NUEVO MÉTODO CURATIVO, y observaciones hechas sobre ¡a Colera epidémica por los profesores cc,s Vic- toriano Guerrero, Antonio López, Ignacio Moreno, é Ignacio Jurado, Conciudadanos: luego que se presento la epidemia de la Colera Morbo en esta capital, dio un papel el primero que suscribe, resultado de la observación de mas de cincuenta enterraos, y siguió el método espuesto entonces; [«] pero habién- dose observado que la naturaleza de la Cólera es intermitente perniciosa, y tan* to que la mas robusta naturaleza apenas puede sufrir dos acciones; creernos que ■también se puede boy caracterizar el estado actual del sudor, colicuativo, y Jas evacuaciones ventrales como un flujo hemorragico, y no cscremeuticio, y pof Supuesto su curación debe ser la de los flujos asténicos Los tónicos, en particular la quina, los asta ingentes, los marciales, los Mecidos minerales, los vegigatorios ambulantes, la nieve, y sobre lodo el opio, son fas medicinas, que bien administradas salvaran, en nuestro concepto, a la huma* «idad doliente, de tan terrible enemigo que la agovia. Nuestros deseos solo son socorrer a nuestros semejantes, y no conciliar* nos antagonistas: si alguno nos convence con los hechos de nuestros errores, los confesaremos de buena fe, y seguiremos dóciles el buen camino que se nos pre- sente, y solo con este hecho rnerecerémos el aprecio de los que piensan con juicio. Los que quieran atacar en su principio a la Cólera, antes de llamar al facultativo observaran lo siguiente. Luego que se presente evacuación, por ligera que sea, tomará la bebida Siúrn. 7, de una vez; moderara cuanto sea posible el alimento, y por agua de «so una infusión ligera de manzanilla; pero si despu.es de tres horas sigue la eva- cuación, turnara de la di 1 mira. 8 una cucharada cada cuarto de hora; se en- trará á la cama con un mediano abrigo á impedir el estesivo sudor* se aplica-, rá á las pantorrillas y estómago (a cataplasma núm 9, caliente, basta q»e el ar-i dor no sea sufrible ; y en este caso se variará á otro sitio : si á pesar de todo esto siguen Jas deposiciones, se echarán las lavativas del inírn. 6, las que se re- petirán en Seguida una de otra si se arrojan El alimento, para el que tenga proporción, deberá consistir en medio pozuelo de Caldo tiente neo. de J'aletuia, conocido con este nombre en las boti- cas, cada hora; y el que no, tomará arroz muy ligero con un poco de canela y azúcar, tomando muy poco á la vez. Pasando de este estado, ja debe llamars® «i facultativo para que éste dirija la curación. Si alguno quisiere seguir este orden de medicinas, en las oficinas se ha*í lia el formulario de estas y otras de la misma (lase • Guadalaj ra agosto i 5 d« x 833 - - Juicio riano G Herrero. ■ • Antonio López - Ignacio Moreno.-'lgnacio Jurado, (1) Porque como ¡a epidemia {romo se dijo en la nota del impreso) afecta di- ferentes formas, a propon ion que recorre sus periodos de invasión, mus alto gra* Jo y declinación. an sera necesario variar los métodos convenientes. FORMULARIO, NUM. 7. Agía destilada da? verhahuena una onza: ídem de azahar media onza: ídem común onza y media: láudano liquido diez gotas; carbonate de magnesia un escrúpulo; jarave de goma ará*» higa inedia onza.—Mézclese para una toma. NUM. 8. Cocimiento de quina cuatro onzas; tintura de canela dos dracmas: acetato de amoniaca liquido una onza: jarave de corteza de naranja media onza.—Mézclese, m NUM. 9. Levadura común de pan, v polvo fino de mostaza, de cada ono tres onzas: pimiento anual, ó chile quebrantado dos dracmas; sal amoniaco sublimado media onza; atedia onza vinagre de Castilla cuanto baste á formar cataplasma.. NUM. 6. Cocimiento fuerte'de tormentila una libra: láudano liquido dos dracmaS.—Mézclcsa pata la va liras. Imprenta del c, Urbano Sanrornan,