METÚBO CURATIVO del Colera ¡Morbo, por el Ur. JP. Juan quien asegnrd haber producido buenos en jTampicú de Tamaulipas, do de pr i mero W , _ , , . , -■*-*OB síntomas que acompañan al Colera son un maréo ó trastorno gé reral, un dolor en la boca deí etiiorííügó, vasca, vomitas y ebacuaciones abunda li- tas, cíafai y blanquecinas, calambres én las estreraidadessumuriienle dolorosos, y éd aegiíiclu un frío intenso eri el cuerpo acompañado de un copioso surñ r trío. Uno ó mus de éstos síntoma» en un grado mas o menos fue» te, annucia la Invado» de ésta enfermedad Es menester en este caso no perder tiempo, Se man- dará acostar aí enfermo, y en seguida se le dará una taza del cosí miento d> luan- %ni Jla con tres cucharadas de aceite,de palma criste (a.) Se le abrigará bien c»>a tres Á más frazada?; cubriéndole todo el cuerpo y envolviéndole la cabeza con un p muelo: .d misino tiempo se le pondrán unos sinapismos raliénirs, hechos coa buWuá mostaza y un poco de polvo de cantáridas. A la media hura ie íe dará li- na tizado ítíanzahilla caliente, con cinco oséis gotas de láudano liquidó, y < trá med’á taza sin' láudano pasada media hora. Es menester no desabrigar ai euf t~ mo para nada, yal quitarle los sj) apis míos, que será á la hora y ruedo ó d< >s porqsy se procúrala no levantar mucho las cobijas, yno hacer viento a]¿jino. Se hará un cocimiento sencido de flores cordiales, para que tintín do cuando , eri cuándo una taza hasta pasadas las seis horas, tiempo en que ya cesa regular- mente la enfermedad: lo que se conoce también por h ber.-e díscipado las an- sias y fitigíss; } ( , -s _ t .* , Durante este t:empp se observa regularmente una fuerte fatiga ó congoja éu el pecho ó boca del esto miago:' en este caso se fe da áu unas tazas de agua el a jfá ligeramente libia, ó templada, y lo mismo sé hará cuando tenga sed: pues tanto la sed como lá congoja son síntomas que molestan ruin ho al enfermo, y am- bos sé mitigan coa el agua templada dándosele «in hacer aprecio de la vasca ó vomito, que á veces acaece después dé haberla tomado Esto sucede regularmen- te cu indo se ha acudido prootámente al enfermó, por que cuando »e ha deseada do algíiu tiéto/d la curación, todos bis síntomas referidos »e aumentan con ener- gía h istá que acaban con la vid i del enfermo.; , , Cuando, pues, el enfermo ha *- uipesado á enfriarse, se le harán á un m smo ■tiempo, por tres ó cuat.ro persona», frotaciones con un sepilió, y un li- quido compuesto con la tintura de Cf> mandas,1 aguardiente alcanforado y hojas de tabaco; trabajando, si se ofrece, liaras enteras .cotí’ energía hasta ver si se le restablece el calor, y sudor cali ente, que es tola Ja base de la curación. En- tonces se le pondrán sinapismos y se mantendrá cubierto a orno en el olio ca- so: se podrá favorecer el calor con ladrillos calientes, botellas de agua tibia &c. &c. y si incóinódan algunos calambres en el vientre, so podra usar una tintura an- tipasmódica [esto es cuya base sea el láudano] y untar con élla él vientre. Se , procurará siempre un sudor copioso al enf rmo, por lo que se gradua- rán las frazadas según Convenga aumentándose ó' disto muyéndose, y pudiemio>e contar por termino medio el , numero de tres ó cuatro. Regularmente bis evacuaciones y vómitos, innumerables á veté», y los calambres son en razón di- recta del frió que se apodera del cuerpo, de modo que combatiendo este síntoma ge mitigan los demás. Durante este tiempo no se mudará la ropa de la cama ni camina al enfermo por mas que sude, ni se le permitirá se desabrigue un momen- to. Como quedan luego muy estropeados, es menester guardar «eis íi ocho dias de convalecencia con mucho cuidado, empezando á tomar atole el primer día, so- pa el segundo; y a»i aumentando' progresivamente el alimento, hasta el entero res- tablecimiento. Este tratamiento é» él que me ha producido los imj >res efectos; / ■ -- .. , .iw Antorcha nam. 73.] (o.) Este es cencido comunmente por Aceite de Jguérilla, .Reimpreso en Luis Potosí en la oficina del Estado én P#’ lacio; á cargo de J. Si.' luíante.'