita la accefibria, y menos principal, que es la uni» ca comida. Y nada de fu íér, le queda al Ayuno: affi Cayetano, &c. _ y?/ Por la contraria, eftán los Padres Salmanti* nos, el Padre Lacroyx, Hurtado, Gravefíbn, Paulo Zacchias, y ahora nuevamente el P. Rodríguez Cif» tercíenle, Leífio, Fílliucio, y otros Canoniftas, cita* dos por Zacchias; que defienden, fer la única comí* da la parte mas principal, y- en la que confifte el fer del Ayuno, que quitada la ábftinencia de carne, que* MEmCO*MO%AL. 41 ida indemne el Ayuno. Omito las pruebas; porque Suficientemente fe hallará,xjUjanto íe pueda deíear en «^itadoJRpd^igue^p ^,/;.;f .;,..,,, ^ Jb 5P Lo cierto es, que con la otra opinión (que es la eftablecida,y acpptad a en nueftro país¡ no tienen los Médicos^ en que pararfe^porque en mirando en Ja^eiifgrmedadesi, qualesfean lasque pidan carne; fe acabó todo,! Ypor eonfigtúente no tienp lugar, fegun efta opinión, la controverfia,que excitan Zacchíás, y Rodríguez citados en el catalogo ^de enfermedades, ditpy tanda,,en quales fe deba guardar la forma d^l Aynfoo, permitiendo la carne; enquajes fin permitir* felá, íolo defobligúe la única comida; y en quales ni tino, ni otro fe deba guardar: firvieñdonos de ellos fo» las las reglas, que 119S derr\ueftran,en quales fe permita ;eluío de las carnes.Pero en eftaie añade nuevo, trata» jo;pues fuera de las enfermedades,quq pidan carneóle agrega io del Ayuno: en qué enfermedades indepen= •diente de la carne, fe deba.ó no,ayunar.Que fuera de ter materia algo eniredada, y{qüp pide tiempc> yre» •fiexa,es inefcufable,paralps que llevaren efta opinión. 60 El alto carácter, y crecido numero de lo ^éjordelaTheologia^ue eftá, por la primera opi* riion, y mas: feguida, es patente; y fi provoca por efto, á feguirfe,mucho mejor por; lo que» nene de mas fácil, favorable, y menos trabajofo íu tifo. Hacerle déferi» tendido de la otra, y mas quando fe logra el fatis.facér con ella al precepto; y juntamente á la curación eje L '" raú. 5¿ DISSE^TACION muchas enfermedades en los que puedan^ el cofa díg« na de atención. Por tanto, en el catalogó, que pongo de ellas, vá eferito con effe adito, pata el que á eftá opinión fe acomodare. 6r Dosrefpeétos fe confideran en el Ayun&J ó en fus dos partes, que lo componen, fegun yo en= tiendo. El primero es la abftineñéia decaeré. Efta tíd» pe por objeto a las fuerzas en fu integridad, de donde refulta la íanidad del hombre; ó fu contraria, que es laenfermedadjCauíadeella, ófymptoma:y affi vale come licitamente carné en día prohibido*, porque efta enfer- mólas común de Theologos, Canoníftas, y Médicos, en lo que no hay queflion, por fer cofa affentada. 62 El fegundo tefpecto es, la única comida, zn íoqtiecorrfifteel Ayuno,que aunen el íentir de los Theologos de la primera opinión no excluyen á efta patte de la conftitucion del Ayuno, aunque Ueva^que la otra es la mas principal. Efta pues, mica comida, tiene,ó mira por objeto alas fuerzas, ó debilidad, y edad de Veinte y un años para adelante. Y affi vernos, "que la guarda de ellas, y fu con fer V ación efeufa de el Ayuno,- por tanto los de exercicio tecio, y mucho tra» bajo,'y los que no tienen para alimentar fe lo íuficien: te: los Predicadores, Cáthedraticos, issertacion *de doctrina citada por Lucas Tozzi, el que á lo me= 'tíosíbn,la femara ayunemlosfanos para fu bien, eftai. Pajil, l¡b-.*fz) Q#in Avicmna (anís vmtMfüerint\ 'Micenvfi el ofcíervar alguna abftine^» fcia cada femana,. nos *e fiará mal para confervat fa fa= lüd, aünpoiconfejódeAvicenna. 3d*uf,.-r nr ■-:*• *> -r. 66 . Pero confit\a en buena hora, la efíencia dpi Ay uno en la abftineneia de carnes con los Tfieologos rdeM a primea opinión, queden enJaipácifiGa pofíefidn de fci feñtifjparaque no hay a pleyto. O mirefe la unía ó comidacomo preceptiva de la Iglefia, íegun, los Theologos de la fegunda opinión,'con los Salmantt» nos/Sf¿íófmfréfé cómo preceptiva de la Medicina: ello es cierto, que etta:anica comida, ó fea de carne, ó de Vigilia,conduce para la íaluddel cuerpo en mu* iUvr.i-i i* ché$ifefios3 y recobro de aquella en muchos enfer» *' - • •■■ -- •--rnos /haviendo fuerzas competentes pntrp uxtoip ¿ í^íiov^r ":°^r:;- ' *' * :'~ y otros, ¿i <: ¿r>i3q ;.-.t^e^ rf -- i '"T-Ú^i ^' fcU§* VIII. Trovechos del Ayuno.. '/"TíülfiA i ¿^W-A TERCERA CAUSA DE LABE- .u, na I lajacion de eftos dos preceptos, es el da» i^l''íH'fí s'9': 2*^ fíoála Talud, que comunmente temen -i *:.«*. Joí»paciíentes, fe les figa de las abftinencias. No fe b^&ihu^i fratjf^qaidelyi. experimentado, y bien .fundado de i<¿y'v ínnoh>a^petíonas¿ que verdaderamente no pueden ayq» ák nar. &UEDICOÍ MO%AL. 4c nar, y tienen yá coníuhado, y por coníiguiente la li» cencía de fu Confefíbr, y Medico. Ni tampoco de los débiles, y flacos, ó aquel los, cuyo padecer de miu chosdias bs ha puefio en miferableeftado. Trarafe íi, de los ojudos, que no a y unan,por demafiado mié* do: v. g. ios pletoricos, obefos, ócacochymós,que con el titulo de padecer de opilaciones tienen concebido, que la repetición de alimento muy íubftanciofo, es neceffaria á íuTalud, y fuerzas. Y como por una par» te han oído, que les opilados pueden comer carne; y por otra, que fondanofas, y avientan las comidas de Vigilia, y que no fufientan. Haciendofe ellos juicio, de haver menefter mucha fubftancia, para no llenar» fe de flatos; porque eftos fe bajan, y quitan en fu en* tender con la repetición del aumento de mas fubftana cia. De hay es, que naturaliffimamente no dejan día de comer carne. 68 Vé aqui una buena porción de gentes por íu preocupación, y míedio expueftas á muchas cnfer= medades chronicas. En quienes tan lejos eftá el Ayus no de dañarles, que á mi veer, antes les aprovechara mucho, para que no fe deterioraflen fus fuerzas. Pues fi recurrimos á la Medicina, la hallaremos llena de preceptos, que en eftos afectos recomiendan ladíe* ta, y abftinencias de manjares muy íubftancioíos, y nohaviade querer efta deztrozar las fuerzas de los pacientes, Oigan á los Autores, aun los que no trata» ron de propofito del Ayuno. Mercurial, hablando del M íchirro 46 i>issEt(rjaoN ... (>) fefiino del vafo (a)dice: de cibis in univtrfum ikenium, I»D4 }. Cap. v / . /p *\0*m ,4, quod commendatum inVemtur ab Avicenm optimum epe per' ferréjejumum. Theodoro Prifc. [b] Inchoandam bujus (h) malí curam a je junio,<& patientia efie. Friderico HotTman, hb. *; CJp. haUan¿0 iqo\moral: 47 yo Dixe, que las fuerzas no fehándedeterío* rar por el Ayuno en las dichas enfermedades (d) Pues Ga Jd) é quien no vé efto en cafi todas las chromcas, cuya can» difcfcbíifí! ía,por lo comun,fon abundancias de humores craffos, caP-«l*i tartáreos, ó de otra ftirpe, ó impedido circulo de no* bles líquidos, por obftrucciones,ftaces, ó mudado día» metro de vafos. Quien no atufa cachochiiías en eftas con Baglibio, vifcofidade3 de chylo, ma las con ver fio» nesdeélenfangre,y de hay, la depravada índole de efpiritus. Para cuya corrección, yá los purgantes, yá los que alteran, yá las fangtias íe adminiftran por los Autores, con conocidos buenos efectos. No fe hace quenta de las fuerzas, que havia para eftos remedios grandes, y que han quitado con fu ufo; y fehazc mu= ch a de las. necefíarias para el Ay uno: quando efte,tan» toconfpira(nocon alteración, y deftruccion como aquellos; fino con la debida nutrición, aunque efeafa) á la coníerv ación del individuo.Verdaderamente mas es miedo, que realidad. 71 Oigan á Zacchias, dando r azon del porqué nueftra Madre la Iglefia impufo las quatro témporas del año. Porque enefíbs tiempos,refponde, acaecen ín y^^ ánueftros cuerpos muchas enfermedades, lo que fe re,aqu-is,S5 deduce de Hippocrates.(e]Ypara evitarlas manda nu»locis" cftra Madre la iglefia las abftinencias en los quatro m tiempos: cuya evacuación es mejor, que la celebrada Zacch. W¡ por medicamentos (f) \)t ergocorpora d fuperfluitati*^ "^-u bus evacuentur} &ftc inminentes morbideclinentur}jubet T^sT' nos 4S VISSERTACION nos SanBa Mater Ea lefia,ntfingulisiifcettmporihm'ines dia, tamquam de fonte noxío, rivos ad torporum Ufionem, Qf ad Chryí.Hom animar um per turhationem commeare teíiantttr.'g) injo.um. y^ para la longitud déla vida lo mucho^ que conduce el Ayuno, quién no lo vé patente en las lux Evang hifl°"as íagradas, y profanas/ El P.HenricoEngeU ¡de jcjunio. grave \h) tratando de aquel texto delEcclefiaftico,^* abftinenseft abjicietvitam? (i) cuenta de un petitiffimo Ec le? Medico, que haviendofe exercitado cerca de fefenta $>m' a"os en ^ rninifterio, no vio en todos ellos á hombre abftemio muerto de poca edad. Veaníeenel mifmo citado los pafajes, que trahe de S, Arabrofio,que fuera de MEblCQ*MORAL. 49 de encargar el Santo, que acoftumbren á los niños deíde fi\ tierna edad al Ayuno, dice: queSanfón fe hi» zofierte por el Ayuno, fe concibió, y muñó con el Ayuno: no pongo fus palabras, con dolor mío,por no alargar. Y hablando de lo que contribuye, aunque particularmcte,á las íw^z^diccmihUrobu^iús jejunio, Unías mulieris jejunium innúmerosftraVit exerCttus ebriórum. Muchos fon los teftimonios,quede eflo fe dejan ver en los Autores. Acaba con las palabras del mifmo Padre Engelgrave: Sifciret mwdus, quám falubrephar» macum fit jtjamum,nul/¿s hac in re opm foret legtbus. §. IX. Sentir de graves Autores cerca de ali- mentos de Vigilia, o carne en ejlado de [anidad. 7413 ESTA APA^TARSE DE OTRO W^L efcollo no menos común, que dañofo, * ^# que fon los alimentes de Vigilía,ócars ne. Se dirá primero de ellos en eftado de íalud,y def* pues en el de enfermedad. No hay cantinela mas fre* quente, ni mas mal fundada entre las gentes, que la de que la comida, y manjares de Viernes ion pefte, fon malos, fon contra la íalud, fon fiatulentos, y otros ip= fames epithetos á efte moclo, de que refulta la quarta caufa de la relaxacion de eftos dos Preceptos, y por lo que fe amedrenta todo hombre, y toda dama deli* cada, y aun todo fujeto, que no fea pobre, viola el precepto á la indiípoficion mas ligera: fobre el fegu* riffimo fundamento para él,de que ia comida de Vier= nes es en si maliffima,y muy dañofa, N Quah yo DISSERTACION .. 7?. Quan al contrario fea, no es menefter mtt« cho para probarlo. Baftará folo el decir, que es dog» rna herético, y procuraron deftruir al Ayuno los Here* ges, y que lo impugnan como invento del diablo los Epicúreos, y Anoméos. Y Czlvmo: laufunt impiatle* ges, qu¿e confcienüM exitialibus vinculis ílringnnt, ínter % Engeígrave ^'##í carnium ufas, quafebominem contaminet. (j) Elinfa*1 *bifttpra¿j. ineLuthéro lo llama engaño del AntisChrifto [affi nombran eftos á nueftro Santiffimo Padre) Quidaliud, quám impíafiaus Anti-Chrifti} ErafmoHerege ímpro» baba también los ayunos de la Iglefia, por razón, de que la abílineucia era daño.fa á la. íalud; y porque los manjares de Viernes eran malos. Pero Alverto Pío conftantémente lo refutó. 76 Es confiante, que les dio Dios á nueftros primeros Padres las -hyeibas, y fruótos, para queíe jGcncf, i« mantuvieran antes del diluvio. (K) Ecce dsdt Vobis om* nem berbam deférente m fiemen fuper terram, & univerfa lig* na} qu¿e habent in femüipfis fementemgentris fui, ttt fint Vos bism eficam, Y jamas eftuvo la naturaleza mas robuf» ta, que por los r6yó. años, fegun uno de los compu* tos, que duró la primera edad del mundo hafta el di* luvío: Yesmasqprobable,pues íe dá por cierto, que fue el mantenimientode aquellos hombres, leche, frutas,y legumbres. 77 Quando fe ufaba entonces de carne,ni vi¡ no.? A efte, Noé fue el primero, que lo halló. Y que 1 la longitud de la vida fe debía i aquellos alimentos,' mu» MÉÜÍCQMORALV ji Suchos AtUoreslo afir man.Clafoelíá que defpues del diluvio concedió Dios la carne, ó la exprefío por lo menos: At non fine defcBu, dice el PadreEugelgrave, [ubi fhpn) -Pero también eá cier tonque en much.e^arl^ no póriria fer manrenimiento dd genero humano^ porque entonces fe hnvieran acabado las efpecies de animales. •■"«' ¿c 78 Plutarcho eftá tan contra de la cameyque dice: engendra en el cuerpo crudezas grandes, y deja malignas reliquias; por lo qual feria mejor, haceríe a' no comer carne alguna. (1) Máxime cruditates müuéndíH ijjy.de Sá{| funt ab'ejfu carniumynárti ¿KO*MO%AL. '« planza en ñueftros tiempos, que en los pafados figlos - eftos mifmos efectos fe hallan á cada pafo en el Padre Engelgrave. (ubifupra) 83 Por fin, dos cofas fe experimentan en el ufodela carne,por lasque fe ha hecho tantopluga*, entre las gentes, que no quieren ayuuar, ni dejarla, en la quarefma, que fon la coftumbre, y el fer, fegun dicen, familiar á nueftra naturaleza. A lo primero refponderán PabloZacchias,Fontecha,Lucas Tozzi, • Hippocrates en el aphoriímq plurimum,atque repente* evacuare, Vel replete, "Vel cale faceré, Vel refrigerare, five quo* vis alio modo corpas moVere, periculofum, quoniam omne nU mium efi natura inimicum-, fed quod paulatim fit,tutum eft,tum alus, tmn cumab altero adalterum tranfitusJit.Y . Phocy lides, quien las ultimas palabras de efte mifmo y^ ti apKs aphorifmo(o) trasladó á todas las funciones humanas, s*- encomendando la mediocridad. £4 Nohay argumento nías fuerte, al parecer, que la cofturr\bredetcpraer dos'vezcs al día cofas de mayor nutrimento, ¡corno es láxame, la que mudada puede dañar mucho: Zacchias fe hace cargo de eftas, y otras dificultades, y refponde con la elegancia, y ío* Jiclez,}queaco^mbra. Véaíqíu fegunda queftion, ó . , argumentos contra, el Ayuno. |pí,Fontecba aconíeja, lib# ?ft¡t#l3 fe vaya fubftrayeudo poco á poco del alimento de car= queft. ij ne antes de quarefma, y defpues de ella, añadiendo e;n el raifmo»orden; porquejn^haga daño, (q) Efto ..^]unr raifmo en general dá £ entender Hippocrates en el ,/ — - - • - ,~^- ^■■-—^ ~.~- fiQ y4 DISSE^T ACIÓN fin del citado aphotifmo yi. fed quod patttattmfit, tutftm e&t&'c. YTozzilodice claramente en la expofi» cion de efte aphorifmo. 8y El que fea familiar i nueftra naturaleza, por la actuación en el eftomago, y buena nutritura> que preña a el cuerpo, es muy dudólo en ícntir de al» gunos; quando confta, fegun ellos, que entre les aliV roentos, la carne es ta querefífte mas á los esfuerzos déla difolucion, por la mas firme textura de fus fibras, que no tienen los pezes* frutas, y legumbres. Funda* mentó, que tuvo el grande Necquet para preferir-ef» tas á la carne en fu íyfteroa de chilificacion mechani» ca, por reciprocado impidió de mnículos, y fibras tno»- trices.Sea en el fyftemadc coccion,como quieren unos;» ó en el de fermentación, como quieren otros, y a un en el de el cator,Como los Ant'gups: ello es cierto, que en algunos individuos le cnefía muy buen trabajo a* fu eftomago actuarla, y íegunRamacini: que fiendo'la Carne por fu naturaleza fujeta a la corrupción, no puede de» jar de reducir fe en humores de la mifma \ Índole, (pa g. 4 2 i.) 86 En la practica es muy dificil, c i mpofsible averiguar el complexo dequaltdades predominantes» o grados de ellas en los manjar és.aNo fe puede pues dar mejor regíáj.qcié la defobfetvarcada tino experi; raemalraerite/queesloejué le incomoda; ó áprov.e» cha, que es loque digiere con facilidad, ó moleftia, acompañando á efto ei Temido, del gufto; que para eflo lo deftiria la Wr&a&zá. <2ue Ujá$ de! feries la car» MEDICO*MO%AL. fi carne familiar á la fuya, la aborrecen muchos, y ef» penalmente enqualquier enfermedad., Y fi hemos de creer á Ettmulero, y á Hippocrates, aquel coi fuma generalidad afíegura,quc fiempre fe digiere bien, aquello que fe apetece con viveza, aun quando el apetito nace de caufa morboía. (r)'Y efte, que dsbe-- Inft £'. mas preferir la comida, y bebida gratas al gufto, aun. i"p¿Tc.£ que fean de algo peor fubftancia, á las que fon abfokn *• lamente mejores; pero no tan gratas: Parum deterior pottu, aut cibus, fuavior auUm, melioribus quidem,jedmi* ñus fuaVÍbus eft pr8a tito de caufa morbofa,puede,aunque fe digiera el man* jar, ferie nocivo al cuerpo, como también, fi nace de algún habito depravado, como fucede en los que fe dan á la embriaguez. 88 Dtxe con Hippocrates, que debemos pre» férit la comida grata al gufto, aunque fea de algo peor fubftancia, refiexo en el algo peor, que fe lo acha« carán á las comidas de viernes, y fi vamos mirando la ferie de ellas, bailaremos primores de alabanzas en los Autores. Valga por todos el grande chira ico, i infigne practicó Ptiderieo HafTm'an,que en materia" dé alimentos'es mucho voto. Efte hablando de les huevos, los alaba por lo bieve, que nutren, llaman. dolos alíinentonnivrerfat proficuos en las fiebres de c^rifümpti^n,!ylar^asprofiífliones defangre. Al que» LO, T6 MSSERTACION ío, y la manteca, ó mantequilla apellida univ erfal, y preftantiffimoi alimento. A la leche, yá fe vc,prefi* riéndola én nutrición á otros alimentos, á ella deber» feie la proceridad del cuerpo. Y affienta con Plinio, Tácito, Juftino, Cefar,y Saluftio, haverfe mantenía nido muchos pofc largos dias folo con efte faludable chylo. /;; 89 Entre tas íemillas, ó fructes tiene por tenis piadas, y nutritivas al trigo, frijol, hava, almendras, cananas, nueces, arroz, almidón, y otros: bien que los alimentos de los vegetales fe hagan peíados, quando produzcan flatulécias en la primera entraña.Pero pre» gunto, eftán libres las carnes de producid as? Efpecial» mente en eftomagosidelicados, y de fermentos debi= les yáfe vé,que no. A lo menos yo veo en la Pues bla muchiííimos bien aflatados con todas fus carnes, y el flato de eftas, aun ma3 tenaz, y tardo en difliparíe, como hijo de fubftancia roas folida, y difícil de tranf» mutación, qual es la carne,que expuefta á la putrefac» cion, y corrupción (que no hay en los otros) fi llega á efte termino, es cauíadora de graviffiraas dolencias, fegun el citado Ramacini. 90 A favor de las hyerbas, y pefeados eftan rauchiífimos,y graves Autores. Hippocrates; utantur ^ autem de pifabas cccltf. (pag. 393.) Galeno, (t) OrU llb.deboa. bafco. (Ub. 3.) Otros muchos citados por Zacchias. ^matafuc. simónS^thi, Gardano, antiguos: de les modernos, aun. ~* ' hay mas, FrancHco Bacón, Philipo Necquet, Luis Los 1 raezi^ MEDICO-MORAL.. » mezí, Sydenhám, y Eihmuleró, todos Autores gra» ves. El Padre Rodríguez, hablando de las hyerbas, y legumbres, dice:por laslegimbrés,yb)érbaSnó hay mas ra^cn tomada del principio arriba infinitado refpeBo a la promptitud, ó Úrdanla de la corrupción. Quien rio Ve efta ventaja claramente en las hyerbas,} legumbres* De ellas, primero fe logrará el polvo por fu V(j<\, que un Véñigio de podrecidas-, y de aquella*, aunque algunas fe fujeten por fu demafiada humedad á eñe termino, es tan inofenjivo3 que en algunas es agrá dable fegun las tefiificaciones del olfato, (u) (u) 91 En fin, no admite paralelo las partes del Palc^raed; mundo, que fe alimentan de pefcas,y frutas, fin comer la carne, como puede confiarle á el que lea hiftorias. San Geronymo dice de muchos gentiles, que no fe alimentaban con carne, y que havia Pueblos enteros, que no la probaban, [x] En los millares de leguas, que* ^y fe han defcübierto de mundo de 2oo;afíos á efta pane, Adv. jovfn; apenas fe ccnacian las carnes para alimento, excepa \^¿'J*\' ruando la barbarie de las facrihcios. Frutas,fimientes, y pefcados eran los manjares. Acá en nuefiros terri- torios fabido es por todos, que la mas gente fe man» tiene fin carne. El gran numero de Indios, que hay, fn común mantenimiento fon Amientes, maíz, y unas • tortillas fecas. Los dueños de ha'ziendas iabotiastie* nen mamfieftas las experiencias. 92 De lo dicho fe infiere bien claro,fi no me' engaño, que la quarta caufa de la rélaxacion de eftos dos preceptos, que es la mala fama, en qu* éftánlas T*A " - P coa j8 VISSERTACION comidas dé. vigilia, queda totalmente deftruida! affi con las razones, que mi cortedad há alcanzado, como con las inficientes autoridades de Autores Médicos, que hacen opinión en la materia: y fcbre todo con la irrefragable prueba de tantas experiencias. Se debe inferir también lo fegundo: que ios »nanjarcs de Ayui no, fiendo buenos (no malos) como pienfa el vulgo) fon fundentes para íuftentar la vida; no que fon me> jores abfol uta mente, que las carnes, ni de mayor nu* tritura: antes acafo., por fer menos íubítanciofos, pros ducen quifa los efectos,que acabamos de ver, difoh viendofe; y a&uandofe con mas facilidad en el eflo= mago, porque y á fe vé, que no, lo que fe toma, fino lo que bien íc actúa, y digiere, nos nutre. De que fe figue lo tercero: que ni la longitud de los antiguos3ni el haverfe mantenido con ellos naciones enteras, prueba, que fean de mas crafía fubftancia. Lo que vemos en muchos,que fe íuftentancon folos frijoles, porque íu pobreza no les alcanza á mas; íe nutren, y engordan con ellos, fin probar la carne. Con todo, ninguno dirá por efto, que ios frijoles fon mejores, ni de mejor fucco, que las perdizes, las pechugas de aves, el buen carnero, y otras carnes tiernas: aunque no podrá negar, que los frijoles fon fuficiente fuñen» to; fupuefto que hay quienes con folo ellos fe man* tengan. 93 Del proprio modo íe debe también enten» der §1 fin, que llevo en tranícribir lo que dixeron eftos Au* MEDICO*MOlW*MO%AL. 61 blando Zacchias (z) de efto, y dudando,porqué en nu« Ki>pocw eftros febricitantes no fe gafta efie alimento, ñopa»tesinlib.de rece hallar otra razón, que el miedo de darlos, acu=vIcrat- .itl fando á los modernos de mas medrofos, que los AntisJ^w/y" gUOS McdlCOS. hruntibus 96 Affi fe explica (a) Quanam enim rationeantU¡l°£?c£'¡ qutiliiPraceptores Medicina eos in putridisfebnbm fuisZacch. Ib. oegrotU tanta indulgentia obtuliffint? Non efie autem diffi- * titu,# u cüis concoBionis, id ipfium demonftrare poteftin ea,quaex ^ Gal. {? alijs fuprk attulimus. Cur Vero nos pifcibus noftris agrttantibus ínterdicamm, diBu difficile eft,nifi confite a~- t» m mur,nosin multisefie antiquioribus timidiores. Supongo, *'Jlti que eftos pezes eran de los faxatiles. 97 A lo menos, que no hagan tanto daño en las fiebres, como las carnes,por conftar de poco azey= te, y fal volátil, y de hay eftár menos expueftos á la putrefacción, lo dice claramente Hoffman (b) Quo: (b) n'tam pifies faltem de exiguo oleo, acfale Volatiliparticipant, I,b* l- feí; • t / ' • r >i #■ . F i» cao, 4.$. ideo non tamfaene mputredmem ruunt^eamqueob rattonem tí>.Pag,mi- in febribus non tam infigncm,qudm carnes noxam afierre hiioo.Scho folent. iion- 98 Verdaderamente, que el ufo, y corriente practica eftablecida de largos tiempos,y no haver otra 4 cofa mas obvia recibida, y bien llevada en las cafas,ha. ce permitirla en las enfermedades, y fu prohibición, heregia, mas que remedio les pareciera. Pero fi vé» raos a los enfermos, lo primero que aborrecen es la carne, y fu caldo, en eípecial los febricitantes. Si mu ¿2 DISSE^TACION ramos los Autores, lo mas que conceden! es el caldo,1 y ello algunos, medicado con efta, ó la otra hyerba, pero la carne todos eftán contra ella en las agudas, y en muchas de las chronicas paífiones. 99 Si difcurrimos de los eftomagos, en qual= quier fyftema hallaremos, que fi en fana falud mu« chosno la llevan, por las razones dadas arriba, ó por otras de mas pefo,como en eftadode enfermedad con la languidez del apetito, y debilidad de fermentos es compatible un alimento tan cralTó, y íubftanciofo? Faftidio, mas que otra cofa les caufa: confírmelo Ba* glibio: Dum Yiget flomacbus, vigent omnia, nam c3* cibi, & medie amerita rite digeruntur. [c] * 67? ' ' ra impura,eño es accidentados, quoplus nutws,eo rmgis lades. Ycornelio Celfo: multi magni morbi curan tur . fe> . abslmentia,* Sea como fuere: lo cierto ep, que Baglíbio habló en ambos pafajes por íolo la íalud del cuerpo, indepen= diente del precepto de la Iglefia: confpirando efte q*, to á aquella, qué exprefiara efie gran practico, fi fe huviera acordado de nueftro precepto ? 107 \'Por eíToelinfigne PhilofophoEfcriptu» rario Francifco Valles, que quisa fe acordó de uno, y otro, exclama con aquel.Quamfapknter de la Iglefia, que fe deja veer en las'pa(labras,que ya refiero {))Ex (\ > dtBis apené coníUt, quam fapienter> ut alia omnia, illud ™™t~ m ** quoque ab Evckjiaftatutumfit, ut longumjejunium* & efus fifcium, ac leguminnm, &* olerum veré medio potiús¡ quamalio tempore ¡ingulis anuís repetat. Eo enim tempore quam mínimum officit Valetudinkimo Vero quam mulús etiam eft fanitatis caufa. Quid enim aliud agimusj?junantes, quam qtiÓdmpltúmQ? raro cihum capin^usl Qjfoi, inditatione qb i ffa tempore accepta, agtndum ejfe Hippocratis pracéptis COnfirmaVimus.. £. 108 Todos eftos Autores fon de mucha nota,' y de grande fequito en la Medicina: ya vén lo que df= cenvde las caífies en las dichas enfermedades./De fus caldqs, también ya eftá 4iehp éh Ethmulero, y HorT- maru Énía. diarihe*a,lo que profiere Baglibio és (X) '<&} Carnium efusau^itdiarthaas, cave kítur ab *)V, quantum ¿ed,' x 66 DISSEru¿¿; . '.•-» ■ ■ .■.'..■ ;... - '-- 'Puei 72 •;» mSERTAClON ?,,| 123 j .,?. Fnesde la mifma manera hallo, fe pueda conjeturaren n.ue,ftro cafó proporcional mente, para ,.medir las,fuer:zas,y en punto.tan difi^il puede conducir rrucho toda efta doctrina..Como también la del apho« !ih¿, 1. íph..-."fmo- [p]£c qníbus ftmel, aut.bis, & quibus plura ne, an ^7." ^ pauciora, Q? particulatim Oporteat offerre conftderandunt. C¡ondonandum autsm al/quid tempmi, regioni, ataú^r con: fuetudini. Y por fin el octavo, dezimo, y undezimo aphorifmos, yertos de efté primer libro,como que .hablan-de alimento tenue, y fuerzas,hacen mucho .¿ -u •:-..' nr^ para nueftrocafo. ■..., :ú,{-,;. y) ,ri.vb^« ñi* ■. m-.í §. XII. * Advertenciasprevias parala inteli- ? i- gene i a del Catalogo* 124 W TlSTO, QUE UNO DE LOS "> -iio' ^^k/ /? principa les motivos para la efcufa w* xdsl Ayunojpor lo que toca á laMe* dicina, es la debilidad, ó falta de fuerzas: cuyo cono- cimiento pertenece á ios Médicos, declarar, y juzgar eotiaquellli realidad^que pide materia tangrave.A&« tes de entrar en el catalogo de enfermedades, es pre» ciíohacer varias advertencias;para apartar eqiiiyo* eos, y otros inconvenientes, que acafo fe ofrecen. Y lo priraero fe advierte: que la ábftinencia de carne op íe puede difpeníátí agrave motivo, como dice el P. fa} Rodríguez, y que affi lo expreffa Reiffenftuél: (q) CV» 5conc.7p>g« meflio camium multo diffiiilmsrnec riifi rxtione graviorji Ro°dnSmcejfiutis mcjditur. U raifraa llevan"ti celebre Bé-j medico-moral: 73 nedictíñoBabenftüber. [r] El Padre BaíTéo. (s) Mo« ^ ¿'^ raliftas, y el infigne Medico Paulo Zacchias. *?U 125- Por lo que fale,que las tres caufas: lw¡oten* ^ th, trabajo, y piedad, que comunmente traen por d\f-- tom.i.pag. penfatrices los Autores, él citado Canonifta, y Mora* 8 lifta Reiffenftuél las adjudica á la ábftinencia quantí5 , ^ tativa, y pofitívamente lo aíTegura. (t) Enconfequén* íum. Morí cía de lo'qual fiempre que enDiana,Tamburino,-IíU(*11*ft*4« fung. Caftro Palaó, y otros fe halle, que les Predicas dores con mucho trabajo,affiftentes de enfermos,Con* fefíbres, y los que no pueden dormir, efián difpenfa* dos del Ayuno; folo debe entender fe de la patte,que mira á la única comida. Refpecto de los Predicado» res es doctrina expreffa de Balenftubér. fpag. 539) Los demás trabajos mcchanicós,y corporales, es baf* tante claro, que íolo difpenían efta fola paite: affi'Ro- dríguez, (u) (a) 126 Advierto lo fecundo: que quando en los pa,;ft-M:cí; libros de autncridad le nalía ladiípeníade Ayuno por MI. motivo, que no fea muy relevante, ó con expreffion, íolo fe entiende del qtiantitativo, efto es, de la parte que pertenece á la única comida; pues todos, ó los mas tienen grandiffimo refpecto á la diíperifa por la carne. El P. BaiTéo, aun hablando de la enfermedad, que es el motivo trias jufto,quierc, que íolo fe difpeu* fe de la parte, que huviere neceffidad. 00 117 Y'lo miímo quiere el Dr, Fr. Martin de *-óu*ft. 17 Ledefma: (x) Quinta regula eft communitír apptobata ( ut l0ft T fu. 74 2>ISSEiiaúta utfi quís babeat juft¿m Caw fam comedendi pluries abfqu? eo, cpnod carnes comedat, abfth neat d carnibm, & fi etiam babeat cau/am fuffiaentem ad femedendtvn carnes, 6^ non ad C&medendum pluriesy abfii* mat ¿pluralitate refeBionum. (apud Fontecb. pag. 46.) 12& El 5ran Moralifta P Babenftuber, defpues de haver Tacado al teatro todas las caufas comunes de lasditpenías, concluye affi: y eftas fionlas caufas^que co- munmente traben los Autores, que e fufan del Ayuno'.note* fe ahora, qua tammpletumq^e non babentlocumjúfilnun* düm eam praceptb paitem, qua probibet abílinentiam ádut plici refeBione, non autem¡ecundúm alteram, qua prohibet abftinentiam a carnibus: (y) Affi también Leííio; affi Layraán fegun el mifmo. 129 Advierto lo tercero, para ta mas cía*a in* íeligeHciadel catalogóle de la doctrina de tres Au>* teres, que lo formo, el primero-, que es Fontecha en el punto delcoaftitntivo efíencialde Ayuno, vá con la común opinión, y affi folotratade las efeufas de car* ees en las enfermedades* y es el mas benigno en con* cederlas; ahora fea, por haver fido el primero, que íanjeó;ahora por el concepto, ó juicio, que fe hizo de la neceffidad de las carnes en las enfermedades; ahora porque fe le ocultarían acafo los. fundamentos de los ©tros, que le fubfiguieron. MEmCOMOXAL. 7y 130 Paulo Zacchias por eí contrario, que lie» vando la fegunda opinión de confiftir el Ayuno, en la tínica comida, trahe la diftincíon de enfermedades,en qae fe debe Ayunar, y no comer carne, de aquellas en que fe deba ayunar comiéndola. Y en punto de carne, ó enfermedades,qua la piden, no es tan laxo como Fontechi; porque en algunas enfermedades,en que efte las concede, él las niega. 131 El P.Dr.Fr. Antonio Rodríguez en el conf* titutivo efiancial del Ayuno conviene con Zacchias, en que es la única comida; pero en el punto cié carne, ni con la opinión laxa de Fontecha, ni con la media deZacchias fe acomoda. Y es el que mas que todos la prohibe: affi fe explica en la paleftra Medica, tom. 1. num. 71. diciendo: Es cierto, que hay cafos, en que la neceffidad difpenfa, ó todo, ó á alguna de las partes de efte Precepto. Cuya declaración, por lo mas, fe fujetaá la Nledicha. Hay motivos inficientes, en que fe dtbc difpcnfar todo> eftos fon los menos; los hay paradifpenfar la ábftinencia de quantidad fola» mente, y eftos fon los mas. Y los debe haver para dif* penfar la ábftinencia de carne, quedando immutable ía forma del Ayuno, y eftos, ni fon los mas, ni fon los menos. Aunque gcneíalmentc de todos hay neceffi» dad en pocas ocafiones. 132 En el numero y&. es cierto, dice, que fo* lo la neceffidad ditpenfa elpsecepto. Y es dertifíi» f!?o,que hay neceíftdad en pocas ocafiones de la carne Pa! y6 VISSERTACION páralos enfermos. Es regla cafi univerfal,y practi= ca común de antiguos, y Modernos, el que el pafto en las enfermedades fea tenue, y déla m3S fácil cocción. Por efíb aun quando íeñalan carne, ó caldo de ella la , piden de pollo, perdiz joven, ó cofa femejante. Pero anteponiéndolos huevos frefcos blandos, y el ufo de h) las hyerbas. Veanfe Galeno, (z) Vvclechio, (a) Jonf= *tútl:"'ic' «onio, (b) Suvvalve. (c) Y otros, que cita, y figue Jor* rde cid.il ge Franco, Veanfe también Daniel Sennerto,y Frau= (t>) cifco Silvio. Yenfin, quién no vé las carnes en la feyS1fc) cathegoria de alimentos gruelTos, y de tardas actúa» jmjuerei. ciones? Hafta aqui Rodríguez, cuya doctrina hé puef* to para el govierno del Lector. 133 Y últimamente advierto, que efte P Roa dnVuez en materia de alimentos de carne, ó de Ay u« no es digno de mucha atención; porque fuera de ier gran Medico, en la Chimica, Botánica, y Pharmaceu* tica es excelente; como que fe exercitó, y confiará al que leyere fus obras. Digo efto, por lo que pueden conducir eftas facultades a 1 conocimiento de los entes, ó Ampies, como lashy erbas,carnes, y demás aliraen. tos, y affi habla de eftos con el defahogo, que no veo en otro. Fontecha, y Paulo Zacchias, aunque le cxce= den en el manejo, exercicio, y practica de enfermos; en el punto de alimentos de viernes hablan con tirai* dez, por lo que a mi ver conceden carnes. Parecio= rae efta nota neceffaria para el mas acertado juicio en las perraiffioiies de la Carne. / MEDICO-.M0RAL. ?y SEGUNDA PARTE. Catalogo de enfermedades por tres Au- tores, cuyos dictámenes deben conful- taríeconlos Peritos de la Facultad Me- dica^ íeguir lo que eftos reíolvieren. 134 T A VARIEDAD DE LAS OPI- I 8 niones ha nacido, fin duda, fegun el »-^ difcurfo, y juicio de los hombres; por eflb en la Theologia Moral, en la'Medicina, y en las demás Facultades hai'tato queftionable, y la probabi- lidad intriníeca de fus opiniones es aquella razón, que les movió para proferirlas. Es cierto, que toda auto» ridad humana debe eftar fundada en razón; fi no, no es autoridadi y en todo tiempo tiene fuerza de tal, en quanto fe mantenga el fundamento de fu razón; fal» tando efta, fe deftruye aquella, como fíente el P.La* croix. (d) efto digo por preliminar del Catalogo de ^ enfermedades. En donde relucirá la fexta caufa de la u.i,. 154! lelaxacion de eftos dos preceptos, y la ninguna razón del vulgo en ufar de las carnes por la mas ligera indif= poficion, fin confulta de Medico. 13f. Y porque en el Catalogo figuiente, que ocupa toda la fegunda parte de e fte Eferito, no fe pié= fe, que yo propongo alguna opinion,ó fentcncia mía, advierto, que todo él es una mera traducción literal deZacchias;y compendióla de Forit echa, y un raero —------ T* V ~ " ' tiaí- 7* T>ISSE^TACION traslado a la letra, del P. Rodríguez, y una, ü otra vez del Dr. Salgado, y del P. Mtró Feijoó. Los dos ulti» raos Paragraphos, que fon acerca de fexagenarios, y trabajadores, fon los únicos que no fon traducciones, ni traslados, fino compendios que hago dw los Auto» res, por ha veríe dilatado mucho en la Materia. Solo fe hallará pues en todo el Catalogo, exceptos los di= ches dos Paragraphos, el numero 217. que pongo en« tre parenthefis, y en que no hago mas, que una reflexa fobre una cita, y el numero 267. en que me introduf* co á tratar acerca de trabajadores; y uno, ü otro parenthefis pequeño. §. I. Fiebres. 136 Y?N LAS FIEBRES AGUDAS TOi |"l dos tres Autores convienen en ambas '*—' exempciones de carne, y Ayuno. Efto es, Fontecha, Zacchias, y Rodríguez. Fontecha: déla terciana nota, que dura por feis, ti ocho horas, no im» pidiendo en las eftablecidas horas la debida cantidad de alimento, parece (dice) eftar obligado al Ayuno el '(fi . enfermo, aunque coma carne, (e) En la epartana cura* yttbj'fckt ^a concedia dos meíes de carne, porque íuele volber ¡exto,&é8. por qualquiér lapío. (pag. 338.) 137 ¿Zacchias: Las fiebres todas¿ y qualquiera énfeiraedad,quelastenga,ó eflencial, ó accidental* «lente, ó fean continuas, ó interpoladas, efcufan dej todo el Ayuno. Enquanto á la qualidad de alimentos, por« MEDICO^MO^AL. ?§ porque eftósfiendo de vigilia, en parte obflruyen y engendran un fucco craflb, como las legumbres: por otra, inflaman los humores, como los falados, por otra, eftan expueftos a la putrefacción, como los frutos, y pues, como quieren algt,noa,en parte abundan de mu» cha hamedad excrementicia, como las hierbas. En quanto ala única refección, y hora determinada, no íe puede guardar, porque por la deíigualdad de las ac» ceffiones, exacerbaciones, y repeticiones fe ha de alia mentar el enfermo quando fe pueda. Y por la flaque« za,que padece el eft o mago con» poca cantidad, y no una vez refpecto de la confervacion de fuerzas. 138 Lo mifmo qne en las continuas, fe en» tiende en las fiebres interpqladaSé Y la razón de la ampliaciones: porque aunque en el día delaintcrmi* fionno haya fiebre;con todohai aparato morbifico,, y en efíbsdias los pacientes no fe pueden llamar fae nos; luego fi el tal aparato fe fométa por el alimento, fácilmente puede mudaríe la intermitente limpie en doble, ó en otra de peor condición. Limitafe la prin» cipal condufion en la epheméra, en la que es proficuo el Ayuno, porque fe cura con no comer. (conclufion decima) 139 Rodrigue^: en las tercianas, quartanas,y ephemeras, aunque fean continuas, no hai neceffidad déla difpenfade la carne, fino acópaña alguna grave debilidadalenfermo,por la diuturnidad, ó malicia de la fiebre. Antes podrá íer mas feguro, que las cu» rarj 8o . DISERTACIÓN raráría ábftinencia de ella, como las cura toda abfti» nen:ia en los Turcos, pata los que escafi el único re* medio de fus fiebres [apui Mujit.) Y perfilado también que aun en las agudas, y malignas fe huya de hacer , inftancia al enfermo, para que coma la carne Siendo íolamente loable, órnenos malo, el,caldo de ella, y en que hayan cofido tarrbien lechugas, ó efcarolas, ó algunahierbadeeflaclafle. (n.79.) ' 140. Es configuicnte, el que á él febricitante, que fe le difpenfa la carné, fe le difpenfe también el Ayuno. Ño por necesidad de la cantidad, fino porqué es precifo, que figanlas horas de la refacción el cur= fo de las acceffiones, y del apetito, é inapetencia del doliente. Lo qual también íitvede pauta paralas fie* bres de menos nota, en que np hai neceffidad de dif» penfar la carne, porq por la mifma razón tiene lugar en eftas la difpenfa del Ayuno (n. 80.) Lo dicho por las fiebres vale para todos los afectos agudos. Y por los chronicos, íi íacas'el tabes, no hai alguno, que ten?. ga neceffidad pofitiva de la carne. (n. 8r.) 141 Las fiebres erráticas pueden tener alguna reflriccion, por refpecto á la habitud del enfermo. Y affi, íi efte fuefle gracil,y de contextura á la tabeícen-- cía, feie deberá permitirla carne en la quarefma; pero no en las abftinencias de femana, como ni tam* poco el Ayuno quantitativo. Porque la cortedad de Ja cena es parte del remedio en eftas fiebres, (n. ro9.) v 142 *" Univeríalmente en toda inflamación, que fea CMEDICOIMO^AL. gi fea interna, que fea externa, por sí indica templanza grande enla comida, y que efta fea de tenue corpo* ratura. Remediafeconeffoelfluxoantes,y defpjes de la ílipuracion. Yfiendo hoy tan valida, y probable la opinión, de qué el pus no es otra cofa, que el mifmo jugo nutricio: quahto menos haya de efte, y mas tcnui» dad én el que huvielíe, fe figuen mejores confequen* cías ala inflamación, y fe le quita mucho a fudituuta nidad. Sefigue, qué", efpecialmente en las externas, no hai neceffidad de difpenfa alguna. En las ínter» f ñas íe eftaráá la concomitancia de los demás acci- j dentés. (n. 89.) §. II. aumenta, ni fe defrainuy e per el tal alimento. En et íapfo de memoria, amor, vigilia, y catharro, que. no fea por grande* y vehemente caufa, la niega. Como* lambienen laconvulfioa, y paralyfis,,palada el tierra po de fu curadon.,Pera,en la actual curación de una> y otra fe concede. 146. Rodrigue^. En,los afectos dé cabeza, que fon idiopaticos, efto es^effenciales en ella,y por con* fentinaiento inmediato, tiene lugar. No porque, ella: fea, medicina de los tales afectos, fino porque es mas, faciLcomer poco de carne, que dé ayuno, y es por lq comúndañofaia mucha,cantidad; y la otro,,por.qría en la actualidad de los afectos, fue le la, inapetéciane» ceífitarde ampliación en los, objetos, d el gufto* Supo* - 8?i-9í?S S89! a%&o*&an,(k fer de. tes de primera, no» ta, MEDlCOnUO^AL. }$ ta, arferecia,perleeia, morbo caduco,&c. y que fe de* be entender en el tiempo de la invafion, ó paroxif» mo, porque fuera? de él, elmayor remedio es comer poco, y de poca fubftancia oleofa; y affi nohai necef» fidad de la difpenfa. (n. 85.} " - 147 Zátchias. Llevando la mifma, que Rodrr¿ guez en todos los dolores de cabeza vehementes, eó» tinuos^y periodales con fiebre, ó fin elia> que tienen ajbcéffiones, ó exacerbaciones con pravas accidentes¿ efcufan del Ayuno,refpeéto de la qualidadde alimen- tos: añade. Pero fi los tales fon de eftom2gorobufto; y affi pueden tolerar el Ay uno,enquanto a la única refección no fe eícufén, porque mas bien les ira con la parcimonia, y bebida, que al contrario. Y fi fuere» de eftoittago debuVquenQ puedan comer mueho una vez,.efiatiri efeufados de Ja única refección;-porqué con efta fe les gravará mas el vientre, y por confenti* .miento dolerá masagudamete la cabeza, (concluf. i.) 148». Rodrigue^. En los-iníultos epilépticos, y convulfivos, que íea Todos los afectos de cabeza, q ó por sldañandequalquiera manera los nérvios,co'roo la apeplexia, epilepfia, paralyfis, efpafmo, eftupór, y íemejantes, ó qamenazen á otros afectes dé eftacla^ fe, como el frequente, y vehemente vahído , la'pfo de memoria, torpeza, ó impedimento de movetíe, y ¿tros íemejantes, legi ti mámente efcufan de comer de viernes por la mucha flema, y excrementicios hu» mores, que de el tal alimento íe engendran, y de en= fermedad grave, puede hacer fe mas grave. Pero pate» ce noeftan efeufados los paciétes á la única refección, y determinación de la hora; porque todas, y cada una de eftas enferraedades, tienen íu origen de humores fríps, y pit ni tofos, cuyo remedio es la ábftinencia, y omifiondecena. Efta condufion fe amplia en eftas mjfmas enfermedades, no folo quando eftán prefen* tes, fino también quando fuelen tener acceffiones, y repeticiones; y affi en el tiempo de la intermifion ef« cuían MEDiCO-MORAL. fry cafan del Ayuno, infitrgit enim ex bis verifimilts timor, neex ipfius jejimij'culpafQf' reVertantur,& deteriores tVjdant. ( fecunda concluí. ) 170 Enqualquier generó de infania,ó Fatui« dad completa, eftolidéz, abolición de memoria ü ol* vido, melancholia, manía, licantropic, hydrophovia, y otras femejantes efpecies, en la mifma aflhcion eftan Xn ^ tm, efeufados de todo el Ayuno, porque no fon capaces cha med c! del precepto. Y el mi fmo Zacchias cita á los figuien» «hiift.iom. tes, para prueba en fu tercera conclufion. (f) *x p¿*f ¡*n) ifi. En la intermiffion, de ninguna condición »V'r'«r'p¡* del Ayuno fe.efcufan, pues íe mirancomo fanos, ce= ,iuc^uxf' lando el impedimento por el qual fe efcufaban, fi no ,7. part 2. les queda reliquia, ó difpoficipn; que quedándoles, efs caP» *• íí* tan efeufados de todo el Ayuno. Pero haviédo temor DaB>' I0*, de quela locura vuelva, y que pueda fer efte legitima caufa para no ayunar, diftinguc de dos maneras. Lo primero, en quanto á ios Ayunos; porque de efte te- mor ferá jufto el impedimento del ayuno quareímal; pero no para los de entre femana. Lo fegundo, en quanto á las condiciones del Ayuno; porque efte te- mor efeufará la qualidad del Ayuno, no las otras con* diciones. Que el dicho temor fea caufa legitima de no ayunar, lo prueba; porque fi el hombre ayunando, . enloqueciera, ó dieta ocafion para ello, anteponía ua bien mediocre, á otros muchos mejores eu numero,y condición, quantosfueran los bienes, de que fe pri« vaba. (concluí. 3.) Y §. III. Do- 8 ó DISSE^ ACIÓN §. III. Dolorfympathico de cahei¡a. xp pOKTECHA. En la cephalalgia, ceprW lea, y emicranea, por íequedad, ó fluxo , de humores, fe niega la carne en la quareíma, porque hai muchos affi vexados,que no vacan de fusoperacioa ne3. Pero el ya viejo, ú obefo, que frequentemente los padezca, puede concederfele en la quarefma la carne; porque fácilmente puede invadirle apoplexia, por el largo ufo de alimentos, que engendran humo- res craíTos. (notefe lo quediximos acerca de efto §6. n. yi. y y2.) El que aun fiendo confínente, frequente* raente padece hemicránea con vómitos, puede reci* bir licencia de la carne fiempre, dos dias defpues de la acceffion. 153 Al Predicador, Cathedratico, Confeffor, 6 Per fon a muy necefíaria en la República, padecien» do dolor de cabeza, puede concederfele, porq por el dicho dolor efta obligado á vacar de íu exercicio. Y en fin, no duda conceder la carne en el dolor fy rapáthico de cabeza por erifypéla, ó que acompaña á otro in» gente morbo, ó por lombrices del ventrículo. ( pagin. 102. y 103.) 174 Rodrigue^. En los fympathicos, que fon en los que la cabeza padece mediatamente por el eí« tomago,ü otra oficina de primera región, es el mejor remedio la ábftinencia, tanto en laquantidíd,como en la qualidad. Pero fi, deberán difpenfarfe las dos &4EDIC0lM0$lAL. %7 eldiadelparoxifmo,v.g. en la Emicranea. Oporq hai algunas de tan rara eftirpe, que comiendo mucho, le mitigan, o porqne no pudiendo tomar alimento quando fe quiere, es precifoíocorrer al paciente qua^ do fe puede, (num.84.) Loque tiaheZacchiasde ' efto, ya eftá dicho. §• IV. ctAfeUos de ojos. *57 p 0 NT ECHA. En los privados deviftá por genero de deformidad, pafados los dolores ulceras, ó llagas, y pafada la curación de dos años,no concede la carne. Ni en los ciegos de nací. miento, ó por enfermedad. Enla debilidad de vifta enuno.ó ambos ojos, ó naturalmente, ó por continuo eftudio, ó alguna enfermedad, permite la licencia de la carne. Y la concedeabfoluta, ó ala Perfona priva» da,ó literaria, ó de algún gran cargo en la Republca. Pero en la Períona de otro orden, que paíados dea años, ni vaya á mas, ni a menos, la niega. 15o En la nitalopia, ó privación nocturna de vifta, fiendo* nativitate fe niega la carne: folo q fen» fiblementc fe perciba aumento de la privación con et alimentoquareímal. Perofi la debilidad en el ptogre» fo fe empieza á aclarar, ím peligro de la conciencia,1 concede la carne. En el dolor de ojos la niega, y fo« lo durando muchos días, y en Períona de algún cargo muy neceflarioen la Republicana Concede; porque defiftiera entonces de) tal exercicio* 88 DISSERTACION ijy En la fufnfion, ó cataracta,á todo gene= ro de gente concede la carne, porque íe privan de fus operaciones neceffarias. En la lachrimacton por dolor, inflamación, ü optalmia, ó ulcera de ojos, la conce» . de: pero en la tal lácrimacion,ó fluxo de lagrimas por aquofos, y acres humores, folo en los dados á letras la permite en quarefma: á los demás, no. 15-8 En la rubedo, ó color rubro-, nubécula al¡ búgo, úngula granizo, y carnofidades en el principio, y por qualquiera caufa, concédela carne, mientras fe curan: efto pafado, es fruftr¿aneo el ufo de ella. En la ¿mago, folo en el tiempo de la preparación de humo» res, y quatro, ó feis dias defpues de la purga. En la fií» tula lacrimal, ó rixa, á los que fe exercitan en letras, ó fe ocupan en Artes, en que trabaja la vifta, fe les da licencia, no á otros; porque por el continuo exercicio de la vifta,los humores fe advocan á la parte afecta, y puede refultar caries en el huefo. 159 En la dilatación, ó conftriccion de pupila, fi fueren nativas, no hai neceffidad de carne. Si por enfermedad ya pafada, que no fe erradicó en tiempo, no fe ha de conceder la licencia, fino á aquellos, que por el tal afecto vacan de fus neceflarias operaciones: la qual regla íe obferve generalmente en todas las en* fermedades de ojos, donde huviere duda de la licen* cía. De las ciento y diez enfermedades de ojos, dice, que en las ya numeradas hai la duda de la carne: en las demás eftá claro, ó el lapfo, y magnitud para con» y'" "" cederla MEbJC&MORAL. 89 cederla, ó la parvedad» par a negarla. J fufufit)nes,lyppitudines,^c, riada di£pen= ían abfolut amenté. En cafo que la diututnídad,y delí» cadez del doliente precifen para la difpenfa de carne, aun no tendrá lugar la delAy uno, pues de efta folo infta la neceffidad del precepto. Esdoétrina-cafi cov mun,oygafe á Paulo ^ib^'.C^nAp ardor, aut nu(la, VaUéprodift>:(pag. 248^) :} i; , ., ./.,,, 161 Zacchias. En eftas mifmas quier e, que co= man carne; por lo cralTo de los alimétos de viernes, y que ayunen quando íqn infieri, ógen ^1 principio. I? ero porq fe pueden-impedir mayores bienes ayunado (co« raodixo en la 3. concl.) los abftieqe del Ayuno. Quáa doeftan confirmados, ninguna condición los efcufa, pprq no tienen flue perder los qu$ han llegado á confu» mada ceguera Amplia defpues e.n¿ los que fuelen tener paroxiftnos, ó exaccrbacionej..(cora,o en la 2. concl.) Pro temporum, Qf evorum* quipdtrantur inratione viBus, quahtatc: y aífi>n la intermiffion los efcufa (4. concl.) T» t-\V. Stfitiü "de oydosmtM^Í boül; 162 pOKTECHA. No habla de inflamación^ vulneración, ó exulceracion de oydos q en eftos afeólos no duda conceder carne.: fino del do» lor por flato, ó difteraperie parva, y fu^t^o "de oy» 90 DISSERTACION dos, aunque dote algo, y ni en efto's, ni en la fordera nativa, la concede; pero fi,* en la que proviene por plaga, ó multitud de humores, ó alguna fracción. En las parótidas, ó por fiebres,-ó por alguna pernicicfa materia, también la permite; pero no en las que pros vienen de humor pituitofo fin dolor, ni cofa difícil, fi no fe agregue otra cofa,que la pida. '; x> 163 En la privación de olfato nativa ó por en* fermedad, no fe conceda; folo en el cafo, qué el Me» dico conofca que viniendo de enfermedad, pueda res cuperarfe por medio de la carne. Y efíb, en el que ne = ceffita de efte íentido para juzgar las medicinas, y no en otro,cocedaíe en quarefma. En el fluxo de fangrc de narizes, que no desbaftelas fuerzas, en la eryfipela, y herpes de narizes no corrofivo, aunque fea' miliar, no concede la carne; pero" fi, en uno, y en otro quando aparecen ulceras, fetór, y fiebre. Tampoco enel far* coma, ozena,y puftuMas-de narizes. En el polypó, fi*! porque puede terminar én gangrena. ! ^ ■■ >> '-»•r-^ 164 Énla erifipela, ó fórmicaraíliar de la bo= ca, porque es de1 tarda refolucion, y hai peligro de corrupción: y eri lafitTura, ó perrilla, fcgurt fu cauía, y en la qqeclfí^iende hafta la^barba, pprque/iiele ter« minar en ñolímetangere,conceie la carné. Pero no en la perrilla producida por el aire, ó femejantecofa. En la dislocación de mandíbula, caries, ódolor de dientes no fe concede la carne en quarefma: folo que íéa coiirinuo el dolor,' y en losFredicadores, y Maef* «ros, que les priva de íu exercicio. En MEDICO-.MORAL. 91 " ióy En las convulfiones, y relaxacionnes de labios, que impiden la loquela, algunos niños defde íu origen fuelen padecerlas, y affi pafados los fíete años, es fruftranea la curación y la carne: como tam- bién quedando defpues de enfermedad, pafados ¿os años es fuperflua la carne: pero fi en el principio fe tienta curación, concedafe en la quarefma, principal» mente á Predicadores, y Maeftros. 166 Rodrigue^. En los afectos de ojos, oy dos,1 dolores de dientes, &c. es fuperflua la difpenfa de la carne, porq también exift irán con ella, como fin el! a: porque ni ella, ni fu defecto fon parte, ni lemota pa» ra curarlos, ni para aumentarlos: y affi en efie caío fe debe eftar de parte del precepto, (n. 8y.) §. VI. dAfettos de lengua] 167 pONTECHA. En la inflamación de len» gua, que llena toda la boca, concede la carne, (hablará del caldo,porque el afecto impide la mafticacion ) En los apofteraas ulceras, y ránula, fe» gun la magnitud de cada uno de eftos tres afectos. En el gufto abolito, diminuido, ó depravado,que fin enfermedad, ó preñez acontece, concede la carne du- rante la preparación, y expirgacicn de la materia ó humor, que peca, y no mas; porque aunque el pacien» te entonces no vacará de fus operaciones neceflarias, la enfermedad fe íofpecha de confederación. Pero a: otecicndo por leve opilación de raefexaycas, y par» tes 92 DISSE^TACION tes de primera oficina, abflengaíe en quarefma de la curación, y déla carne,hafta que pa fe, ufando entre tanto de alimento tenue, y de mediocres aperientes. 168 La mudez, y balbucies nativas, no piden carne en períona alguna; pero intentando el medico la curación, concedafe lá carne por dos años. Y efto fe pbferve con balbucientcs,y que no pronuncien bien> mientras fe curan: y pafados dos años ceffa la carne. En la detracción de campanilla, pafada la afección, por la qual fue quitada, no fe conceda la carne; ni en la re laxación por infolacion, u otra caufa: ni en la re* tracción. Fetopermitafe en la inflamación de ella con fiebre, ó hemorrahia. 169 En las tonsilas, llamadas agallas; (dos glan¿ dulas, fegun Martínez, entre la laringe, y mufcuios del hyoides) haviendo grande inflamación, ó con fie» bre, concede la carne. Perofiendo aquella poca, por infolacion, ó exercicio, no fe permita; porque faciU mente fe evanéce el tumor. Diftmgaíe con cuidado efte afecto, de las quatro efpeciesde angina, convie» ne á faber, Cynanche, y Paracynanche, Synanche, y Paraíynanche, en las quales, no folo quando actual exiften, pero fi con freqiiencía acontecen, concédale la carne en quarefma. 170 En la quinta efpccie de angina con fiebre, o fin ella, que es de quatro géneros. Con inflamación de todas las partes internas déla boca: fin inflamación alguna el paciente percibe fofocaríe; ó con inflama,» cion \MED1QQWQRAL. 93 cion externa cerca de las fauces: ó con externa, é in» terna inflamación. EriWdas, aunque procedan eflen* cialmentc por inflamación 9 por luxación de las ver* ICkasdel.ctpllo^tiayganicyMifebrje, apareciendo di» ficultad de tragar, reípitar, y hablar, concede la carne por lo peligro fo del accidente. 17r ¿ En el ,nolime.tangere9 tumor, ó .exulcera» cion cotrofiva^en cara, y barba, e(n la talparia", ó., tu» mor de la cabeza con caries, por peligrofos, concede la carne* En los tumorcillos, que llaman ficus, ó li« chen, íolo; en la¿ perfonas privadas; turpeilludeft, cjj* fufticiensralio, utconcedatur carnis cpti{tftio,ntpertenitnt ,ad ommmo,dam mentí 1. , ±ir i~z En laseftrumás, p fean del cuello, ó . ¿n las mamilas, ó bajo de los brazos, ó de ingles, ó de ore- jas, con dolor, ó\fin él acompañe, ó no, inflamación, fean dequalquiera figura, ó aligadas, ó no, en grande, 9pequeño numero,,concede la carne, por fer enfer« medadmalimorís. No áííi en la hernia de garganta por qualquiera caufa, por no contener materia prava como las de arriba, ,N¿ en plAnchyle, o contracción (de-artículos, feconoeda: folo que en efte padezca el , nervio.algun afecto digno de nota, por los fymp» tomas grandes, que pueden feguirfe. i'± A a §. VIL 94 &TSSERTJCÍON §. VIL irffetfos defaú7!&s> di/lacacimesl xjv?k t>5 . heridas)y ulceras.a .x- :)¡vx- . > Ji7V"f^0-NrHCH^)En la total dislocación dé < huefio-, llamada exarthrema,de q»alqnie» «a parte, concede carne, por la inflamación, eorrup» cion, y otros males. Pero enla parva luxación, o dif» locación, óparáítfirema, batíafijospeleados^ y htié* vos. En la fractura de huelTo, ó fimple, ó compuéf» ta* concede carne,entrando en efto la contufion; y la niega en el cáyaquereíultayporque en lo otrohai peligro; y enVftd, ó poco, Ó. ninguno'. ^ • , 11 "174 '" " En elFnruncíiló "ábfceíTo> que nace eri los múfculos coninfia raacion?, y dolor* que fin reme* dio. medicinal te£mi&afenfupurácion,y íe cura: otros, que fobre la; cutis exiften, ni en unos, ai en'étros- con* cede carne.' Perofi eftuvieren mas radicados, permU iáíg; porque fe refieren á la efpécié de carbunco*en él qual, fea legitimo, ano, confiebre, ó fin ella, no fe duele coiieedet carne. En el íneuriMa to niegan folo ta permite^en; éil cáfo'de foprefixácüráeion. En las mamilas- acaecen unos tukho^rcHlos Uaruados glaíidu*- las fephiros, óefehirros: eftosnopid^n carne*. Pero fi, el cáncer,p cancro,víaiaian,y éfcróphtfta. *i7-y'^1 Zacctih\u Toda^^^heridi^íntórai con fiebre» o fin el la. Toe] a ule e c a m a 1 ig na c acnoetica, qué 11 a» manchironia,telephia»y OMasdeefté modo, kgiti* mweiit.e efcufan del Ayuno. YeiJa tazón,, porque ' ~ ■ x '' * ' ' - - " ¿04. MEDICO'MO^AL. 9y los pacientes neceffitan del mejor alimento dé fácil cocción, y que carezca de excremento. Pero fi la ni* cera maligna, y herida, foo fin fiebre, no haviendo otracofa^que urja, efcufan folo ta qualidad de ali- mento, no las otras condiciones del Ayuno. Antes no parece,, que ni a todos ios entredichos alimentos han de quedar efeufados los tales enfermos, mas pue* den comentar fe con huevas, fi ñau*ja otra eoía, co* mo el principio de la enfermedad, en el qual los rW« vos parecen fofpcchofos mayetmente en los-vulnera* dos, en los quales la rabien las carnes tienen la mifma íoípecha. En quanto a las heridas fe amplia la prinri* pal conclufioh, ákiend©, que aunque fean indi fer en* tes, ciertamente lasque fean con peligro de la vida, por fu qualidad, pero no cieno, y evidente, con todo efcufenlos, porque el temer razonable del mal furüito* es jufta caufa de la efe ufa. (concluí. 14») 176 Rodrigue^. El motivo de las fuentes, es el mas iniquade quantos fe han admitido por infidentes parala difpenfa. Ya los- Padres Salmantinos las re - prueban contr-a Sanch-ez^ Quintana Dueñas. ( pag» 607.) Ni lacaufade fi* exíftrticia^ni lefion5 actual de ellas, es capaz de -dtfpenfar cofa* que importe nadat quanto menos un piecepc© gravee. El raetiitá es-, eva* ctiar,.y affi quán*o mas íe cotna, y mejor, es dar ma$ caufa para las fuentes* Su ax5fcua4rdadíes-una* pequeiifs fcsna ulceía, capaz de eerratfe fegun la voluntad, y cif* parte igu&jbte» predicadas-, •juc-fox nkigun camino* l< dxm 96 DlSSE^T ACIÓN ^, dan arbitrio. Porqué el daño inminente no difpcn» ía: de otro modo, el que fe clavó una efpina, ó hirió i?.* en undedo, tendría derecho á la relaxacion de :o} . - ^h huí ¡ efte precepto, (num.112. ) . rjio f §. VIII. que termina en sbf.cfíb, afthma, dificultad de refpirar, orthophnsa, anhelación, difphnéa^que fon paffiorres de afperaarte» ri a,y pulmón; en todas {y en 1 as que traben fiebre ) no íe duda conceder la licencia de la carne enqualquier tiempo. En los gibofos, ócorcobados, no fe conceda, íoloque acontefcan en ellos, algunas de las dichas do» lencias- 182 Zacchiatr. Las enfermedades de pecho fon legitima caufa de impedir qua^lquieí Ayuno quadra» gefimal, ó temporario, fiendo dignas de nota, como todas las efpecíes de aftrvtüa>difphnéa;orthophnéa,tozi molefta, hemoptifis, ernpiema, pthifis,yotros; porq frigidumpsBori hiimicumyy, los peícados fon fiios, y con la humedad, excrementicia, q producen, pueden exa» ceíbar,y exponer a los dolientes a evidente peligro* El catarrainfigne, y muy m'oleftory con,fy mpt©mas, como tenue faifo, y de muchos dias con afpctidad en el peeho^y dolor, que íe pueden fomentar Gonlasco* raídas de quarefma> por trias, húmedas* vaporafas, ~íal* MEDICO*MO y vafp,y de todas las partes na tunales círcumjacentes, largas, y rebeldes obftrucciones, tumores, aun üñ fa ebre, enla cachegia, ó mal habito del cuerpo, teda ictericia confirmada, ó larga, toda efpecie de hydro- pecia, affi incipiente, como confirmada, la melancho» lia hypocondriaca, efcufan de toda condición de■ Ayn» no; porque refpecto ala debilidad de las partes; ó de la copia de malos humores, ó calor de las vifceras, ó por flatos, q abundan en los tales afectos, ni las* hier» bas, ni los frutos, ni legumbres pueden-admitir fe; po* el.grandaño, que puede fegniríe, efpecialmente en el largo, tiempo de. la quarefma. ( 8. conchií.} 20© Rodrigue?*. En las enfermedades hypocon» drkcas/efcorbuio, melanchalia, &c. aunque la carne - so les es de ningún provecho, pues la abundancia de fo ¿MEDICO*MO%AL. 107 fu paño íuele fer caufa de aquellas dolencias, como fe vee en Vvilis. (h) Eflb no obftante, en la quatef» tQm\ mi fe les debe conceder; porque las legtimbres,y peí= 155. cados falados, fon abfolutamentemas dañofos en eí= fos afectos, y el lafgo enrío de una qirarefma es dtfí» cultofo huir de eftos alimentos. Por lo qual no debe en tender íe efto con los que tengan poffibilidad de peícados fie feos, y manjares íuficientes para pafar fin ios falados, y legumbres. Tkrnpoco con las abftinen» cías de femana; pues los huévos.y hierbal, que fon ali» mentó mas proprio en eftas dolencias, pueden muy bien refocilar uno, ó dos días Si fon habituales,y aun actuales, en fu principio no hai neceffidad, ni, remo» lúdela difpenfa de Ayuno; porque es fu principal re* medio la téplanza. Siéndola caufa de todos los afee» tos hypocondriacos, fegun los Autores, crudezas, in» craffacion, eftagnaeton, y tartareidades de los jigos. Y en fin, fean los qtré fueren, fu cura cion fe logra con los que llaman atenuantes, difolventes, y volatilizan- tes, (num. 91.) "x 201 La cachegia, fiopifacion, cIpróiTsSrc. etV tan reñidas con la comida de mucha ftrbftancia, y abundancia d& qualquíera. Infinidad de ellas fe cu» ran con folo elexercicia, evacuación, y parcimo» nía, como que fu caufa es. defecto» de feer ecioacs* por obftufiónde poros en las glándulavy craffiedetes lis quidos. Suponga, qne robre eftos fundamentos, folo tendrá lugar la> difpenfa de-carne) quando por la diu» r~ uirnidaJ MEDICO-.fyQRAL.; 108 turnidad, ó complicación, hai.debilidad, que lo ne- ceffita. Pero en aufencia de eftas c-aufas, ni una, ni otra difpeníacion tienen cabida. En las preícripcio» nes de dieta,que trahen paralacachegia, y cachomia, FabricioHildano, (de ichor.) Benedicto Silvático, (cent. 3.confmed.) y Henrico Regio,( apud Craan.) qafi todas las carnes quedan excluidas. Y la de pollo, ó perdíz,quepermiten (olamente,escomo menos ma= la; pero atendida la razón, por que fon peffimas las primeras, no dejarán de fer danofas las fegundas. EL alimento, que absolutamente dan propicio, es huevos fctbibles,y hierbas apetitivas, (n 93.) 202 Debajo d^ laexprefion cachetica fe comí prebenden las ictericias, é hydrdpecias. La maladia. thefis, prava nutrición, y funefta efperanza de eftas ultimas, difpenfan la carne^y el Ayno, En la ictericia fin fiebre, no hai neceffidad de alguna. Ygeneralmép te para norma en los afectos chacheticos, notefe efta graduación de Etmullero: Es la cacbegia fruto de laca* cocbymia,y eslá, pedífecua de la cacochylia (pag.2yx.) Con que el remedio eftáen atenuar,difrainuir,y dcobturar líquidos,y íolidosj y,quan mal.te lograrácon la abun* d ancia, y íubftanciofo de los alimentos, eftá pa» teme, (num.94.) §. XII.1 jffeftos de inteflinoT tenues. , 589 pOntecba. En la celiaca pafion, liemería,1 - dificultadde inteftinos, ó exulceracion ----_------------------------- de MFDICOMORM's Í09 ' de ellos por humores acres, lévidad de imeftinos, y di fe nteriá, concede carne; porque fi qualefquierade eftas fe alargue mucho, fe figue atrophia. Y por que cafi todo alimento de vigilia augmenta la raíz de ef* tos afectos. Los peces dan alimento húmedo,y fi llevan algo de efpecies, como la pimienta,irriían, y fe augmenta laexpuifion. El alimento de hortaliza, ó legumbres es de débil fuBfiancia,y también los fruc» tos de árbol, los huevos humedecen mucho. Y la Je= che, fi né fe alTera, evacúa el vientre, 204 En la diarrhea, fi durare muchos dias, fea por qualefquiera cauíi,fe concede la carne en quaieU ma;porqiie fuera de incurrir el que la t)adece,en aquel t los males, en ios qué la difentéria.y iienteria, fe prú van los pacientes dé fu'exereicio, Pero en la q Viene á ciertos intervalos á expiar la redundancia de humores, de ninguna manera fe conceda la eatne;antes íe ha de dejar, qué fe evacué lo nocivo; (no haviendo otra én« fermedad) Y ni con alimentos,'ni medicinas, íi otro auxilio fe ha de a tajar, h afta qwe fe haya depuefto la redundancia. Sólo quaridó haya traydo debilidad, que entonces conviene la carne. En la cholera morbo, y en el vplvülo, viftos, qué íearí,eoncede la carne por lo peligroíode los accidentes. ' i:'r 2oy Rodrigue^. En la difenteriá^raas logar din los Autores á los huevos, leche, y yerbasyéfúé á-Wcá'ta. ne; Y en la diarrhea totalmente la 'prdhífeéBáglrbio; c©mo aífi, en evacuación de vientre, en donde es tan Ee pte» no DISSEipACIÓN precifoelincraffar con alimento íubftanciofo, y dar vigor al doliente por la fubftancia, que fe pierde,cuyas excelencias contiene la carne, fe pTohibe efte alimen» to? Si por cierto. Y nada menos, que como eftimulos de la enfermedad. Digalo el citado: Camium efus auget eiiarrheas, caVe igitnr ab illis, quantum poteris (108 prax.) Rara expreffion, y fuerte defengaño para los adherí dos á la carne! En los dolores hemorroidales,tambien la iníulta Thomás Sidenham, conque en eftos afee* tos folo hay neceffidad de fu carencia, (num.90.) §. XIII. M0%AL. ni do, que la retención no fea vehemente, el dolor mu, d ible con algún alivio por las medicinas fáciles apli= cadas, como ayudas, &c. no íe conceda carne en qua- refma; porque es conforme a razón, que la materia obftruente eft é folo en la cabidad de inteftinos,fin que padcfca la fubftancia de la parte; y affi no hay peligro temible, y puede focorrerfe con alimentos de vigilia, >' otros remedios, &C* 208 Pero no duda conceder la carneen qual» quier tiempo, en aquel, que aunque por largos ínter* va los acontefca, como dedos, tres,quatro,ó feís me» íes, aún fin abfcefíb, (porque con efte es peísimoel dolor) en aquel dice, apenas tolerablev afixo á alguno de los craflos inteftinos. con frequentcs vomites, fu» dor frió, refrigeración de extremos, íingulto, pertur» bacionde fenridos, fpafmo, ó convulfionde partes, retención de todos Iosexcreros, puftula negra del ta» maño de una haba, aparecía^ fobre la parte dolente,y fue no profundo, amenaza efto gran peligro, é indica cftár la materia adherida á las túnicas de los intefti- nos, y más, no cediendo a reraedios,y generalmente en la cólica, fea porquaiefquieracauía;haviendofig» nos de peligro, guardefe la regla fegunfuere la caufa, ó la fuerza de ellos. 209 En los que tienen lombrices, largas, re* dondas, y grandes en los íliperiores inteftinos fe con* cede carne; porque fuerade los alimentos de vigilia las augmentan, atrahen al paciente muchas enferme» da» 112. niSSERTJCION'' - ■ -■ dades, y poftran, ó enflaquecen las fuerzas. Trahe fus fignos para conocerla?, (pag. 420.) Pefo fi eftuvie= ren en parte inferior, y fin accidentes, cómo éri el recto,y fueren pequeñas, como las ícarides que fé co» * noce por U titilación, y pturito de la parte,&C no hay razón para conceder la carne en quarefma;potqi:é no hay peligro. 2¿o En la procidencia del ano, faltando la inflamación, ni>en el teneírno, ó exulceracioudel reía to inteftino, no fe conceda carne; aunque en el tenéf» rao permitiéndola, no fe opone á la conciencia; por quanto los: pacientes vacan de fu exercicio. Sirva por regla en las almoiranas, fean grandes, ó pequeñas, fi eftañdo détro exiften hazia el perineo (efto es, éntie as dos vías) y eftreehan la vía de orina, que íe com cé en éfla acción, ó fean internas, ó externas4, fangirineas,"ó melancólicas, fi fon copiofas,que el cuerpo fiema fáti= ga, y debilidad, cPncedafe carne en quarefma fin pe» ügro de conciencia; porque privandofe los'pacientés de fus operaciones, amenazan otros males. Eti las otras no fe conceda la carne; porque ni hay peligro, ni privan de las;oper aciones En la ulcera del recto, que arroja fangre, guardefe la mifma regla'de eñe flu« "xo, que el de las almorranas. §. XIV.' nJfetíos de Rinones. -^r* * 211 pONTECHA. EN LAS ULCERAS . . _ vdéaáiron, que fe conocen poi la orina cruen* MÉMCÓMO<¡{AL. u3 cruenta, y con podre por muchos dias con dolor de ri»¿ fiones, y carúnculas arrojadas con las orinas craíTas^ fiperfeveran por muchos dias con efuííkn de fangre por la orina, aunque íea en prca cantidad, concede la carne; porque deftroza fuerzas, y fe figue hecticá. En el abfceíTo de ríñones, inflamación; vulneración, fe fiípone la carne; porque hay fiebre. En la imbeci» lidad de ríñones, que Uk I a orina pura, y por la laxí» dadde las partes énfangrentada,perfeverando efta por muchos dias, por el peligro, que amenaza de tas alectos dkhos, concede la carne. Lo mifmo etl la diabética paffion, por la tabesuniveríal,que de ella fe figue. 212 En el calculo de uñones, fea la primer a con» clufion; Conocida la piedra en los ríñones (ó en la ve« giga de que habla la fegunda conclufion) con do. lor, que atormenta, fea en quálquiera edad, fexó, y aun fin fiebre cacédafe la carne; por los muchas dañes que trahe el afecto, y hafta la muerte, como ion de* tención de otina, ulceras difícil mente fanable$,érrifia5 macton,qne aviendoláoo fe pueden miniftrar los trie, dicamentos, que mtíévén orina, ni tampoco los ali* raentos quadragcfim ales, que tienen efiápropíédád. Y affi íe concede la carne de'fiyísn, polta, perdiz/ar* toéro, y otras, fuetá dé la de lechón. No haviendo do* lor, aunque aparefean fignos de piedra, como falté fof= pecha de inflamación, no hay neccjffidad de la carne; poique de los de vigilia hay báftántes, que condecen Ff ~ ~" paie íi4 DISSE^T ACIÓN para éfte afecto, ni hay peligro del crecimiento de lf piedra, y íe puede con effo& alimentos aguardar hai» ta el ultimo día de la quarefma. 213 Pero G a las dificultades de riñon,.y vegi», ga fe figa tabes, hecticas, y á los calculofos acompañe; inapetencia, ttifteza,deffeo de vomitar,, y otras co» (as: Quis £Medicorum, dice: ¡uupulofus adhuc,,non fie ?niferebnur eis,qmdlibenter fuam ínterponat authoritatem ad camisefiím quadragefima umpore^ ( pag. 441) A que agrega, como algunos, explican; Lapidan babentib.us carnes dmda. Que lo, tomaron del Libro de Gale.no^ef* crito de la curación de piedra* 214 En las arenas, aunque haya multitud de ellas: en. la piedra de la vegiga, fea pequeña, ó gran« de, no haviendo dolor, figno de flegmon, íi otra dif». temperie, principalmente en raugeres, que no. tienen canto peligra, rio hay para que conceder carne £n v;* gilía; haviendo tantos alimentosde viernes muy con» ducentes á efta dolencia, affi de leche afferada como otros. Fuera dé que acontece,.que dura La piedra en la vegiga toda la vida, fin que falten los pacientes á fus operaciones, nicrecer ellas, fenciblemente. ítues para qué fe ha de conceder la licencia ? 21 y Zacchias. Los v icios de ríñones^ y vegi» ga, que claramente incomodan la excreción de orina. como debilidad, obftniccion, por craficie de humor, q por piedra,la gonorrhea vetdadera,efuffion 1 angrien» ta, diabetes, eftrangqria, Ífc[mria,dyfuria,ardor de orí.» medicólo ral: ny na, y otros afectosde efté génerpylegitimamenteim» piden del:Ayuno;porque"por lo? abundante, que em gendran de flema los alimentos de vigilia, no pueden ufar fe fia peligra de notable daño, mayormeu te en- cuerpes morbofos. Pero pueden, los tales paeiente-s guardar lá> Horade la comida y; única refección con giandiffirro provecho; pues laparcimonia les es profi- cua para abfuraiUa* .^ excrementicias*-(9. conclufia.). . or? 0^\ ot v .u ->b , 216 Rodrigfie^ En los, afectos de vegiga; y ríñones, es el mejor auxilio medico la parerm©nia,y abftinenciade alimentas guíenos.. Y;affi en. efta en» feraedac), como en los dolores artéticos.,-ceática, go* ta,.&c. fi>1 precepto fuefíe poffitivo- de comer carné> feria mas faludable difpenfarlo para no comerla.Efta. dpetrina es comuniffima en los-Mcdicos de mayoref* tatura...Valero de Taranto, vio jcurar un. gotpfo fin, otra. m-dicína> qué Ja ábftinencia» (apudíD©k),Q*rcr cafo harto-finguiar de un gotofo, curado con la dieta, refiere Fr, Luis de Granada en el tratada del Ayuno* (foK r^ihri67,), Y na fe SP^*1 I,t\ ESTERILIDAD de uno,y otro íexo,no piden carne en qua» refma; porque aunque la curación la pidiera, puede aguatdarfe hafta fin cleí tiempo Santo de quarefma,no - padeciendo el individuo cofa de confideracion,ni tam* poco la efpecie, Las tres afecciones llamadas por Tos ? Médicos delútero, con viene a fzbex: fufocarion, con* tpráon9 y procidemiajaunque fean graves, y caufa de ■;.. té curación aguardefeá que p a fie quarefma'para que fe haga. 220 Pero fiel vicio, ¿cafocontrahido, infiera dolores de honbros, de ingles, claudicación por un lado, u otro, retención de feces, ftilicidio de orina, reípiracion difícil, ó no featreban árefpitar por eldo«' lcr como quando viene ingente dolor de almorranas,' fin peligro de conciencia puede concederfe la carne; porque puede efperaríe rancho raal/que llegue hafta la muerte. N 221 En las hyfiericas fuelen aparecer fignos fe¿ r»ejautes á veneno temado, que ni por pulió, ni por refpiracion fe conoce; pero una vez curado el afecto, acontece, que no vuelba, y aífi no concede á eftas car» ne en quarefma: ¡j En las pacientes de hyftericaafec» ' (^ cion, por íufecacion?, avocación, inflamación, furor"l>ag. 28$; uterino, fatyriacis, ó varios géneros de fluxión, pero ác coídc v una vez no mas; pafftda la sfliccion* aunque efta deba fu origen á humores retenidos de naturaleza de venes ' río, fi yá no aparecen rymptómas; pregunta, dudando' el Autor, fi íe podrá, conceder carne, y no leíuélv é/ Pero fi frequentemente acontefea, qne la rnugér pa» defea los tales afectos, no hay paiá.qué dudar Ja cono ceffionde la carne.(de corde venenat. fol 29 5.I111 7.) 222 En les meíes inmoderados, ó fluxo de fa.n» gté inmoderado, que dura por muchos días concede Gg carne; n8 ZISSEipACION carné;porque no fefigan, ó fiebre hectica, hydrop*»\ fia, ó cachegia,y muchos males,como dice el aphorif* t rao. (KySimtnflruaplurafiantjQpc. En el flúor-multe* bm,ó gonorrhea, fea por quálquiera caufa, también fi fuere grave, y de muchos dias concede carne; por» que paran en emafiaríe, les puede venir convulfion, y otros accidentes, y affi del fluxo grave, y de muchos dias, pienío habla el aphoriímo in fiuxumuliebri fi con- Vulfio, ¿ceder con las viandas de carney de hecho fucede;por* que muchos días fe quejan también los hemiofos, atwi" ' que no hayan comido de vigilia. Y hafta ahora nadie 'ha dicho con razón, ni experiencia, que los huevos, y peícados, efpecialmentelos falados, fean flmilenios. Lo que es-, cieno, que la mucha cantidad de pafto, les ferá grave fo; y affi fi no pueden llevar el ayuno quan» titativo, fin abundar enla comida,fe les puede difpen» íar la ábftinencia de refección, (uüm. no.) §. XVII. De la concepción, aborto ¡y parto. 230 pONTECHA. ESTANDO PRESEN! tes fignos de concepción, principalmente con vehemente apetito de la carne, no conviene al Medico negarla, á las preñadas; aunque falte el muy ",:■ " Hh "':" de= Í2* DISSERTJCIOK depravado apetito, pica feo, de hambre, y los demás que demueftran redundancia de fucos vicioíos, fino fo* lamente por el vehemente, y ardiente apetito de co» raerla, fe conceda por el Medico, por el peligro de , aborto. 231 Pero fino hay aquel ardiente apetito de comerla (como por antojo) en los dias prohibidos, Dub 8. Pag. pragnans non excufatur a deleBu ciborum. (1.) Porque auna 76: Un. i*, que no eftá obligada a ayunar, no le es licito para ali» •mentarla prole ufar de efta qualidad de alimentos, aunque feaneceffaria la mayor cantidad de los dé vi» "gilia. Si por otra parte fe tema detrimento a la cria» tura, que en efte cafo, y en el de apetecerla ardiente» mente, puede concederfele; no acontefca aborto,po* efto, ó por el Ayuno, y fe figa mutilación de algún iniembro en la criatura, ó íalga tníenfato de razón. 231 Efta mifma regla fe obferve en las pre* fiadas de mola, hafta el undécimo mes, concediendo» les el alimento por la vehemencia, y conatodel ape* tito. Pero paflados losonze meíes,fi apareíca mayor dolor de artejos, é inturaefcencia de pies; entonces concedafe la carne;porque ya amenaza peligro de otras enfermedades. No apareciendo tales fignos, fi» no un bien eftar, con íolo el eftoibo, vicioíamente fe dará la licencia de la carne pallados los onze raefes; porque fegun las hiftorias efta enfermedad dura un 'año, tres, y aun toda la vida, fin admitir curación. MEDICO-MORAL. Í23 concédela carne pordies, óquinzedias; porqué fue3 len producirfe ingentes enfermedades á la excluí!on del feto vivo,y del que fale muerto,muchas dignas de lloraríe,corao fyncope repetido,amarillez de todo el cuerpo, eípecialmente en la cara, agudos dolores en las partes imas, y de ombligo, y otras. Se agtega á efto el peligro de la muger, principalmente fi el abor» to acaece en el octavo mes, fi fea eftrecha, fi grande de edad, fi no puigué, que fácilmente paiTados pocos dias,fuelen afligirle algunos accidentes de enfermedad. 234 En el parto en quareíma algunas fe crugen de dolores por un mes,otras fiemen debilidad <^>or tres raefes, aun fin criar.que las que crían algunas ^.Uicen no poderlo hazer fin comer carne, aunque no padefean dolor alguno, ó enfermedad. El Autor afir» ma, que Ci panadas tres femanas falta el dolor, y eftán ya coníolidadas las partes, y no cria la enixa; para qué fe le hade conceder mas tiempo de carne? X)tpin+ guefcant congratulentur, er nil patianturt Non etenim iddecet illo fanBo tempore. Y agrega las palabras de la Epiftoladel primer día de la quarefma: Exurgátfpon* ja de thalamo, Qffponfus de cubículo, Qfc. 235 Las lactantes fuelen pedir licencia de carne; porque no tienen abundante leche como quie» ren, ó porque tienten alguna debilidad de cabeza; ni una t\i otra es cauía para conceder la carne,por la pri- mera aconfeja tomen pefcados,lechugas,y otros con» dimentos de almendra, con avellanas, y leche, y la "V~ le» 124 DISSEQt? ACIÓN leche mifma", que es de buen fuco, y muy buen ali* mentó, y otros que fin carne pueden tomarfe, conque fe fatisface para lo fegundo. Juzga fi, que no ayunen las lactantes, y que coman bien, por lo mucho, que íe r diffipan,y fe dañan, fegun aquel confejo de Avicenna, Lac infanti non eft dandum, dumeft nutrixjejuna. 236* Las que dan lechea niños enfermos, fiendo la enfermedad de alguna confideración, la pe» quena es grande para los párvulos, y affi fin peligro de conciencia fe les conceda carne. Pero no fe cena ceda en el defecto, ó redundancia de leche (comoef* lá dicho en el §.4. nura. 41.) haviendo copia de alimentosde vigilia para el defecto. En los vicios de ia leché fe ha de notar, que aunque fe varíe la cura» cien, que fe debe á lacafeacion, de la que íe deba á la grunefaccion de tila; ó fea feroía,no haviendo fiebre fin peligro ni miedode tumor íe pueden miniftrar los alimentos atenuantes, y quedan poco alimento de los que hay en quarefma copia ínficiente,como no tir» ja otra cofa. 237 Algunas vezes íe haze viciofa la leche; porque fe vuelve acre, acida, ó amarga, otras muy tenue, ó muy crafa, ó toma mal olor, ó color negro, rubro, ó lívido. No es ageno de razón en eftos cafos, que fe purguen las lactantes con cofa lígera,no fe mue= va mucho el vientre, y en eflbs días folo coman car= »e,T¡ no fe puede cómodamente mudar de lactante. 238 # Zacchm. Las preñadas de qualefqnier tie*n» _.___j MEDICO^MO^AL. y.r tiempo^ lasaría as. por todo el ti>rripo del parto, las"" ^lie4daxileche,.ó crian, no tan folono eftán obligadas a ayunar,pero ayunando pecan,.mayormente las pre= ^ nadas, y lactantes fi por el ayuno fe les figue algún daño á la fanidad de fas infantes; peto erf efto fe ha de advéitir, quela cpncjgfipn prGcéc1éc|uándo¡as preña» das fenfiblemente experimentan, que ó por 1a*qualiV dad de alimentos, ó por la retardación, ó diminución de refecciones fe dañan...En quanto á las iadantes quando por la qualidad ^alimentos vá en ellas la le» che evidentemente en peor condición (porque en quanto á la quantidad de refeccicnes, fin duda no éí» -tan obligadas) ó fus niñps.fpnflacos^ débiles de fuer» . ^ó^nfermizas, de otra manera, fi por el ayuno » •ñadafientan dañarfe; no folono pecan ayunando, i fino que pecan ft nó ayunan, (ult. conc. num. 39.) 2 39 Rodrigue^. Por lo que reípeta alas pre, ' ñadas,puede haver baftante indulgencia en orden al ayuno, no en quanto 3 la carne. Sobrero qual bajo t un informe verazdeellas,hará juicio el Medico fabio, y prudente fi hay neceffidad de íufragarles la difpenfa-; pero debe advertirfe, que la ptopoficion, que fe halla en algqnoslibros', y que eftá. vertida -entre el vulgo 1 de que peca mprtalraen te la preñada, que obferva el ayuno, esefcandalofa, y errouea. A millares eftán las experiencias de ayunantes preñadas hafta el parto fin \ detrimento alguno, Ja Medicina llena de cphfejos á ■ • las preñadas para que íe abftengan de comerdema» .' I i fiado, nf ■ mSSÉRTJClOM fiado, y á horas defacoftombradas; porque potelV* acaecen infcliciffimos partos, veafe, que traza deqaep ^, í") fea pecado el obíervar el ayuno, (m) r , i* Primer t(H •«■•.., * , . • »'.■■•* • rv?afp. pa. §. XVIII. T)elm articulaciones. *-r^ b r«d. z6.n. 24Q poNTÉCHA. EN EL DOLOR"? de articulaciones inveterado, que toda» via no relufca lapfo de extenuación en la rodilla, ni- debilidad en algún principal miembro, no es licito^ concedei la carne en quarefnBry porgue la tal enfer» raedad ni crece,ní fe quita con qualquier alimento, y lootto,cpie de los de vigilia haycopia baftante,qne fonpropriospara efte accidente. Tampoco fe-con»; ceda eaqualquiera afección de eftas, fi tenga origen^ de plenitud, no haviendo debilidaddé algún miembro principal, ni tumor de partes, aunque el dolor algunas vezes fea cruciante- ba,fta con los alimentos ya infiúua= dos, y que fean atenuantes, como fe prueba -conla au» ■'(o) thoridad larga de Galeno: Cum viBus ratio attenuans% in Fontectá ^c ^y^ meno8 quando viene el afecto con dolo» ' Umi'/Jincis. res á intervalos por continua equitación, Vel ab imnto* derato citw, porque aunque fe haya ,de juzgar del ay u=v no, íegtin laneceffidaddé las fuerzas, no hay par a rjue ' conceder la carne, bañando los huevos* leche* y otras cofas. «241 Pero fi fuete el dolor reciente, y frequen» te en quálquiera articulación, y álgun^rarembro no» ble, y dcbil^concedafeel indulto de. come* caine;por» ''; ■;..."" T- que MEDICO'MORAL. % 127 que amenaza peligro de que íe mueva ef humor,qu* hazeíogota al tal miembro noble, ó principe y de hay la muerte, fegun aquello d* Galeno: (o) AfipexU (o) mus etemmfape in bis, qui articulan morbo, aut podraga l?,ib* ,H,>; obnoxjerantquodrepulfisabartubusbumoribus eó déla, <^*\.Z¿ tvs> '^^prtnTipemaliqüampartémcontendent^ «*"• f." teritum anulen. Pero fe habla quando efte miembro noble absolutamente eftá débil. 242 En quálquiera edad, que por Tos dolores de artículos hay an* aparecido tumores, y tophos,como fuelen veerfe fréqucnremente en la chy ragra, y podra» ^ gt, concédatela carne?porqueceffan los pacientes de * * fus operaciones, y porque indica ya purulenta, y pra* fe materia, confirmalo con un texto de Galeno (p) (p)' Qnin etiam h animalis corpore,Qfc. Eri las fifuras de In. libr° €l manos, pies, y orejas, que por hyvierno fuelen acae-^Tg?6"^ cer fi nó hay corrupción., ó ulcera, que lo pida, fegnn iext» S« íu magnitud, ni en los callos dé los pies,no hay neceí» fi da d d e concé der la ca i* ne. 243 Zacchias,y Rodrigue^ fon de un mifmo dictamen en la gota. El primero en la 12. concluí, y elfegundodeídeernum. ioy. hafta el num, 10S. Di* ce efte íegundo, que toda efpecie de dolores artheti= eos, que fea chyragra, podagra, ceática, tracolagra, íyágonagra,clyfagra,rachyíagra, pechyagra, horaa=\ gra, todo afecto nefrítico habitual, fiebres erráticas, h % hernia, que llaman quebradura, las fuentes, é immi» nencia dé qualquiet afecto, aunque fea de los crimina» les, i2S DISSETxT^l^ , leSjUingunoin/inuá ncceujdadpara dífpep^r-aDmnen» cía alguna. Solo en cafo, que la diuturnidad .haya traydo debilidad grande en el doliente, que entonces efta la haze necefíaría,affi comofin ella folo es necef= faria la privación de femejantes alimentos. v 244 En todos los afectos del primer catalogo,' y en los nefriticos, como que fon hijos de mía mifma caufa,íegun los cordatos,eftá abfolutarnente recomen* dada la parcimonia,y carencia de alimentos de pruef* ía fubftancia qual fon lasearnes,como uno de los prin» cipales indicados para fu curación. Veafe la caufa re* mota en Menjorio (Pathol.) á quiencafi todos fubf= criben: Prima coBionisVitiumin Ventrículo, maté peraBa dlgíflio. Y por caufas de ^RscHcllvatiowsperpetua,-cce*¿> naque adiBiales, fegun él raifmo,y el Inglés Sydenham. 245 Por lo qual es uniforme confentiraiento de los Autores, refpecto adieta, el que fe figue: Cum varia camium genera, jftmtd ingefta plus moleftia Ventrículo faceficunt, quam unicum,quodomn'ta ifia quantitate exaquet. De cateris aümentis, dempta carne pro íibitu comedat. Efto es de Sydenham hablando déla gota, y en ella de to» da Athritis. Lo mifmo TheodoroTurquet de Mayer» ne (de Athrir.) Lo mifmo, y con la mifma expreffion Jacobo Manget, aiTegurando, que hay muchos Auto» res, q dan por dañoía la carn e:quídam,dice,carnes dam» nant, Veluti nimium aptas fubminifirandis fimguini particu* lis fermentefcibtUbus. Y aunque él abfolmamepte no es de parecer de que fe excluya; porque no ferá muy " MEDICOtMORAL: 129» -«¿agradable al enfermo; peto faoadel catalogo á la ma» ypr parte de las• caines.cn cafo de permitirla: Vitanda, profigue, qua nimis funt alimenti. (de Athrit.) ,*.. | -I246 Ray mundo Fortis feñala al Ayuno como parte mayor de la curación de eítes afeólos: femel in die cibum capere. (cent. 4. )Lamiímo Gregorio Horftio, (tom. z.j Y con h mifma expreffion Sydenham; non Coenent itaque, qui podagrafunt obnoxij. (ibid.) Siendo por lo contrario la leche, y huevos forbibles el mejor ali» raento en tpda Athritis, como lo han afíegurado mu» . )t -'chos, entreeílos Vvalfchimid, y Greifelio. fi ,, ■\,V/ Ix: §. XIX. Ajenos del[cutis. ^.247 p O NT echa: comenzando ;« * deíde la cabeza, el encaneíceríe, y en» calvefcerfe no pidecarne,ni priva del Ayunp/alvo que lo primero v enga de enfermedad, quando el cuero fe pone blanco, que es un genero de raorphea* de cuya naturaleza el Medico juzgará para la licencia de car» ne. Eneldefluvio de cabellos, ó caimiento de pelo diftinto. de la alopefia, y ophiafis,el Autor concede la carne, y que fe vean las^fuerzas para el Ayuno: quia pratnquamquod, ut colligitur ex Hippoc. Qf Gafen, in quibusáam m^rbis fiínificat jam bomines morituros, tanta efifam hoc affeBup*<ájente indecoratio, isr peñeulum diftem* per adonis cerebú. ut jam tempore ínter diBo legi nonvide&ntut fubj'ui (pag. 88.) Conque íupone por muy grave,el taldefluvioé :""•; KK En i3o DTSSEí¿ ni con efte ni el otro alimento ha de curaríe, ni aug* raentaríecon peligro, no envolviéndolo. De eftos *' ^afe tos hay tres ef pedes: Alabaosi Adelas yy Leuce, que ffconlos alimentos de quarefma, que no augmentan la flema, hay bañante. 25-2 Pero ocupando la Leuce muchas partes, 6 las principales, y los lugares bellofos, limpios por la tal dolencia fe vuelvan, y en quálquiera de ellos fe augmente, nó fe dude de la licencia para la carne; pot» que fi fe haze el dicho afecta por el mal habito del cuerpo, amenaza mayor peligro» ó de muerte, ó de tranfiniuarfe en enfermedades frías;par loqueíe ha de airar con toda genero de remedios, affi medicina» les, coma alimenticios. Y con efte orden fe ha de fo» correr á ios pacientes deMetas, y Alpbeos. 2 5 * En la lepra, conocida que (ea, conceda fe la carne» y también en el afectoelephaaSacóry es la Tazón; porque como en efte por tanta corrupcionjy * raa» 132 .^fflMERTJÜION raalicia:-dÍ8.humi)tfs'.fael«íirJas/carnes.corroerle hafta loe hueíos, affi en la lepra, haziendoíe'de hgmoresr, queexiften en la cutis íuele tranfmutaríe en Eiephan» fiafis, una, y otro-es afecto de grandiffima confidera» ■cion, y ciertamente fuelen^compañarle muchos ma» les. En la labe gálica en que los cabellos, y partes fue» ien caerfe concedafe la carne por la malicia de lama» teria. s VN "; v; 254 En la fama, ó fea Teca* ó húmeda en efta ola otra edad/por efta, ó la otra caufa, fi nó fe agre» ga Otra cofa no ^hay para que concederla, baftando -los alimentos de quarefma, como fe abftengan de azeyte/y no alarguen defpues lacuracion por mucho/ tiempo, que pueda mudaríe en lepra, y multiplicaría principalmente en Otoño. Si por otro afecto agre» gado á ella fe concede la carne, privenfe de la de Le» ehen; porque efta augmenta la íarna. 2 5 5 Zacchias. Los afectos del cutís d-añando k folo á la hermofura, ó mediocreraente j ízgando a la íanidad, ninguna condición del Ayuno efcufan; pero *fi dañan feñaladamente la fanidadeon moleftacomea fon, ó prurito,impidiendo el fueño, excitando meen» ' dio, tó,:y fiebre, ó con fu mucha diuturnidadf moleí= vten la vida corrió todas las efpecies de lepra, alopefia Contumaz, tina, y algunas efpecies de íarna, perrina» ■" ees, y reveldes,, que traben mucha deformidad, que ■'■ provienendéfleraa Talada, acre, adufto, y herodente humo'r, entonces muchas ¿le ellas efcufan la qualidad _---------------------_---------- .- rfcl MEDICO'MO^ALi 133 del ayuno, y «algunas todoel ayuno; porque las comí* das de vigilia pueaéti fomentarlas/En la faTnade me« diana confinencia, cjue acompaña incendio, y prurito los pefes, y yerbas {exceptuando aIgunasv legumbres, y alimentos f al acj os) fon mas provecho ips, que daño: íos^porque r/efrefcapla íangre,y anodiían la comefóm No íe conceda con tama libertad la'carne álos? íarno» íoshenlps Ayunos;baftandoles,urgiendp la mayor ne» ceffida^Ups huevos, íegpn Ja calidad de las peifanas. (ii.cpnclufio.) !-> . .^56.. El morto gálico por razón de tal, tienje aquella qualidad enemiga difeminada de fde la región naturajá los humores, y maza de fangre, y por eflp Cualquier genero de.enfer^edad, hafta la fiebre, pue» 1 de íergali'Ca,y affi fe hade juzga/íegimTtigravedac^ ó levedad; porque por razón de la qua lidad enemiga, pareCe, que fe ha de decir, que no efcufan alguna con* dicion de Ayuno; de donde la enfermedad fi por fi np efcuía; por razón de galipaiip efcuTará: v. g. las ulce= las gálicas, que no fean de raas giave condición Teña» laclas, no porque fean gálicas, efcufarán;no tiene pues aq ue II a pr av a qualidad. aJ¿;o en 1 as c omidas, qu e pc¿ propriedad natural á ella fe 'contrarié, fino por acci» dente tan folatnente, y la^oraifliop de cena tn eftá? enfermedades, ppUamayor? patt§ es,prpnciTa. (13. eonclufip* r a ;.- . -. íjíí-\\, ^ J*l Con* 134 i fc DISSE^TACIÓN §» XX. Convalefcientes, y habitualfsl 257 gACCHIAS' LOS VALETUDI» natíos, qne facilmenten enferman, 6 , perpetuamente íe detienen en alguna dolencia del cuerpo,como fthoraachicos, hepáticos, lienófos, hy» pocondriacos, y obftruidos de vifceras, nemíofos, é hyftericas, y otros de eftaclaffe pueden hazerfe excp» t6s del Ayuno. La condufion ha de declararle; por» que los valetudinarios, que fácilmente pueden énfet» mar, no tanto por la qualidad de alimentos,quánto por la mutación de ellos, pueden contraher alguna enfer» raedad,affi también los otros, ü facas á los herniofos,7 á eftos pues fe ha de permitir Té hagan exémptos de la v qualidad de los alimentos con cautela,de ningún mo» do de las otras condiciones del Ayuno. {iy. conclufio.) 258 Rodrigue^. Los convalecientes de en* Fermedad prolija, que haya traydoá menos la natura» leza,óenque hayan precedido evacuaciones copio» fas, fe deben diípenfar las dos abftinencias, y effo aun quando no huvieffeñ neceffitado de la carne en el cuer» po de la énfermedad;porque hayáexitte la caufa parí qdiénpnede íerdañcíalacarne,y no hay neceffidad de alimento de mayor fubftancia, y acá falta la caufa enemiga, é infla la debilidad, y recuperación de la* fuerzas. En una palabra, en las enfermedades hay la razonable duda de que el alimento íe ponga de parte ^ de la caufa morbifica, y affi.quanto menos, y 'menos medicoimoral: i 3 c corruptible, mas laudable: y en la convalecencia ver» daderá,íolo puede militar de parte déla naturaleza.E Ayuno debe también difpeníarfe;porqne es dañofiffi» rao en los convaleícientes el comer mucho de.una vez. Deben comer bien, pero repartido en las horat delacoftnmbre. (nrini. 102.) ;" 259 Lp$ achaques, que llaman habituales,' tienen contra ü el precepto medico irrevocable de la obfervanciadeparsimonia, %ft:o es, poquedad en la ¡comida^ por lo común, ábftinencia de alimentos de difícil actuación, y de mucha fubftancia; con que es abfurdo el peníar, que efte mifrao precepto impueftó por la Iglefia fea diípénfablé, conípí r ahdó igualmen» f • ite, que el Medico para la curación de los achaques. (mira. 103J*: §. XXL Edad de fefenta años. 2Ó0 * fíODRlGVEZ. L A E DAD ABSO» tatamente tornada nada difpenfa; pero •1 los refpectros de ella, y affi es relaxacion el fcñalár numero determinado de años en que eftén abíueltd* los fujetos; ni los feíenta, ni los fetenta pueden' prek cribir regla fegura. Ya es doctrina dt Moraliftas dé mucha ettatura, Caftro Palaó. (traet. 30. dtfp. 3.) Y . el P. Vvigantd.(¿fc jejnn.) eftán por ella. Es pues pau» ta la debilidad, ó robuftez de los fujetos, y affi fi aque» Ha exifte,eftándiípei>íados aunque no lleguen i fefen». ta;y fi eft ajunque tengan fetenta años ao fon viejos. ^nura. 114.) \ ~:r\C> Antes i3& nissERTjcm 2 ppr f a qne) porque lollevan,ra*|pr,crtie los jóvenes. AÍIi lo enfeñó Hippocrates: tas yigiurJ^muy'faiihnenteíles - van el Ayuno, (lib: i. aphor. 13.) Y por efte; porque íegun elparecerde íosdo&os eftin inhábiles las ofi» cipa? pa ra actuaciones dealiraeritps rauy fubftancio» fos, ycantidádde qu alefquiera1; Es parecer df un gran , Medico moderno, que los viejos en lacjualidad de los ¿lirneni/Qs vuelvan a la léchedeíupueiicia^ que alar» gar án .raMC'nifliino la vid a; y creo, que debe fer yelda» , •* dera efta doctrina. {Boheaarabe nura. 10 57 ) Y final» •. ^ mente adv ierte el P.Rodriguezyque no habla de la decrepitez, pues en efta detodos modos le det>e ira» tar como la irfaneia. (nura. 115-. y n6.) ? *v 261 ¿ tienen tan folo dificultad de tolerar -el Ay nño,de tal modc^que fi lié-4f alimentan con freqnencia,facarpente padefcan, percibiendo nq» table daño;pcropo# •ottapartc tiene ips fuerzas có in* iegr1^ad,y4in e%m?go i^edtpcieraeajte. fuerte, á»f (■ 'tosíe ks diípenfa el Ayuno-, pe«otio la «arce» O MÉDICO* MORAL. 137 p2¿3 t Ocarecendédificuhadde 'ayunar; pero^por •otra partt^affirii vidaívaletudinaria; expuefta'á enfer» •raedades, é incómodos,efto^pueden abfolveife de I* •carne* y única comida,;gíjardandoíolopot abftinen* «iavolumanakretasaciónde"iahora.5ó fiaalmen» te tienen *tfio/y Ptro impedimenta^ efto::e§, fon vale» «odinarias,yd^ el Ayuno. 'Eftos ef» tan Kbrésde todo. ' oíiT^o; 264 Per© fe harje^drertíri qne ios qne eftán cnuitimaíenectud,y raasfi fon valetudinaríos, ningu» na leyídeAymio les obliga.0 Los otrot, no igualmente debcHCjcledár íueltos de rodó Aynno,Tino de los que duraren muchas días, en«fpecial la quarefma; porquá 4imdiarK)le^pi^Cféhazeídaño,cfem6 nolohazrá lol niños. .'■:■ xí . ' *r>■■*: 2^5 Padre MaéflroFeijco. (rom. 9. theat. crític. cum. 113.) En efta fubftancia, hablando de fexage» «ari os, dic*; que dtida tengan verdadera robuftez para ayunar, qaal es,nna dí^oficibn'corporea, que elayu» aono puedahaz^rléídañoconfiderabre, y ¿rrácrtie no duda de la obligación del Ay*jnohecha la hipothefi; (porque tiene dicho én el octavo tomos difetír fo \tm num. 61. que eti qual^aíá edad como haya Robuftez baftamsé para tolerar el Áyw®, ftíbfifte la obligación de ayunar;)per6deaíguntiempci á efta pariseiSa empeV zado á dndat de la exiftcncUdeUtipueftcv Vénfe, di» c¿, algunos fexagenaiio$agia«t,dcferafo^ «helólos, y qttefin mpch^faligaí íéexércitan en varios' •i..'. Mm tra» i¿8 a, DISSE$T¿€IQft trab^jpvcoipprcp»;.; ^er© ^p|i todo duda, jfi cñot raiímos tienen la dit^ficiond^ cuerpof que es me» nefter para ayunar»fin padecer notable daña. Su ra» zon de dudar confifte,en que en los viejos es cafe f tranfc£ndesHe tina efpecie de incíiíppícioni atenta la gual, el Aynno puede dañarlos; mas. ^Y q*i* aquella indiípoficion es la íequedad de las fibi as* detrimento caracterifticamente pfoprio de la frnectutd» como teftifican á cada paíjo los Phyfieos,y racieftra la ex* perieacia. .,.,... *: , , , r¡\ 3 ^m „ t>> v ■ m ~,aun prcfcindicu*^ $p é$\eftrago; que es natural ocafione en la; falud, íe- puede;oHfcuf plaqueta, Iglefia he ni gpai Madreóla qtíie»^ íe anadií lobre los «abajeas ipfepaiable* de k fenece tud efta ¡nueva iacoi^pdi4ft«U. Ríe©, que efíe cafo pa»> tece fe podría, tpp^e¿tf rog fem^ntade iiywa^^ií^ *M£fflCO*mRAl. i$$ '¿kndpía colación por las opiniones probables mas b#» .pigpas, en ordena la cantidad,y calidadde h cola* cipn, lasqoales contrahídas al cafo de la queftion, fon rHOÍplp pfcbables,fino.piobabiltóSmas. Hafta aqui ■■;•■'.-■***>.:■ ." ** •■" < el citado* i ■ "•■'■ í. XXII * Impedimento de Áymar pereltra* bajo, cuyo examen quede alCmjfeffar. l67 DARECIOME INJERIR AQUI v«* l "* efte paragraphó comael antecedente, ja qtie fe ha tratado del Ayune: aSporq no fi? eftraíñe eri efta obra, como por la parte,' que en efte punió; toqne^ál Medico juzgar do-uno,y otro, dejando i Inf- olios facultátívos> las cofas, qae penenefeanilafuy a. Zjtccbias. Toda trabajo per el qual Te figa notable conftirapcion de eípiritus, y debilidad de tuerzas, ef» caía del Ayuna, fe entieede de la parte, que toca1 á i* tínica comida, Eséentormea la amarina deHippo» crates*,.quenot*at)ajenl©s que tienen hambre: V&t famts^aborandummn #^;(o¿ Yáíe deja énteiid^*¿JSb^^. que ge neto dé hambre* "iV--\" * *"p 'l' 2^6 8l Aunque todo i*aba jo es ra entraren to, no iodo movimiento es trabajo, y aflí efte íe debe repu*- •ar portal ímpédienre de Aytrao, ijeando infiera no» tableconfompéioia deefpirituy, y debilidad de íuér» xas*. Y efto no folp fe entiende quando es el trabajo del cuerpo, fino %\rabien del ánimo, i intelectnal,cpee •Oiabk^enter áeftto*! fceizá*, y canftime efpki&ti^4 «r¿4 es i4o ÜISSERTJCIOK es igualmente, que *1 del cuerpo impedimento creí Ayune: y affi los que íe^xercítan en identificas medí» ¿aciones paraenfeñar,comolos Cathedraricos,y Pre¿ dicadores eftán e'c&f ados del Ayuno. Como también los enrrcdadosen graves negocios, y grandes cuy da- dos, por la continoa ocupación de entendimiento, tjtié es trabajo. Los Efttsdiames, quede lo «ffcrito, <6 de lo que oyen á Tus Maeftros aprenden, no asftán *(* ciliados. 26v Que fea trabajo? En fentir de Avicerraa, y otrosíes: vehemente movimiento nfpt3o a aquel *qneh executa. £Jueftro infigne Coriphéo, digo, el Dr. D. (t) Marcos Jofeph Salgado (r) diftinguíendolo en .gra* f^feioiog. dos del movimiento, y *xercicio, dice fer; aquelmovU ad U -Mentó* m el qual fe da copio fo fudor,frequeme anhela<Í9n,p Suiei. fatiga de cuerpo, Con la diferencia, que en algunoi por leve.movímiento fe figue anhelación, ó aceífidos: e que fe infiereyrque lo qne para unos es ^movimiento, ó excrcicio, para otrosíes trabajo; lo qua *inos-facilmente hazen, otros fc confomen mucho de fuerzas. Y allí fegun eftas íe debe Jhazer jtiycio para regla geneíal. Eiliucciocitado potZacchias,llcva que efcufa del Ayuno el trabajo, no folo prefen*e,y que yá spaffó, fin©eloroximo venidero, lo que es conforme á la doctrina de Celio, lomada del ptpximo citado ap^orifmo; Siquibm dt\caufis media futura eft* labor m*r i MBpIG&WQQsAU 141 $an¿H*eft^ A que réfpopde fu equjwal€**fí}&por ajgus - J^Ciqfef ,fe-h a de íegriir ttab ajo,. e,y i te fe ¿ í#e $:a'.,fty f^r/urtpdp aquél cuyo trabajo fea i^l^que/jÑi^ éU^? ebilite notablemente.el cuerpo,eftá efcufado o*el ayu» no, nodelacarne. Es doctrina del citado Zacchí as todo ej parajpapho¿m^sjí|^^^ Dr.Sal» gado. . » v * v * 271 ^-Acabado el catalogo con lodeFontécna, qnknen la íexta de fus' dudas -(fol. 68.) dice: que fi los pobres eft ando ímaiasf I«n6tifuftjetijci aljmerup pata comer una vefl o^^o^^a^^al Ayuno; pero fi por jufto impedimento no pudieron tomar aliraen» < to íiiíciem©auna comida, por ^^f^í^íe efcufen de ayunar; porque íégt^^ib^f^0^^1^ muy 8ra" • ve con tanpp^o alimento obíervar el Ayuno. El exa» caen del impedimento quede al ConfefTor. También 1 los que hazen algo por f t&liga utilidad;, como peté» grinar por la paz publica, y confiliar enemigos, predia ' car,abfiienc de AyutfPjquaqdo efte les impide ¡os ta* Jes mipifterjos. pito* ' vil'í 1 arhh »r; • ;i>: *.-i., ;- t ^Xh 272 rjüjámgií^nte^friíte rj&najle fus dudas es licencioÍQ^aconceder carnes ép: lostaccidepies, aun» ' que no tangraves* álpsMagüates,y períonns publicas; * porque csnec^iTafioconferya-t las. perípnas de qu enes íe figue á la República utilidad grande, y i»rce¿ía;ia;y por tuyo defecto en lafalucf, ó bievedad.de vida, fe figuiera notable daño* Y qué efto lo tiene permitido la Iglefia, defpues Umita tita congiufioá: Vermiji wen* «i3f¿ ¿^$smwioK ^fPolfaiifafrtoíefá ^iafafoVehémcmr ixtitá&Ad4kmfW&2Wpéfet*ti*m, netftifc fylhnjmfimagna urgtitenecejfixmif^ipiiic^mn. fpag, B? Ip^íTgume^t^ r}pC;<:an¡tra elfAyi> do íe firelen objetar%y de Jas razpTicsyquc ¿popdl contenió mmb&ú cpodcr óbíer- oíoq 'onuYA^^^c^^R^^j^a o£iq -rarríiía i/»mo? ;-n?-; ibüci on oiií3<;r t¡ * - -"Or t^ •< f 273 J^^A k^<lMO HA QUE» * s?!'; !^ Ja^í* la Differta'cion, pues todas las co= * ffashaftá aqui titfhidáS, fe han ordenadora fin de pel« fuadir;'como hallo en mi c^dcftcray^ué á los de nueftra Regibfty aunque*^ no/áfódósieipbligael Ay p> noEcclefiaftico.' ÉfteTuéá ¡a verdad, el objeto de atribución, quedictn los Philofophos, áque fe clirigi© írni trabajo, raof $d6 delis,muchasry viriam reflexío» nes, que en punto ta#ímpottanie¿lx)t largo tiempo, antes de determinarme a efcribir,tuve preíentes de grande eftimulo. Ann fincando ÍPbre mi un Cenfo de 'dicterios, y apellidos de efcrupulbfo eivdémaíta; ef» cafearido las licencias hafta aqui con buen efecto, ex- perimentado aún en quarefma. J . 274 Efto parece configuiente fe mcháinfeii» do. . . fMEEtíCÓmORAL. _ Í43 do,corao lo experimento combatiendo el vulolr error «* la relaxacion de eftos dos Preceptos de lítárfiá, V» f^va introduciendo en efta Ciudad, y íus-contor, nos. Laftima es verá mucha parte de fus habitado-- res comer carne fin caufa, ni el menor reparo de eíá cruputa en quarefma, y entre femana; porque aunque dixecn el paragraphos. nura. ->i. que los mas íe man» tienenfin ella, es cierto, qne lo hazen por la éícafez, é índigedcia,nopor la neceffidad del Precepto. Niaük para carne be tenido, fuelen decir en dias' prohibidos. V preguntadas porqué la comen, fe deícartan, ó con la licencia de muchos años de que yá hablamos, ó la de» bi'idad,que fe imaginan,ó enfermedad, que fe difeur. ren. Ydequénacetanperverioabufo,y depravada ooftumbre? Yo no creo, que del eifma de los mal. ditos Epicnréos,y AnoméosconCalvino, Lurhefo^ Erafmo hereges, quaiído experimento álos de mieftro continente tan Catholicos, yitan dóciles, fino de las feis caufas, que yá apuntamos,y de otras tres, aun de mayor fundamento al parecer, por lo qQe defiiné efta tercera paVte, y fe verán en los argumentos, que yáinfinuo. §. I. ^Prueba fe la longevidad entre America- nos, para quefeveayque no ejlltan débil la na* tur aleta en eftos clima*. *7$ T>L PRIMERO, Y PRINCIPAL '- S2j argumento conque íe apadrinan para *f» ¡44 r DISSEctogenarios-,poi» que 14S t < ^ mSSEVfTACION que efta es la edad, .que, aún fuera de la America Te reputa por anciana en eftos tiempos. 2S4 En la Sagrada Compañía de Jesvs fe raaq= tieue hoy elM.R?P,pr Juan Antonio de Ov iedo,Pro= vincial, que ha fido dos vezes, fujetp digno de toda veneración, y de eterna memoria; paíTa yá de 80. apos, en que es digno de notar, que haviendo exerci. . do les laboriofps emplos correfpo.ndientes á la alta tU pherá de fplitcratura, y fublime capacidad, como es notorio en ellos Rey nos; y aún todavía exerce, di» *xome una períona fidedigna (al eftar yo eícribiendo efto,) que aun eftá ayunando, y comiendo de viernes, cofa, que caufa admiración en una edad octogenaria, y fiendo criollo, una naturaleza tan robufta, bien que efto deba atribuí ríe acafo á la natural robuftez de iqs yiyudcs. . a. ■.. iSy Sinquefalgamosdel nuineíoo ctogena» rio. El Sr. Dr. D. Fraoeifco Xavier de Bafcpnzelos, Márquez de Monferrate,y pigniífimo Dean d^efta Ciudad:haviendo logrado la felicidad de governar en ambos CabiIdos,y paitado del perfecto eñado de Ma= triraonio al petfectiífirap de caftidad (cuya fucceffion ha vifto. también lograda en los Altares* y claufttosj pafla yá de los ochenta. . * 28$ .Se digna elle $cñpt de admitir ¿fu mefla, á otro cafi coetáneo íuyo, pobrefito, -llamado Miguel Gonzales>(bienque efte cuenta hoy 89. años de edad, y todavía le faltan algunos de los fignps, que trahe f 1 doc» ÜEmCt5WtO^JÍL. Í4* flotSííTítr».y»lfcr en fu farra 'Thi\oíophtTptet& H ca« dnqnez;(s) porque quitado efe.■ «ígana «flaqueza en lá? c*£ 4g. J»emas, oiTm*l(rafíni^^bieh5do©CTbe tn^jor,^ ¿t&tré »*«?/« errJ te roxtye^enle^^ -íO AÍ oitr.:w*2i°r¡stu¡. 2 87 -> E h X iceuti ado; .€*. Jn. yernas autos* El R. P. F.Marv timde la AiTüaw^cioTij'^íaTade *¡ér $0. .sn quíen fe ad* rairalacperfpicacfa defifvifta eneffaedad. Ello me parece íu£áetate para prnebaíde que no* efta tan dé calda, y abreviada la vida humana, cómo fin reflexa ícKnoí¡han fido los contra* rre'mpcs baftantest ^quitarnos de la vifta> ya los octo» gena;ios,ya IpslKC^a^enaricSj'aiinqtiecQutíídos, co» rao fi« nipre; l o: fha nc (too, \o:; mi frao, y con el ttófmp piden pjcftlrjá ¿eren loliiaiürai, por elxtixfa co^Kun del tip.rapq.én'elprQgteflbfdel prefente figlo, y demás ve» qiderios^ • ><;o!f s * ¿o.-l* m'-i -'.^ w <• v :Iú7.?ar - úo- ■ ?! j,288,1* Erieliuieftrionohaófaltado éntr^ías^de i^lie^ftta>Ebegí 01^ qni*j^?cfláitta»^ara figlo, y'mas, años de edadaí-Jfufc conccidiffi*tto,un $ejp; encella Ciudad, que andaba fiempre á cavallo,y le llamaban Tío Mar= cha, pafabade cien artos*. Otio también, que nom- braban el Chino cjiileroyltego á la edad de 11 j. años. m mssEr^ración Otro cuyo nombre ignoro, llamcraesle por añera d tiejo de Analco, pot fer vecino de efte barrio, quien compteftigo enciettoJnftrumento jurídico ante el Secretario D. Diego Bermudez, hizo fu juramento de 103. años, Poco ha que murió de mas de ciento de ' edad, un lacayo, que fue del Regidor D. Lucas de En» cifib, llamado Jofeph. En la efquina de S. Auguftin falleció también Juan García de 114. años, el haver tenido 22. Hijos de un Matrimonio, y coníervado fus dientes hafta la edad abanzada,lo hazen memora» ble en robuftez. De María Pacheco, que vivía en la 1 calle de las Huertas, fe cuenta por cofa efpeciaíbaver ella propria ido á ajnftarTu entierro en vida. El tefti» moiúodefuedadfe tomó de fu primera cédula de comunión^ que fiempre guardó,y tenia 112. años,aña* diendole fíete á lo menos, que tendría quando hizo la primera comunión, falen 119. Yá íe vé, que eftos cxeraplares,qTe contienen en efte,y el figuiente para* grapho, no los pongo, como quede ellos foíos quiera ] yo hazer argumento, que bien fe, quede cofas raras, ni de uno, ü otro particular, no fe paede deducir ila» cion genera!; fino como quien efeoge i algunos deTbtf raas conocidos entre los muchos exemplares, que fe encontrará quálquiera á cada paffo;affi en efta Ciudad,1 como en otros lugares de nueftra America. ~ U MEÜICOIMQRAL. íyi §■» II. Larobufle^de tos Antericaffos frueba^ que pueden ayunar. 289 rT^OCANTE A LA ROBUSTEZ JL de los del otro continente, y excetTo de efta áhs naturalezas del criollifmo,que es el fe» gundo argumento, eftá tan recibido, que no he ©y do quiepi atravicffe razón alguna en contra. Lo cierto es, que ^ el Dean de Alicante en la carta efcrita á fu Sobrino,no fe acordó de efte piínto/i lo huviera pueí» to, creo, fe dictan por vencidos los Criollos, y le ha» vieran rendido el pórrigo; porque todos eftán enten. didos del exeeiTo en la robuftez délas fuerzas de los de laotra vanla. 290 Yo nó helcído h carta,ni defenfa atgnna de las varias, que las doctas plumas del criollifrnoen dcfagrwio han hecho. Se, que el fingular talento del Dr. D. Juan Gregorio de Campos, Fifcnl del Real Proto.Medicatode efte Reyno, hizo el año paffado un /«/«o en profa latina, muy rico de toda erudición en defenfa de los Criollos; pero no íe íi en efte, ú en aquellas, ú en la carta, íe toque algo del punto de fuerzas. 291 Como quíerü que fe a; yo no pretendo probar cxceffo alguno de los Criollos, fobre los del otro continente, ni de eftos fobre los del nueftro; poi» \ que quálquiera de ellos pudiefa coíccídir algo en la errónea detcftablc opinión de 1 ^ **£?a¡áaí5íc?¿5 Poí^ ip v. DtSSFxRTJClOK que entonces parecería cPnfgui€íPte,qtie vinieran de diftinto origen los de acá, que los de aya, contento* me con la igualdad en orden á fuerzas, haziendo el paralelo, entre los delotro continente coitíOs de efte. O a lo menos probaré, que fi allá fe debe' obfervar el £yuno Ecclefiaftico; porque tienen muy buenas fuer» zas, acá del mifmo modo; porque las logran muy con* Detentes, puede también guardar fe. - ... »« 292 A tres,.u quatro clafies fe reducen losfig* nos principales carácter i fticos de robuftez, y fuerza* enlo$ individuos, que íon la longevidad, ü de la -«¿ida (de que y a íe ha hablado) el brío, agilidad, y prompti» tud en los movimientos de las facultades animales, ví= tales, y naturales, el vigor para tefiftir los remedies. mayores en las enfermedades, y la conftáncia :de la virtud piolífica fin menofcajbo délas fuerzas. ><•• 293 Por lo que toca a eftas, aquellos i^ún mas rebutios, y fuertes, qne cop raas brío, agilidaüd, y prornptitud.exercitando.ias acciónes,y moví mientos, affi naturales,como vitalesry animajes,fueten jubta» mente dotados de un anima fuerte, é ingenio aleare.' Que á eftos no tan fácilmente les dañan las cofas ex* ternas, ni los alimentos fean los que fueren, ni las en* ^ fetmedades. Y affi. la robuftez del cuerpo humano, ( Cap n.rtbcomp dice HotTman. (t) Parte viene de la duieza>y 2. de dhu ^apnjtü^ de los raufculos, y parte del capiofoáoíkxc* íw^/^w.delbueiiliqutdofangumeOíy nérveo a las paires. Lo> ^ que fe conoce por la a^plmid, y capacidad dé los va» ^ - fos. MEDICO-MORAL: ¡53 fos,erafiGcie de los nervios,y íolidezdefos muículos» 294 En la realidad vean* fi todas ellas ferias de la genui na dcícripcion de robuftez,qne trahe HotTman, Te hallan hoy en los criollos. Yo creo, qoeicadapa» ítffe encontrarán cPn ellas en ranchos de los nueftros, fin fer neceiTario para ello mas prueba, que infirmarTe con uno, ü otro exemplo, que lodemoeftre. 19$ No huvo fuerzas mas ponderadas en la antigüedad, que las del famoío Atleta Milón Croto» níato. (trahe el P. Mró. Feijoó) De efte lo mas qne fe trata es, que en los juegos Olímpicos llevó fobre fus hombros un Toro á diftánciade un eftadio. Yole alabo Ja maña (fi acafo es verdad;) porque Tas fuer» zas, quálquierade nueftros cargadores lleva al tanto, ó mucho mas pefo. Es corriente, que uno de eftos car» gue 15 arrobas,algunos (fegun rae dice períona de ver- dad experimentada) cargan 20. Los que manejan los frutos de femi!las,y azucares tíenehla experiencia. 296 De Pedro Salgado natural del Pueblo de Huaquecholam fe quenta,que el folo carga en un quar» to de hora diez cargas de fecñilla fobre las muías. El cafo es, que para efte rainifterio fe neeelTita á ló rae» nog de dos períonas, «no, que furiente el primer ter- cióla hechado íobre los lomos déla beftia, mientras, que el otro eleva,y pone elíégiindo, para que atados mutuamente' los dos tercios entre sí, fe liguen dfcfpues con la reata alaparejo. Acciones,qne para rrian«jar= las neceífitan tiempo,maña, y fuerzas,como fee#pe» iH ffilSS&RTJCION • ftitaéiitfiTi^Srpie,que las exercen,que es á coila áe^co. % jbífofudór, mucha fatigayy algún tiempo., Y el tefe» , ridóSálgadojhazcrlo enunquarto de hora él íolo, es ♦ prueba de-twgrande agilidad, y v igor. Siendo aífi,que ,:fuedadya paffa de les cincuenta años; bien que lo • executa rata vez, y folo por apuefta. 2P7 '* De lo dicho fe infiere, que fi entre los ^Criollos hay vigor, y robuftez, hafta aquel ultimo grado de foitalcza,'qnedemueftran las ya infinuadas acciones, mas bien las havrá para elAyuno. Pueses cierto, que para efte no fon rneneftei tantas; de otro modo á las mugeresles deíobligara; pues por tazón de lo débil de fu fexo, no gozan de tanta fortaleza,y ve= xnos, que tienen fuerzas competentes para ayunar. Advierto, que hablo pot razón de fuerzas, q ya fe vé, que á les de exeicicio recio en el predicada Labor efe :,tánefeufados del Ayuno, y es punto, que toca & los Señóles Theologos juzgar. Veaíe enla fegunda p.aig teel§. 22. 20& Ni hay menes vigpi en los Criollos para 'fefiftirlosreraedios rpayóies per, las enfeiPiedades. Piré de efto dos exernplos, y baile. Una gallarda Joverrdigna de me mor arfe, affi por la efelarecida da innoble eftirpe,coraapoi lo rato del accidente, que ya ipfinuo. Ep los años panados á caufa de un pezat ^oiiraiicrriedeuna hermana íuya, de [Velo, y maleo» raer, l©afíalt aran unas.ligeias,externas inflamaciones, ijue^Ppagaodgfei lo iiuetao en las vifceras de pe» " • MEDIC0*M01(AL. i5y cho, ó*pülraón,y,tir»aes, ir htzieron grimdes hafta Tup^ftrfe. Y haviendo arrojado épuf de la una poi vomito, y de la otra por orina; con todo fe le q ¿ablando ét ría America, foj dice: parus^fivk Regiones 2 {\i?*ñ$*)f%uttdum qnatuoKmmMplagasímtftqnemes.. f .'j^J Y defpues las numera; pero el Reyno de Medico en ^ /'f< que eftamos, aún.fituandofe dentro del T^picode '* Cancro en la Zona Tórrida, nos brinda por 1 a Tnfinita raifericordia de Dios, ungían leraperaraento. 3M h-Porqiíeyaf^jé,,que fofo la pofitura del Sol, no baftaparacpnftimií, y calificar la tompefstu» ta de una Regioo., Pne« vemos,^que independiante de la pofitura del Sol, hay otras mil cofas, c^ie contera* piar aun e.n un foloPaíz. ,£l ay.re, la ferrarlos fru» tos, las aguas, los vientos, lesrainerales, el frió, el ca» Jor, h bunvedad, la oquedad, y otras qutlicfad*s»4a elevación^ deprcffion de la tierra, la Aimofphcra^ej circunda. No hablo deVinñuxo de los Allí os; porque po eílá^aveagnado fr alteren. ísnfitHemeata. -Pues ahora veaieconraackR-aKftexicvn la temperatura de nacftio continente para la robuftez defueizas,quc nr * **62 .: mSSERTJClON ceffita el Ayuho¡ Veafe también? en efte puntó oirá vez al P- Henrique Scherer en fu Geographia natural. (*} (x) Solo dko por ultimo, que fi en Roma con la tem» In i. pan , ° l. 11 ^» • i i ■■'■•■*» dov. Ailát.pcne,quegoza aquella Capital, y que leraos ttrBa* c 6s ptop.güvio,y que no eftá dentro de la Zona Tórrida, corno *• s*u la Lybia;no obftante,es donde raas rígidamente íe obferva el Ayuno. Acá en nueftia Región, que teñe» mos tan lindo teraperaraento,y que eftá como la mif= raa Lybia;porquénoíehade obfervar ? CóroneBos elConde de la Granja el aiguraento, quien hablando enei poe.de lo templado del Perú (que eftá también dentro de na át Sta. U Tórrida, como nueftro Reyno) canté affi. (y) Roí» cant. , ^F b En la Tórrida Zona fituada, t'|J Por fu coftelacion la Aflronomla Como Región efteril deípoblada, Juzgó, que entre los Trópicos ardía: Peto el Sur baña con marea templada Al Sol los rayfts, que la Sierra enfria," Y fe forma un Hyvierno, y un Éftio De frió, y calor, fin fer calor, ni frío. §*Oét. 17, jiop. §.III. Los alimentas de la America Jonfuficien» tes para poder ayunar. 312 T7 L TERCER ARGVMENTÓ, QVfi Y\é íe deduce de los alimentos del otro Revnó de fer mas fuertes, como vino, azeyté, carnes, médico-moral: U6\ 1 &c.y todéHosque firvena n^nferierrobuítos á aque» rllós individuos, comparados cotí los que producen las * tierras denueftro Eraí fpherioj que los juzgan deleína^ bles, y de poca/ubftanda.Digó lagrime rb, qirell efto SIrn*kacomofe píente^ dífícihm^ obferv^an ? en éfte Reyno varios f agrá dos ínftitütos; en los quales íe prófeffaabflihencia de carne todo' el año, y quafi 1 perpetuo Ayuno.' Las Religiofas Capuchinas á íu pe. nitente vida añaden él rígor'deiá'cfcmidá quaréfcnal; 8 y hay en fus Comunidades ranchasancianas.'Las Car» melitas.obfetvandoel raiímoí tenor, viven (anas, y 'los VaronesdefOrdeñ mifmo raueftran mucha robuí» tez fin otros aliraerítos, que los quarefmales. "'" l$i$ r-'Lo fegnhdo, que elvinó nodes abíbluta. mente neceffario para el Ay uno, rii nada; porque fi 1q fuera no huviera aconfejadó S. Pablo á los Romanos, que no lo tomen: {2}Sonum eft non manducare ca?nem>0* ( * non hibere vinum. Ni todosiqs del otro continente'lo adRom. *% toman, y aunque lo'tomaran; panados ya á efte les ha»'14, *•lu ze notable daño, com/cT fe experimenta en elle Rey» no; pues vemos,qjue lahydropefia, ó fiebre,que inful» ta á los vinoíos por la mayor parte feloslleva. Comí por el contrario el pulque, innumerables fon los de la otra banda, que acá lo ufan con experimentado benc» (icio, y quiza allá en fus territorios les fiarla daño. 314 Lo tercero, que u\ al azeyte tampoco lo hallonceeífttio; porque confeitando los admirable! efedosa qne ptoauce,' el np fe" diferencia de las énjnnv diasu 104 días (fe fal 3e e W^^^^SfKhymiea) qt^erj fer Ja J^VÓJariU yelde aquel acido fixo-pefo **n/la'fu1btkn^ efiéncial conftir: tutivó,es análogo, con l^n|j^4ia*^ Conqueoo^nps ^fiaze falta para jéJf^^m^tjtc^| las viandas^ Tp» pliendopos él lamantee^vcomo.,fj*>se$petimeptamos en tanto numero de indiyidües, y en la mayor paite de la plebe, que fía vínp|rn* azsyte lo palTan^bjen con 3amanteca, y Ton1ia*tó robnftas,,-tk^¿ tV - v -1n^i ' 315 LQrqp.aria, qne aela-cars? í-unqne me di» ceti fer láde la otra banda t^nfubit?.nciof:¡,ycorapac« ;puescon.tina;pórcioxi¿bíe$ certa tienen urficiecte, no h á#e com ra)r$f, hi k ar á a k& que 11ev aren ,1 ap tefe» rj^ciadelospe^{caó^fq$rV la ^arnr...-Sea en, buena llora le crias folidez, y de mejor nutritur a.aquélla, fo» iteláiuifftra^no fe ventila elexceilb de las carnes, ni deeftas con las comidas, d«? vigili a. Para mi inrens ■tó;*con folp, que los alimentos, de efte Eeyno en $i Líeaá fundentes a'mameVer áíus habítadates en pofi» tura de fuerzas competentes para poder ayunar* tengo bañante. Efto es tan claro consola Iuz,uue iio-xieceí»- fita de prueba. ^ K:i_.i ^Iír ..j K ^0.7: ¿:/i 1 r" ; '316 Ya fe vio arriba ,que con eftos raiíraoj ali» «¿lentas de que ufamos, llegan los individuos á cantee ya los So. ya, Ips 90.y hafta ..cie^aíos. Se. vip ^anj» bien co%o con./ellps fe .adquieren ¿ocios ios/grados ¿•ffiblei'a la mejor róbeftez^como lo derati.eftun ¿aj acciones de los arjib a m £°£Í£nadas;Ipego ion íufc cien» MEDICO--MORAL. i6y cietoesparael Ayuno. Pues para efte no fe requiere aquella robuftez en ultimo grado, fino folo corape» lentes fuerzas. 317 Ni íe gafta tanta copia de efpmrus, quizá como en las Ciras a cric oes. Efto fe ve en las raupe» íes, aunen las debilitas,q«e syunan con facilidad; pe» Bono pincelen hazer oíros exercicios de mucho trabajo como hazen otras; luego él alimento, que es fiíficieu» te á producir, yconfeivar fuerzas en Ti Uño o grado de robuftez, ha de fer íuficientiífimp para coníeryar las que fe requieren parajel Ayuno,que ap jfpn .tamas; luego los alimentos de u.ueftrb territorio fon muy fu.fi- cíenles para el Ayuno, fiendolo para las otras accio- i'*aii xr>i nes de robtsftez. ih-)b:tí xoy rl §; IV. La mala recepción ¿quefe fíele fcgiiür a los alimentas Je vigilia5 no fiempre dejóbjigú • *•'■ r^t'^ '<' del Ayuno... , ■ ^.h^vx^z■-i 01 3f§ T?L 'QVARTO ARGVMENTO; Y Xj# aún quiza cimas principal de toda es, qué haze daño la comida derigilía y eíte eftáencre los cj fe capitulan fuer a dé! vulgo; V^fidad es,q fiiheflk vri* dadeto/y' hb- tuvieííe por padrinos' nueftro apetuo^y - amor pioptio,ó algún miéda i laabftinecia,er& faficien= te para derrocar los futidaméto^haftaí aqui dadosiY í-n lo que lo fundare?, lapeifá^fiootoraada dle.ta^expe» rienda iudivieltial deque á?éfíé;ó al o tro; faje* ov id* recepción cte las cobídas derigilía fe les figuen por *;.? "~"~~ "~~J* Tt '^ lo i66 DÍSSERTJCIOH lo común, ya la laxitud del cuerpo, inquietud, borboí ligraos, repleción, tardanza en la ceccio^y lo mas lio» taco de rodo, al^un mas sventamiento, ó ñato. Ello* ionios mas Va mentados daños de que íe quedan, Y leían por ventura bailantes aunque fuelle diut urna la. de.fte mplan za ? *Me parece» que no*. M s 31:9■ Y que íeri fi á todo elio pór algoo acá fo fe juntan en lo^prinri píos, del Ayuno, y¿a los vahídos, dolor de cabeza-, ftinvbido-de- oydos, alguna fordera, deívaneeimientosb crudeza de eftomago, acedías, fi ©tros accidentes de efta ralea. Entonces fi?, que faltan* d o oprobi os e rii a, fe r i e de 1 as. c a! ura n i a s> no fray a n e p i= teto de defprecio;, que fea proporcionado, á baldonar las comidas.de viernes* Y lo peor es, que muy paga* dos deque hizíeron.ia experiencíaj mal que les; peza, yaenlode adelanteíe dánpor efeufados de la abRi» nencia, echándole la culpa del experimentado daño á ladcígradack comida^ de vigilia Y acafo, efto ferá trioíiv o íufidenrepara mudaríe a la>carne ?: Tampo» come parece* Nolo tengan, á arrojo, hafl&ver la ta»; gon enque me fundo. Daré primero las refpuéftas, idelargumentOtqüartp>y defpues íatisfare i efte* pa» ta apartar.el terror, que acafo ocafipqara tal aíTetto* 32.0. Los raprivos porque no- puede dejar de feazer;aquelefe<5ro l&comida de Ayuno, los, reduce á iresel F. Bodtig^(cu#oes el argumento.) Elpri» fjie.ro cs;pprqoefcañadeiraas déla ordinario por 1q>^ i^age.titofo.de:!^ el 1 .V **e MEDICO'-MOXAL. \C>] bre del que ayunan de aqui íaíen indifpenfablemente los flatos», y raas en eftomago shechos á laúcame, aun» que efto dura tres, ó quatro dias, y fe remedia con cercenarle un poco á la hambre aparente fu de mafia. 3 21 El f egu ndo rao tí v o es- ra as p erp rdi calque cslarauchaetherogencidad.-dr manjares. Ya k yé¿ que efte es patente lo que daña.Eftá dicho arriba, qne omnis jaturatio málay camis^el.pañis: pefima. En que meiTa de los de poííibilidadjnofeencuentran atrop,?* d as 1 as vi andas f Y mas - e a di as. de Ayunos per o t ara » bien fe encuentfiarfcatropadlos los*daños,.q ckmsnaii,y atropados losAutores, qtie lo dicen: Celfo (a) "U'oiaá- (») cibmiVmtumeftyniimqmmMta efit^im^fafietasMúppo^^ lmC*l *> cía tes i (fe) Mequealmd quidquambonum eft,¿^od natura tnodum ■ tx-ctdit. Jil proverbior Mofacus* cibus,modhH^\^%t \^¿ Medicas. Platón, Pithagoíás> Séneca eftái> por efte* partido. ; - •, ; . •.. ^ >:; ■ ,e "322 Sanciono feñala?tresnotablesAñc^deiafa». /?* *, ciedad;,(c} ^riamalaeyeniuntob ciborum >ar ie tótem, jmcfo ac'prjt; miumrComeditur,.miüti&£oncfiqpitHr^& rmnu&perfptrat Y'pto-r «•■ en atraparte: (&)ty$gkb&m-ggatitur-ab o&alibtis d*- bovumftmelmdie iní^o^n^i^am:¿idf(^m^p-'ibu^-V'kibi0 fean. gtodu&pSídf, Los» ajira^tps^qpe nos,; i68' DISSEfiTACIÓN nutren; esconforme ártazon^qtre'ioVjugo?, y fetmen» tOss que deben Éhcrigtn a tina cfpecie de matvjsrcSj tengan raas proporción con lo.s-manjares déla raiíraa eípecie,que con los de otra diftmta, como íe-expeti« ir, enta en los que padecen ¡ka} ú o ti aba mbr e hfcft a r» da, que quanto mas ■■■•'comen barro, tierra, carbón, fal, &c. mas lo apetecen, y los dados á la embriaguez de la rnifma fuerte) poique fe van augmentando los frr» treñtos peculiares á¡aq ue lias inmundicia s,lss que pref* «a'n tn a teri a para la^éxifiéricía de ellos.- 324 rr .Conqtie delira fino modo debe haver alguna irrproporció-u con ti fermento, que d?he fu effencía a lUacaitieparadifblver'los peícados,-hyerbas,&c,hafta ^fire poco áfbco > y por algunos dias vayan mudando de t extuta las par fíenlas del famentajitelComo fe ve ñ cada di a. en los niños, qne deípethan. Y en los que eí» tan hechos aun aliraenfo,-quepaffan á ufar otTeyqtt* Tés primeros tre^>óqoatrofias eftrañan, ya defpiief les Wfienta. Pues lo mi frió fucedé^én-nueftio cafeteóme • quálquiera puede hazer la experiencia, y verá que los tres motivos, caufa cV aquellos formidables efectos de aventaráiento, laxitud, &fVix> p\fla fse%herá,ajaiva detres, ó cpiatroclias.) ^ -iA>t' "^ l*x 327 Ya con efto fe percibe la refpuefta al ar* gu-meiito dé- los v ahidós jdolor de cabeza, (nrafeido de .,:, oyóos? defvántóra^ tecidosicñelpriociptodeiAyuno.-Es cierto;qué to» do^ellos fehaínde^ ^°Í fy1?1?10" ^": -—'-fi- ~ " — *" ~ ma» met>ico,moral: ,69 maticoi (que de effos habló dífiributivS/TÍeore, no efe todos juntos, ni tampoco de los eíTenciales) Es cictto también, que todos los Autores acufan por cania de ellos al mfarao, efto es, repleción, ó fabürra de orí» mera Región, ó ácidos de ella. Veaíe á S.muleío. baghvio en fu aparato de mefenterio, 6 cacochylia, y otros. •* * $26 Ftiderico HotTman con expreíTas pala» braslo dice en íu Pathologia: (f) Qumdocum^ue ertigc.,fi c^itk dolor .fi tinnUus, autdtff¡cultMaudi* tus, aut mekncbolla ex ñute',affefto'ventrículo auditate acida ibi hxrmte, ¿s ■••#75ic.Y .,á 330 Que no toda mdifpoficfón, óitíeomótK» dad de la falüd cfcuíe del Ayuno, lo dice Pablo Zát* chías: (h) Vix poten dici jejunare¡quirtx je junio núlíunt pene per itcor por is incommodum.Y feria fuerte cofa ex» . W cluir al Ayuno; porque haze el efe&o para que lo de» MedicL terminaron Dios,y fu Iglefia. Tampoco aunque feaLcg, algo íenfible el daño debe abfolutaraente excufaríe Como una epheméra (como dice Rodríguez de auto= ridad de Zacehias) dolor de cabeza, gravazón de efto= mago, ruptos impertinentes; porque deberá ptimero examinarfefi caufa abfolutaraente el daño todo el Ayuno. A algunos folo les incomodará algún alimeh» topartietilar de los que comieron, el qual quitado, quedará inocente el Precepto. A otros porque Tetan débiles de fermentos en el eftomago, les dañará ía mucha cantidad de una comida, con cuya parcimcnia quedarán indemnes. Y fi pot fu exercieio necéíTrraf= fende ma3 alimento, con quitar la tina parte podrán muy bien llevarlo. Son propoficionés del citadoZac» chias, rauy conformes á buena Medicinará la equidad déla ley, y de los individuos.* J n *~ ['**>>> 331 Eftos fon los mas principales decantados aTguracntos,queen contra del Ayuno fe fuelen obje» tar. Í72 _ mSSERTJClOK tar. Otros ranchos fe quedan para qíie por; las dcVc« trinas dadas fe fatisfagan. La claufula íexta de la Bu» la/qué dice: El que efta enfermo puede comer carne en dias ¡prohibidas de cm/ejo de ambos Mtditos, Efpiritual,y corpa* tal. Y lo favorable, que trahéo fus interpretes, de fer raenefter,menos neceffidad, lo uno;y lo otro el que en cafo de duda de fi la enfermedad es batíante, ó no,fe dé el arbitrio; ya íe ve, que habla quando la duda es, ,nq poj ignoranciacra^-ni por defecto de haver inda* gado lo necefiaiio para quitarla, coma diximos cerca de la opinión, (part. i. §. y. num. 48. y 49. )Quefi con tedas efta* precauciones fe ofreciere duda^aun* jjue el,?. Rodríguez 00quiere, que ta haya) entra fa» voreciendo el privilegio de la Bula. 332 Per© ocurren cafos tan eftrechos, ó cora» .pueftos de tales cíieunftancias en la praética, que es Tiidifpen feble la duda, pontecha como experimentado }o afiegur^pues defpues de haver dicho en íududa no» ,na,que el Medico, que fin legitima cania a los debí» Jes, y flacos.exime deiAyuqo,© que coman carne,pe» .ca gravemente: Scelefltadmodum agit. Pero no comete tal pecado concediéndola, fi tenga caufa, que le pa» lefea jufta, ó á lo menos duda fi lo fea: Dummodoim* .probitMyt? Qpntemptus abjit. [ lum. 2. pag. So.) c3 33 Tengo concluido todo quanto me hize cargó en efta Difíertacioa. Solo rae falta proteftar como proteft©, que quanto digo en ella, y efpeciaU mente en fu tercera parte, no quiero tenga otra fuer» MEDICO-MO^AL. vji za, ócaraéter/qcieel de humilde reptefentacion,he» cria á todos los Sabios. No fp me confidere, como pn atrevido Ciudadano de la República de las letras, que fin ellas quiete fot mar fyftema,' fino como un indivi» dco zelofo, que movido del mas eftrecho cargo en el ^cumplimiento de fu obligación, en puntos impteíciñ» • dibles .de ella, que ante los .legítimos Minift ros déla > ■ enfeüa^za^ ptíblioa comparece « proponer lp que le haZe fuerza, con animo de rendirfe en todo, y por tó= do a fu autoridad,y juycio. H'crPen varias convetías • clones en que he tocado el punto de que los Criollos _ ípueden ayunar, y raas quando parece éftriVa en gla,rib. i.Vifl ve fundamento como diceel P. Lacroyx (i) hcvif=4<6. ^o, qHea no pocos les parecía bien; ó por hazérles fuerza mis razones,'yexperiencia?; aun en aquellos rraiímos, que no ayunaban, ó por tener á aquéllas pré» villas de ante mano* ^Quando acaío -eíperaba yo de ;hombresliteraHos,qcíe me-abfolvietan del efcxopuló; ámeseme lo aumentaban con Id que crecía en mi na» turalmente, hafta hazétrae poner "en pubiiCo eftos bor» -iones, connopoco fonrroíeo de mi cortedad en todos -modos demafiada. v , ,t ^ 334 El deíto, prudente/y diferéto Medico iV» be portatfe affi en ello, como en todas hs cofas halla aqui infinuadas con la cordura, 'madurez, y juy ciofa refolucion, hija de íu éxerekio, y Tobrada literatura. A quien pido como ¿todos los qoe ley eren elle efen* 10, aquí el perdón, quecüUTo;pobte;y muy neceffita» - " " -" "..... X* ¿° Í74 tlSSERTJClOK dodedifcrecio^ylétrasjfoy acreedor de por amor de Dios. A quien fea la mayor honra, gloria, y ala» banza por infinitos figlos. O. S. C. S. M. E. C A. R. APEN '■'■»7f APÉNDICE A LA DISSERTA- cion Medico-Moral del Ayuno. . 1 A .UNQÜEBNEL FIN DE LA jL-jQ, prefente DilTertacion íe tocó el punto A. JS» del privilegio,que fe concede por la Bu» la de la Cruzada* y en el principio del Catalogo la conceífion de carnes, qué pueden permitir nueftros difcretiiTimosProfeíTores; fin embargo de la? razo = nes dadas, parecióme neceiTario aclarar mas eftos dos puntos en efte apéndice, para deívanecer dos vulgari» dades, que fon comunes en el primero, y dar algunas mas pruebas en el fegundo, que acaío no lo he hecho. 'Las vulgaridades comunes, quehe dicho, la una es, queraúnen aquellosTigeros accidentes, que no raeré» cen nombre de enfermedad, muchos quieren comer carne por el privilegio de la Bula. La otra es, que ' pienfan, que en quálquiera duda aunque fea ligera, les • favorece el privilegio dé laBtila.: Alo primero digo, qüefi aún en las enfermedades de algnha gravedad ef* tantán rígidos,y efeafoseftos Áofores en concederla, f como la permitirán eri lo cj no es enfermedad, A lo fe- gundo digo, c] fi en-qualquiera duda tuviera1 lugar la ; APÉNDICE 2 ."Éntrelas enfermedades, en raí jñycio, unas hay tan leves, que tao merecen nombre de tales, aun» que el vulgo las juzga por enfermedades, pareciendo» le, que le hazen agravio en fubftraer las-¿arnés e© días prohibidos, como fcnalun vahído, JasTuentes.wi ttope» ¿zcn,que Hzo«arrojat>un poco de fangre. «De efto hay » mucho-en el vulgo, qoalquiera, que con *tefícxaüo mire, ver á, que digo verdad. De eftasoo había la Bu» la> fegun los Autores Je mí-Gatalago, y^aífi no- entia la duda, ni menos neceíTitande Ta^cahie. Ottas-' hay nn graveSf que ellas proprias quitan! a duda, eoraoíla fiebre ardiente, o maligna, la ptíüfis, ú otras, que co» tn o dic e el P.. Rodrigu cz, no nee effi t a n de Bula para Tn di/pe nía. Otras hay mediocres, digássioslo aífi, que fon de más gravedad, qne las primeras, y de menos gravedad, qneTas íegundas^ Én éiras-tereeras, que Tea -■en las que fe^pudiera ofrecer la duda, en'muehas, ó en las mas no conceden los Autores del C atalogo hs car* nes. Pero efto me parece, (y es el íegundo ponto)fíe debe entender, traundacllos deüas^nferniedacres^n xoraun, dexandonoselderecho á falvo á noíatros los Jf rafe.ffar.es^par&que-en lo individua 1 de ;cada- eñfe t ■ .rao, alfi en laSjepferri|Qdades inpl^yicías, como cu las -que no íejncluy en en el CaulpgQíP poa fode duda bi en fundada.cancedaraos Us carnes porel privilegio.dela Bulábalos pacientes,queTegun el juycio,qnecadau»a Jhiziete las neceiTiten. / qu 3. .» -~ 3 pftoTepuieba|-cla^araent^ á rpii yér- porque t haviea» *... —. *j A LA £>ISSE<%TACIÓN ifiT Jbviecdo todos nes Autores tratado de los que de» fcen ó no ayunar, ó comer carne en los terminosj que «fta.matería pudo íujetarfe '.pifa pluma, como lo hazen en lo general, ó indiyi^pal de las enfermedad des, que confia en el Catalogo de cada uno,aíTettív a» mente, y fin ambigüedad, iegun la mayor, ó menor giave4ad.de cada una, conceden la carne, ó la niegan finqueíelespfrefca duda,-pero contranidas eftas en» - fe i m ed zd$$ á los i ndividuos, entonces d uda n ,y en to n» ees pnidentiiTima, y fabiamente aconíejan á los Mé- dicos, como que fon los que han4e mane jai los indivi» . dúos enfermos, que en cafo de duda bienfundada cori* cedan las carnes con el privilegio de la Bula. De to* dos tres coalla, veafe á Fontecha en fu duda o. [pag. Sojque. haviendo sfíeverado, que el Medico, que fm Legi tim a caufa á los débiles, y flacos concede lícen= ciasde 00 obíervar el Ayuno,pque coman carne, pe» ca gravemente; pe*o no comete pecado concediendo la licencia.fi teígarcauía, que le parefca jufta, ó á Jó . ir; enos Ánd a íi lo fe a: Dpmmodc improbitas, (s'cónttmp^ .tusabftt. .Puesquepued^fer ello,fino moftrarfe du» doTo quando habla de individuos haviendofe antes manifeftado taua4fertivq,quandp trata de jenfernít» dades. ,4 Pero no hará fuerza, que efte por fer el mas-te * nigno ce los tres proceda affi. ¿Peí P. Rodríguez, que es tan rígido en ia.ra.atena admirará mas; fin emtargb, * *dpía:miinumaneraíejppita. y^fevió.epfu Catalp' ~ Y y • "go go lo pocóió nada, que concede la carne; pues oy« „ gahfe dos pa fajes fuyos. Advierto (dice en el Pro» » logo del ícgundo tomode laPa!eftra,qu? niaqui, \y ni en la DiíTertacion (habla de la que eícríbió eñ el ^ ,, primer torno dedichaPaleftta) pronuncio propo= i,, ficion total, y rigoroíamente abloluta. Es cierto, ,, que puede daríe complexión, ó temperamento tan a, eftraño, que en la raas defpreciable enfermedad, y ',y aun én eftadofano,le fean los alimetos de carne,cafi », necefíarios, y qué (lenta mas daño por un dta,y pox i, una onza, que otros por mtfes, y por libras. Verdad 3, es, que ellos ferán tan raros an la realidad, que fe •„ deberán íeñalac entre los los prodigios de la natu» „ raleza, Pues que raas claro puedeeftir. 5 „ En otra parte de efte raifmo Prologo dice: 7> que la Iglefia no concede la difpenfa a efta, ola otra „- enfermedad, hí/íc en abSraclo, fino á la neceífidad „ de la difpenfa por eí daño poco, ó raucho en con» #, creto, en eñe, y eri efte cafo eri que, ó la d ebilidad, 3, ó daño nianifiefto in fació ocafionado por los ali» „ raentos de vigilia, ó las quididades de la carne fon "„ necefíarias. Entonces tiene, lugar honsfto la dií» ,, pefitá*; y entonces, y no en otro cafóles probable \, prañice la opinión de ufar d:L privilegio; porque la '9, probabilidad pra¿lica,¿f/, los *jue como tan v étfia». dos en el conocimiento de los territorios, clinaa§, aH» raentos, y demáTscíícuftaDcias eontrahtdas fobr«r$odo al manejo peculiar de cada individuo, a un en contra (al parecer)' de los Autores de rar Catalogo^ jsftitlima» íTiente conceden, las carnes en los cafos, que hallan dignos de p^mititlas* lo queharianfin duda eftos tres .*to W. A?Em>IÜR . Autores; porqué aunqueéd io general de la* enferme- dades fe-muefttaritan ligtdos;defpues quando deí= penden á lo particular, é individual, eftán raas be» dignos; peí o el vulgo todo lo confunde, todo lo cor» ■.-tempe, de qne viene la relajación* * 8 Acabaré con unexemplo practico para que rae entiendan.; Un. 4o$a Medico vifitá a Pedro,qpe "-padece una diarrhea, pongo por cafo; tíenele ordenado '■' el difcreto, y prudente Medico, que coma carne aun ,en días de vigilia* Diternos, que haze mal; poique Baglivío en íeraejante aieeíp veda la carne, y tara= --feieppprqi^ los Autores de raí Catalogo np la conec= «den pendías prohibidos 4 ks pacientes de éffe acciden» €te. Fuera ridiculez,y temeridad afleverarlo; porque ^affiBftglivipf4omp eftos Autores hablan por lo co= 4^pnapor lo general; no por Jo particular de cada iq= 1 tdividnp^ Pnes aun hay raas, á vueltas .del perito-Mes Jico de nueftro tafojllega un introfo, una vieja, ó eu« rapiero, ú otro, é kifor puado de Japrdinata de comi< da de carne, q dejó el di forero Medico, acomodaba, y ídifpuefta para aquel Qáío, y aquel individuóla Dios, ya el curandero tiene regla general para ordenar la parné á todos los di arrheaticos, que couvepga, q no, ■^. y To peor esíque fe apadciDaConeldidaraen-de t i aquel fatuo Medico. Tengo infirmado v " con efto, loque es recio ufo de ot» r^enar la carne, y lo que ^ ■ es abuíb. EAUS DE O. *v I <3 ""*> * W 0 m w5./l 'íí 'Vh* E: